En los 13 meses que lleva de Gobierno, la aprobación de Andrés Manuel López Obrador ha oscilado entre los 68 por ciento, su cifra más baja de aceptación obtenida en el mes de noviembre pasado, hasta el 81 por ciento que alcanzó en febrero de 2019, de acuerdo con el ponderado de encuestas que realiza el sitio especiaizado Oraculus. La aceptación del tabasqueño es la más alta de un Presidente en su primer año.
Ciudad de México, 6 de enero (SinEmbargo).– La aceptación de Andrés Manuel López Obrador es la más alta de un Presidente al primer año, de acuerdo con el ponderado de encuestas que realiza el sitio especiaizado Oraculus. López Obrador cerró diciembre de 2019 con un 70 por ciento promedio de aceptación y con un 26 por ciento que desaprueba su mandato.
En los 13 meses que lleva de Gobierno, la aprobación del Presidente ha oscilado entre los 68 por ciento, su cifra más baja de aceptación obtenida en el mes de noviembre pasado, hasta el 81 por ciento que alcanzó en febrero de 2019.
Este lunes, la encuesta del diario El Financiero reportó que el Presidente Andrés Manuel López Obrador cerró 2019 con un nivel de aprobación ciudadana de 72 por ciento, en diciembre, cuatro puntos por arriba del mes anterior medición.
Según el estudio, la desaprobación al mandatario registró 27 por ciento, la más baja desde abril de 2019, y la primera medición por debajo de 30 por ciento desde mayo pasado.
En el caso del ponderado de encuestas de Oraculus, que contiene cifras desde Ernesto Zedillo hasta López Obrador, la medición arrojó que Enrique Peña Nieto (2012-2018) es el caso más dramático desde los años 1990, que es desde que se tiene registro. Nunca un Presidente cayó tanto.
Empezó su mandato con una aprobación de hasta 60 por ciento en enero de 2013, con un rechazo de 28 por ciento. Cerró con una desaprobación de 75 por ciento, y apenas un 20 por ciento lo apoyaba al momento de dejar el poder. Contrasta aún más porque se trata del Jefe del Ejecutivo federal que más dinero le dio a la prensa para posicionarse: 60 mil millones de pesos. En cambio, López Obrador es el que menos recursos ha entregado en publicidad oficial a los medios.
Felipe Calderón Hinojosa (2006-2012), quien ganó la Presidencia con un estrecho margen de tan sólo 236 mil 6 votos, tuvo una aprobación del 65 por ciento en su primer año de mandato (2007), con un 27 por ciento de desaprobación.
Su predecesor en el cargo, Vicente Fox Quesada (2000-2006), tenía la aprobación de un 57 por ciento de la población en su primer año de Gobierno (2001), con el 33 por ciento de desaprobación, según el ponderado de encuestas de Oraculus.
Al finalizar su mandato, un 65 por ciento respaldaba su gestión y un 21 por ciento la rechazaba.
El ponderado de encuestas arroja que en el primer año de Ernesto Zedillo Ponce de León (1994-2000), un 38 por ciento aprobaba su mandato y 54 lo rechazaba.
Hacia el final de su sexenio, el priista pudo mejorar sus números de aceptación: para diciembre del 2000, un 71 por ciento lo aprobaba y solo el 16 por ciento lo desaprobaba.