El Instituto Nacional de Astrofísica Óptica y Electrónic informó que “la situación de inseguridad que prevalece en la región es públicamente conocida” y que ya ha informado a las autoridades competentes de los problemas de inseguridad sufridos por sus científicos por lo que confía en que la situación “se resuelva en el corto plazo”.
Ciudad de México, 7 de febrero (AP).— La ciencia también es víctima de la violencia en México. Las autoridades acaban de reducir las actividades de dos instalaciones de observación astronómica situadas en las inmediaciones del pico de Orizaba, en la sierra del estado oriental de Veracruz. El motivo: los numerosos asaltos sufridos por los investigadores.
Según informó el Instituto Nacional de Astrofísica Óptica y Electrónica en un comunicado esta semana, se trata del Gran Telescopio Milimétrico (GTM) Alfonso Serrano y el observatorio de rayos gamma HAWC, ubicados ambos en el Volcán Sierra Negra.
El GTM es el telescopio de plato único y movible más grande del mundo --tiene 50 metros de diámetro-- y es parte de un proyecto binacional entre México y Estados Unidos que recientemente ha iniciado la exploración de los procesos físicos que controlan la formación y evolución de sistemas planetarios, estrellas, hoyos negros y galaxias a través de los 13.7 mil millones de años de historia del universo.
El instituto indica que “la situación de inseguridad que prevalece en la región es públicamente conocida” y que ya ha informado a las autoridades competentes de los problemas de inseguridad sufridos por sus científicos por lo que confía en que la situación “se resuelva en el corto plazo”.
“En cuanto las autoridades nos indiquen la estrategia a seguir, se regularizará el trabajo científico en ambos observatorios”, agrega la nota. “Estamos con toda la disposición para colaborar con la autoridad en la estrategia de seguridad que nos indique”.
El telescopio y el observatorio de rayos gamma están muy cerca del volcán de Orizaba, el pico más alto de México.