Nombre: Carolina de la Torre Ramos.
Originario: Sonora.
Cargo: Vocera Comunidad Animalera Trabajando (COAT).
COAT (Comunidad Animalera Trabajando) es una organización que nace en Hermosillo, Sonora, en 2005 sin querer a partir de un blog que únicamente ofrecía información animalista y difusión. Dos años después nace COAT que busca el bienestar animal y cambiar mentes.
Ciudad de México, 7 de marzo (SinEmbargo).– Carolina pasó de vivir en una casa con cabezas de venado en las paredes y pistolas de caza en los cajones. Cuando tenía entre seis o siete años de edad, recuerda que acompañó a su padre junto a su hermano a un campo de tiro, ya que su padre practicaba esa actividad. Su infancia temprana, evoca, consistía en ir al campo de tiro donde usaban gallos como tiro al blanco.
“Qué espanto, mi hermano y yo salimos corriendo a rescatar a uno de los gallos que luego fue nuestra mascota. Siempre hubo animales rescatados en casa. Para mí fue natural el amor y respeto por los animales a pesar de la incongruencia de mi papá que afortunadamente salió de mi vida cuando tenía 8 años de edad”, confiesa la activista de Sonora en entrevista con SinEmbargo.
En la actualidad, la comunicóloga y ahora estudiante de la licenciatura de Biología tiene 15 animales, todos rescatados en diferentes circunstancias. Se tratan de 12 gatos y 4 gatas de hogar temporal rescatadas del antirrábico y el resto fueron rescate que se le fueron quedando por no conseguir adopción. También tiene tres perras que rescató y una de hogar temporal.
“Todos son criollos: Aceite, Vampira y Tití; las gatas son Choya, Cookie (del antirrábico de un día de nacida la tengo) Queene, Ricarda, Nube, Bebé, Gutiérrez (del antirrábico), Trigo (del antirrábico), Vulcano (en honor del toro muerto en Tordesillas el año pasado) y las tres caravelas: Pinta, Niña y Santamaría. ¡Los amo!”, exclama la vocera de COAT.
COAT está en medio de la profesionalización como asociación. Este año se cumplen ocho años desde su nacimiento y son tanto activistas como rescatistas, que fue como empezaron. En cuanto al blog que mantenía Carolina, se transformó en una asociación, pues no había otra página en línea que manejara un tema similar.
La activista sonorense explica sentirse orgullosa de COAT y de cómo su proyecto personal fue apropiado e impregnado en la gente, con el discurso de responsabilidad social y derecho animal de la manera que se da en el estado, pues no existía antes de COAT.
La activista se refiere a Sonora como un “estado vaquero” donde ven a los animales como simples mercancías, que se sirven de ellos “sintiéndose superiores”. A pesar que reconoce que se ha hecho un cambio, explica que es evidente que falta mucho por hacer.
“La gente se niega a comprender y aceptar que somos seres vivos, humanos y no humanos, pero que además ellos estaban antes aquí que los humanos y que tienen el mismo derecho a existir, el mismo valor que cualquier humano”, revela la comunicóloga.
Carolina empieza su día en el Centro de Castraciones de COAT (como se encuentran también en su página de Facebook) de 7:00 a 10:00 horas, posteriormente acude a su trabajo en Uniradio Noticias donde trabaja como editora del portal web. A las 16:00 horas sale y actualiza la página oficial en Facebook [COAT] y la de Twitter [@CoatSonora].
“En ocasiones tengo alguna otra actividad animalera que atender, como juntas entre miembros de la AC o externas. Llego a casa al rededor de las 10 de la noche, a sacar a pasear a mis perras, limpiar areneros, dar cenas a las bestias –humanas y no humanas– cenar y dormir”, enlista la sonorense.
Carolina explica que en el estado hace falta foros y espacios para trabajar en el tema, programas de sensibilización en las escuelas, apoyo de las autoridades. “Las asociaciones tenemos disponibilidad, ofrecemos y trabajamos pero no podemos resolver todo. Nos dejan solos”, declara la defensora de los derechos de los animales.
“En México el panorama es similar, sobre todo en las comunidades más aisladas y marginadas, donde se vive tradicionalmente. Estamos en medio de un proceso de transición. Tomará décadas estar a la par de países avanzados en derecho animal. Pero sí veo un México un tanto más sensible”, analiza la vocera de COAT.
Finalmente, entre los obstáculos que encuentra como activista en Sonora es “toparse con la cabeza dura de la gente”, así como la crítica del que “no hace” sobre el que “sí hace” detractores del trabajo en favor de los animales en vez de por los humanos.
“La intolerancia, celos, si, dentro y fuera de la agrupación. Luchar a veces contra corriente, es cansado. Tratar de llevar una idea muchas veces no es bien recibida”, expresa Carolina de la Torre.
Sonora es uno de los estados en donde se llevarán a cabo elecciones este año para elegir a un nuevo Gobernador, por lo que como vocera explica que apuestan por la sensibilización y al diálogo con las autoridades.
