Plagas, confusión de la fauna silvestre con animales molestos

06/06/2015 - 12:06 am
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La sobrepoblación humana y recientemente el fenómeno de globalización ha jugado un papel muy importante en la generación de fauna nociva en todo el planeta. Foto: Shutterstock.

Ciudad de México, 7 de junio (SinEmbargo).–La proliferación de fauna nociva se da en áreas urbanas y en lugares específicos como parques y jardines. En ocasiones, la presencia de estos animales puede representar riesgos para la salud de la población, además que el comercio ambulante, los puestos de comida y la basura incrementan la presencia de este tipo de fauna en estos espacios.

Por otro lado el término  “fauna nociva” tiene un sentido claramente antropocéntrico, ya que evolutiva y ecológicamente ninguna especie puede ser nociva para la propia naturaleza, de acuerdo con un estudio de Alejandro Cruz-Reyes, especialista en parasitología del Departamento de Zoología, Instituto de Biología, Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Este tipo de fauna surge con la urbanización, la agricultura y en general con todo tipo de alteraciones antropogénicas como la deforestación y construcción de presas.

Los animales más comunes que se encuentran en este tipo de clasificación son desde perros y gatos ferales, perros en situación de calle, ratas y ratones, cucarachas, moscas mosquitos, alacranes, hormigas, avispas, incluso murciélagos y moluscos terrestres.

La falta de limpieza en lugares poco accesibles o visibles, así como el control de la población humana son factores que favorecen el establecimiento de focos de contaminación y que atraen a perros callejeros, que en un momento dado pueden convertirse potencialmente en semiferales o ferales.

Antes de intentar erradicar poblaciones de este tipo de animales, es importante localizar a las dependencias y autoridades correspondientes que se puedan hacer cargo de ellas para que no exista contacto directo con las especies, problemas de envenenamiento, ataques por parte de los ejemplares silvestres y que sean retirados de manera ordenada.

TLACUACHE
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En México se considera también que el tlacuache o zarigüeya es parte de esta fauna que deambula por los lugares urbanos durante las noches, donde salen a conseguir comida.

Este animal apareció en la Tierra desde hace aproximadamente sesenta millones de años y come todo tipo de alimento, además acostumbra estar cerca de los seres humanos para alimentarse de frutos, desperdicios, huevos y gallinas.

Por la noche frecuentan escuelas, alcantarillas, coladeras, parques públicos y alacenas. Se han localizado en delegaciones como Gustavo A. Madero y Tlalpan de la Ciudad de México.

El tlacuache es el único marsupial que habita dentro del territorio mexicano y cuenta con una gran adaptación al ambiente y sobretodo al depredador más temible: el hombre. Sin embargo, por más tierno y pequeño que luzca, Este marsupial, puede tener al mismo tiempo y en un solo individuo más de 30 agentes patógenos desde virus hasta artrópodos.

La gran riqueza de parásitos asociados a esta especie se puede deber a su presencia en el continente por más de 65 millones de años, lo que le ha permitido a los marsupiales adquirir resistencia e inmunidad a diversas especies de agentes patógenos, este mamífero es al mismo tiempo hospedero definitivo, intermediario.

La Brigada de Vigilancia Animal de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal atiende llamados para rescatar animales silvestres o aves y posteriormente los canalizan a las dependencias correspondientes como Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) que se hace cargo de ellas.

Por otro lado, esta fauna constituye un eslabón importante en la depredación de otras especies menores dentro de la fauna urbana, por lo que su presencia resulta esencial. Muchos habitantes los exterminan o los lastiman, para deshacerse de ellos y si las autoridades correspondientes no intervienen pueden desaparecer.

RATAS

En la ciudad habitan millones de ella y rondan en todos los lugares, sobre todo proliferan donde hay basura y desechos de comida. Esta especie implica un riesgo para la salud pública por se transportadoras de microorganismos que cuando entran en contacto con alimentos, dejan bacterias que pueden provocar enfermedades como salmonella o amibas.

Son especies hospederos intermediarios de agentes etiológicos de zoonosis (virus, bacterias, protozoarios, hemintos y artrópodos) y su presencia representa un serio riesgo para la salud humana y animal, silvestre y doméstica.

PERROS CALLEJEROS

En diferentes lugares de México y el mundo hay muchas especies de animales ferales, entre las que se cuentan perros, gatos, cerdos y caballos. Foto: Cuartoscuro.
En diferentes lugares de México y el mundo hay muchas especies de
animales ferales, entre las que se cuentan perros, gatos, cerdos y caballos. Foto: Cuartoscuro.

Los perros callejeros pueden ser portadores de parásitos que pueden transmitirse a los humanos, además que los residuos fecales en la vía pública por estas poblaciones representan un problema de salud que va en ascenso gracias al abandono de los animales de compañía, así como el registro de sobrepoblación pro la falta de campañas de esterilización y castración.

GATOS

Ferales o callejeros, también junto con los perros comparten muchos parásitos entre sí pues la mayoría no representa especifidad hospedatoria. Se ha encontrado que no hay mucha diferencia entre la fauna parasitaria de gatos domésticos y ferales ni diferencias sustanciales entre perros y gatos que están bien cuidados como mascotas y los que no lo son.

Los parásitos de los felinos domésticos, ferales y silvestres son numerosos, de los cuales la gran mayoría son zoonóticos, es decir, enfermedades que pueden transmitirse a los seres humanos de animales.

Además que la Ciudad de México cuenta con su propio Centro de Control Canino y Fauna Nociva en Iztapalapa que ofrece el servicio de recepción de reportes de animales agresores, diagnóstico de rabia de animales y más.

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