Jerusalén, 7 feb (EFE).- Un total de 25 organizaciones humanitarias internacionales que trabajan en zonas ocupadas de Cisjordania y Jerusalén Este denunciaron hoy el enorme incremento de las demoliciones de viviendas palestinas y exigieron a Israel que ponga fin a esta práctica.
En un comunicado difundido a los medios, las citadas asociaciones señalaron que el repunte de la destrucción de casas coincide con el inicio, el pasado verano, de un nuevo esfuerzo de Estados Unidos para tratar de sentar a palestinos e israelíes en la mesa de diálogo.
La nota denuncia, asimismo, las crecientes restricciones que a su trabajo ponen las autoridades israelíes, y que ha llevado al Comité Internacional de la Cruz Roja a adoptar una medida nunca antes vista: la de suspender temporalmente el reparto de tiendas a los desplazados del valle del Jordan.
“Las organizaciones internacionales y locales tenemos que hacer frente a un severo aumento de las restricciones a la hora de responder a las necesidades que crea la demolición ilegal de propiedad civil”, afirma la nota.
“Supone una violación por parte de las autoridades israelíes de su obligación de facilitar la distribución de ayuda humanitaria”, recuerda.
El valle del Jordan se ha convertido en las últimas semanas en uno de los principales puntos de fricción en el acuerdo marco de diálogo que desde el pasado verano promueve, cada vez con mayores dificultades, el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, y que debería estar listo antes de finales de abril.
Israel se resiste a evacuar los asentamientos levantados tras la guerra de 1967 -ilegales según la normativa internacional- y pretende conservar una presencia militar prolongada en esta depresión que linda con Jordania, incluso después de un posible acuerdo de paz.
Los palestinos, por su parte, exigen el desmantelamiento de las colonias y la salida gradual de las tropas, para lo que han ofrecido cinco años de transición y la opción de que se despliegue una fuerza multinacional lidera por EU y la OTAN.
Grupos palestinos también han denunciado que desde que el diálogo comenzó a avanzar Israel ha acelerado la demolición de aldeas en la zona con la intención no declarada de una futura anexión, y crear así un nuevo hecho consumado en las negociaciones.
De acuerdo con las cifras proporcionadas por las organizaciones firmantes, el número de demoliciones se ha duplicado y el de desplazados aumentado en un 75 por ciento desde julio de 2013, fecha en la que arrancó la negociación, en comparación con las cifras del año precedente.
De las 663 estructuras palestinas derribadas -el mayor número en cinco años-, 122 fueron construida gracias a la acción internacional, agregan.
A la denuncia se han sumado también organizaciones y entidades como la ONU y la UE, que han exigido su fin a Israel, que en la mayoría de las ocasiones alega que las construcciones demolidas “carecían de permisos”. EFE
