El reciente escándalo de corrupción que relaciona al alcalde de Monterrey, Fernando Larrazabal Bretón, con dinero de los casinos instalados en la segunda ciudad más importante de México, es sólo la orilla de una historia que viene de varios años atrás, de acuerdo con varias fuentes y con cables del Consulado de Estados Unidos en la capital regia. También alcanza a importantes personajes del Partido Acción Nacional, y llega de manera directa al grupo político del presidente Felipe Calderón.

Larrazabal Bretón, así como Raúl Gracia Guzmán, consejero de la judicatura nuevoleonesa, y Zeferino Salgado Almaguer, delegado de la SCT en Nuevo León, son conocidos como la “Santísima Trinidad”; integran el grupo “San Nicolás” y están vinculados a Calderón desde que éste fuera líder de la bancada panista en la Cámara de Diputados. Larrazabal es amigo personal de varios miembros del gabinete –entre ellos Ernesto Cordero– y lleva una relación de amistad de al menos dos décadas con la ex jefa de la oficina de la Presidencia, Patricia Flores Elizondo.

Larrazabal, Gracia y Salgado están relacionados con actos de corrupción en distintos momentos y por distintas fuentes: desde los cables del Consulado de EU en Monterrey hasta los videos difundidos recientemente. Pero los tres funcionarios son parte también del grupo que apoya la candidatura de Cordero para 2012. Con el secretario de Hacienda han negociado para apoyarse mutuamente.

“El proyecto a mediano plazo del grupo es hacer a Larrazabal senador el próximo año para de ahí lanzarlo a la búsqueda de la gubernatura en 2015. De acuerdo con un connotado panista de San Pedro Garza García, que dio la información a cambio del anonimato, en esa reunión en la Ciudad de México Calderón les ordenó respaldar al secretario de Hacienda, Ernesto Cordero, en sus aspiraciones presidenciales. Los tres tienen una relación de cercanía con el presidente. Gracia fue su compañero de curul en la Cámara de Diputados”, dijo Proceso el 5 de septiembre pasado.

El proyecto político es viable si Cordero alcanza la candidatura presidencial: los tres funcionarios controlan el Comité Directivo del PAN de la entidad, uno de los más importantes del país tanto por su poder económico como por su presencia política nacional.

Sin embargo, sobre el grupo hay sospechas, acusaciones y pruebas de corrupción. Se les vincula con dinero proveniente de los centros de apuestas en la entidad: un cable de Wikileaks recientemente liberado señala, por ejemplo, que el Consulado de Estados Unidos en esa ciudad sospecha de que los casinos financiaron campañas para las alcaldías de la zona metropolitana de la capital regia en 2006.

Estas acusaciones de corrupción alcanzan a otro personaje que en algún momento fue parte del grupo, y posiblemente allí, aunque con un perfil más bajo. Se trata del ex alcalde panista regio Adalberto Madero, pariente del actual presidente nacional panista, Gustavo Madero.

Madero (o “Maderito”, como también se le llama), fue expulsado de Acción Nacional en febrero de 2011 por actos de corrupción que “dañaron la imagen del partido”.

De acuerdo al diario Vanguardia de Saltillo, el Casino Royale de Monterrey tiene dos socios: Raúl Rocha, empresario de CYMSA Corporation S.A. de C.V., y Ramón Madero, dueño de la empresa Atracciones y Emociones Vallarta. El permiso federal que la Secretaria de Gobernación otorgó fue para la empresa de Madero. Rodrigo Aguirre Vizzuett, hijo de Ramón Aguirre –ex regente del DF– estaba asociado con Madero, aunque Vizuett declaró a Milenio Televisión que ellos ya no eran socios de Atracciones y Emociones Vallarta, pues “Madero se apropió de la empresa”.

Ramón Madero es primo del que fuera alcalde de Monterrey de 2005 a 2009, Adalberto Arturo Madero Quiroga, “Maderito”; es de la misma familia del presidente nacional del PAN.

 

LIGAS, CABLES Y SOSPECHAS

De acuerdo con un cable del consulado de Estados Unidos en Monterrey revelado por Wikileaks y difundido en México por el periódico Milenio, la historia de corrupción del grupo viene de tiempo atrás. Los empresarios de casinos José y Arturo Rojas Cardona habrían entregado cinco millones de dólares a los entonces candidatos a alcaldes de Monterrey y San Nicolás de los Garza por el PAN, Adalberto Arturo Madero Quiroga y Zeferino Salgado Almaguer.

Los informes dicen que el ex cónsul estadounidense en Monterrey, Bruce Williamson, envió a la Casa Blanca un cable que lleva por título “Nexos de casinos con candidatos panistas”, en el que salen a relucir los nombres de dos albiazules que encabezaron esas polémicas administraciones, entre 2006 y 2009.

En el documento, fechado el 2 de julio de 2009, Williamson reportó a sus superiores que, de acuerdo a una fuente, los dueños de casinos, José y Arturo Rojas, entregaron en 2006, año electoral en Nuevo León, cinco millones de dólares a quien sería alcalde de Monterrey, Madero Quiroga, y también a Salgado Almaguer, quien ganó en ese mismo año la elección en San Nicolás y actualmente se desempeña como delegado de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes en Nuevo León.

La información del consulado estadounidense también implica a los hermanos Rojas de tener vínculos con el cártel de los Beltrán Leyva y con otros políticos panistas.

El cártel de los Beltrán Leyva estableció uno de sus “santuarios” más importantes en San Pedro Garza García. El actual alcalde, Mauricio Fernández, dijo en 2009 que los Beltrán tenían a sus familias viviendo en ese ayuntamiento.

