Ciudad de México, 6 de junio (SinEmbargo).– Un nuevo caso de negligencia médica ocurrió en un hospital de Juchitán, Oaxaca, donde una mujer perdió a su bebé tras esperar durante nueve horas para ser atendida; a la mujer además se le extirpó la matriz debido a complicaciones del parto.
De acuerdo con el testimonio de los familiares de Rosalba Vicente Morales, ella llegó por la mañana al hospital “Macedonio Benítez Fuentes”, sin embargo fue atendida nueve horas después de haber llegado.
Posteriormente fue recibida por la doctora encargada del Centro de Salud de Santa María Xadani, quien le dio la indicación de que se le realizara una cesárea de manera urgente.
La mujer indígena de 30 años originaria de Santa María Xadani, presentó complicaciones debido a la falta de atención médica oportuna, explicó Minerva Vicente Morales, hermana de la víctima.
“Cuando llegó al hospital, le dijeron que sería parto normal, pero aproximadamente a las 7:00 de la noche tuvo un sangrado y la metieron a quirófano, al salir los médicos le dijeron que su bebé había muerto y que tuvieron que quitarle la matriz porque estaba en riesgo su vida”, agregó.
Ante la demora en la atención de la joven madre, que originó la muerte de la bebé y por la extracción de la matriz sin el consentimiento de la afectada, los familiares consideraron que se trata de una negligencia médica y exigieron a las autoridades que se investigue y sancione a los responsables que no atendieron a Rosalba.
El director del hospital, Jerónimo Ramírez, argumentó que la mujer presentaba un embarazo de 35 semanas y tuvo una ruptura de la matriz, pero que todo el tiempo estuvo vigilada y atendida. Explicó que sus colegas trataron de dilatar el cuello de la matiz y aseguró que en todo momento la paciente estuvo bajo supervisión.
Afirmó que en el trabajo de parto se presentó un fenómeno de ruptura de la matriz, que puso en riesgo su vida. También aseveró que Rosalba Vicente Morales tuvo valoraciones de dos ginecólogos y se consideró que no era el momento de operarla, por los antecedentes de dos partos y una cesárea.
El también vocero del hospital oaxaqueño señaló que los familiares tienen el derecho de demandar y que se realicen las investigaciones pertinentes, pero que el personal médico realizó un trabajo adecuado.
OAXACA, ¿CRISIS EN ATENCIÓN GINECO-OBSTETRA?
Esta no es la primera ocasión en que un hospital del estado de Oaxaca presenta un presunto caso de negligencia médica a mujeres embarazadas, apenas a finales de mayo, Gabriela Castañón López, una joven de 18 años, dio a luz en el baño del área de Urgencias del mismo hospital juchiteco, luego de que la valoraron dos veces y consideraron que aún “no había criterios para ingreso a parto”.
En ese contexto, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) anunció que investigaría las presuntas violaciones a las garantías individuales de la joven. Además recordó que la protección de la salud es un derecho elemental para todas las personas y particularmente para las mujeres en estado de gravidez, quienes se encuentran en situación de alta vulnerabilidad y no deben enfrentar negligencia de las autoridades encargadas de brindarles un servicio oportuno, con calidad y calidez.
El caso de Ana Gabriela se suma a otros nueve relacionados con la mala atención a mujeres embarazadas: cinco de ellas dieron a luz afuera de hospitales públicos, mientras que una mujer perdió a su bebé aún estando éste en su vientre tras la falta de atención por parte del personal. Otra mujer falleció porque el personal médico olvidó una tijeras dentro de la matriz de la mujer.