 

“MADERITO” Y LA VERGÜENZA PANISTA

El 15 de febrero pasado, la Comisión de Orden del Consejo Nacional del PAN expulsó de ese instituto político a Adalberto Madero Quiroga, tras concluirse un proceso iniciado el 27 de septiembre de 2009 por la dirigencia panista de Nuevo León, donde se le acusó de “dañar la imagen” del partido al incumplir sus responsabilidades como presidente municipal y violar los principios doctrinales como el Código de Ética de los Militantes.

La historia de corruptelas de “Maderito” –entre 2006 y 2009– incluye la acusación de empresarios inmobiliarios de imponer cuotas hasta de un millón de pesos por agilizar permisos de construcción, según consta en documentos que detenta la Comisión de Orden Nacional del PAN.

Al político, a quien también se le recuerda por sus problemas físicos al hablar, se le acusó además de eludir al cabildo para concesionar espacios públicos a una empresa de publicidad a cambio de mochilas, computadoras y otros artículos que repartía para ganar adeptos en su búsqueda de postularse a la gubernatura. Esa aspiración fue cortada por la cúpula nacional panista, quien decidió designar a Fernando Elizondo Barragán, quien luego perdió la elección del 6 de julio de 2009 ante el priísta Rodrigo Medina de la Cruz.

Durante la gestión de Madero –abogado y quien ahora tiene 41 años– también se detectó una red de corrupción que obtuvo 20 millones de pesos, mediante la ordeña de los 7 mil 600 parquímetros en la ciudad de Monterrey.

 

EL AMIGO DE LOS CARDONA

En tanto, el tamaulipeco Zeferino, “Chefo”, Delgado Almaguer, quien presidió el municipio de San Nicolás de los Garza en el mismo periodo que “Maderito”, también tiene su historia.

En su administración como alcalde tomó a la seguridad pública como uno de sus principales objetivos. De hecho logró la donación de un helicóptero equipado para labores de vigilancia. Según el diario El Porvenir, Zeferino se negó a identificar a el donador, pero luego se descubrió que el donante era Juan José Cardona Reyes, el “Zar de los casinos” –quien ahora es mencionado por Wikileaks como uno de sus  patrocinadores de campaña– y quien es propietario de un casino en San Nicolás de los Garza.

Delgado Almaguer implementó, además, un programa de vigilancia nocturno que devino en un “toque de queda” no oficial y que generó protestas por parte de organizaciones de derechos humanos.

Aunque presumía que su administración era “de las más eficientes y honestas” en la entidad, terminó su mandato bajo sospechas de corrupción y con una alta penetración del crimen organizado en San Nicolás.

Sin embargo, “Chefo” encontró muy pronto otro cargo. En medio de la polémica, registrada por la prensa local, debido a que no es Ingeniero Civil ni tiene experiencia en vías públicas federales, en febrero de 2010 fue nombrado director general del centro de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) de Nuevo León.

Ya como delegado de la SCT fue detenido por el Ejército –en abril de 2010– en Guerrero, Coahuila, por el delito de portación de arma prohibida (una pistola de 9mm que de acuerdo a las leyes mexicanas no pueden portar los civiles). No obstante, fue liberado sin ninguna sanción.

Desde 2007, los partidos de oposición (PRI y PRD) han denunciado que durante la presidencia de Felipe Calderón Hinojosa, las delegaciones del gobierno federal en las entidades se habían convertido en un brazo actuante del Partido Acción Nacional. Muchos ex funcionarios de gobiernos panistas e incluso directivos del mismo instituto político fueron colocados, según estas denuncias, en las delegaciones para que sirvieran intereses partidistas.

Uno de los mejores ejemplos de las denuncias priístas y perredistas es precisamente el “Chefo”.

 

LAS LIGAS HACIA ARRIBA

Raúl Gracia Guzmán, miembro importante del grupo “Santísima Trinidad” o “San Nicolás”, es panista desde 1995. Fue diputado federal por el VII Distrito Electoral Federal de Nuevo León en la LVIII Legislatura de 2000 a 2003, de ahí viene su amistad y relación con Felipe Calderón, quien entonces coordinaba la bancada blanquiazul.

Según información difundida por la revista Proceso, el presidente de la República convocó a una reunión a Fernando Larrazabal, a Raúl Gracia y a Zeferino Salgado Almaguer; los tres controlan el Comité Directivo del PAN en Nuevo León. La revista dice que el grupo tenía como proyecto de futuro hacer senador a Larrazabal y, luego, en 2015, convertirlo en gobernador de la entidad.

Proceso planteó: “De acuerdo con un connotado panista de San Pedro Garza García, que dio la información a cambio del anonimato, en esa reunión en la Ciudad de México, Calderón les ordenó respaldar al secretario de Hacienda, Ernesto Cordero, en sus aspiraciones presidenciales. Los tres tienen una relación de cercanía con el Presidente. Gracia fue su compañero de curul en la Cámara de Diputados. Ahora los videoescándalos de Manuel Jonás, hermano mayor de Larrazabal, comienzan a afectar a Cordero y en general al PAN, que ha tenido que marcar distancia del hermano del alcalde”.

Por su parte, antes de la enorme polémica desatada por su hermano Jonás y sus funcionarios recibiendo fajos de billetes y negociando permisos con los casinos, el oaxaqueño Fernando Larrazabal había enfrentado un escándalo mayor relacionado con extorsión y delincuencia organizada.

Su jefe de Alcoholes, Rogelio González Heredia, “El Roy”, fue detenido por la Marina el 11 de marzo de 2010 pues “se le vincula con el grupo delictivo de “Los Zetas”, según la Armada de México.