Guatemala, 5 sep (EFE).- La ex Primera Dama Sandra Torres, candidata a la presidencia en las elecciones generales de este domingo en Guatemala, admitió hoy que su partido, Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), no combatió la corrupción cuando gobernó (2008-2012).
En una entrevista con Efe, Torres aseguró que, consciente de que ningún partido ha repetido mandato en la historia de Guatemala, pretende llevar nuevamente al poder a su formación con una esencia “oxigenada” y “evolucionada”.
A escasas horas de que los más de 7.5 millones de electores guatemaltecos acudan a las urnas a renovar autoridades, Torres reconoció que, a pesar del trabajo desarrollado por la UNE durante el mandato de su esposo, Álvaro Colom, quedaron cosas pendientes, como la lucha contra la corrupción.
Explicó que durante el Gobierno de la UNE hubo avances en el clima social o en la seguridad, pero “quizá faltó trabajar más en la lucha contra la corrupción, en la lucha contra la evasión y contra el contrabando, que ahora están castigando al país”.
Para remediar esta situación, Torres abundó que una de las principales líneas de su programa de Gobierno y uno de los retos que asume como postulante a la Presidencia es ahondar en esa batalla.
Por ello, pidió públicamente el apoyo de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (Cicig) para continuar combatiendo “la corrupción, el crimen organizado y el narcotráfico”.
Torres, que se define a sí misma como “una enamorada de Guatemala y de las personas”, recordó que como Primera Dama trabajó codo con codo en los temas sociales, uno de los aspectos “que dio resultado” y con el que continuará si consigue alcanzar el bastón de mando, aunque añadiendo componentes nuevos como “la productividad”, la institucionalidad y “la despolitización”.
Según las últimas encuestas, la ex empresaria textil, de 59 años, es tercera en intención de voto, aunque ella no da mucha importancia a estos datos porque estos sondeos, asegura, no miden el voto de su formación, que tiene mucha fuerza en el área rural.
“Las encuestas llegan hasta donde llega el asfalto. La UNE va más allá del asfalto”, proclamó.
Para estos comicios, los octavos en la era democrática del país, los expertos prevén un aumento de la abstención y el voto nulo, un extremo que comparte Torres, aunque expresa una mayor preocupación por el incremento de la violencia, máxime tras el incidente de ayer, en el que una persona murió, tres resultaron heridas y 25 detenidas.
Este fue el balance de un enfrentamiento armado protagonizado por simpatizantes de dos partidos políticos, simpatizantes de los partidos Libertad Democrática Renovada (Lider) y UNE.
En este sentido, Torres dijo que Baldizón, el ex empresario que comanda Lider, está llamando a la población a hacer actos violentos, un hecho que debería vigilar de cerca el Tribunal Supremo Electoral (TSE), máxime cuando está incumpliendo con la Ley Electoral y de Partidos Políticos.
Torres, nacida el 5 de octubre de 1955 en el municipio de Melchor de Mencos, en el departamento norteño de Petén, dice de sí misma que es la única que puede provocar cambios a “corto plazo” en el país que la población puede percibir.
“Tengo la experiencia, el conocimiento de Estado, he hecho Gobierno, tengo el equipo y la planificación estratégica que es necesaria”, sostuvo convencida, y agregó que no quiere alcanzar la Presidencia para “improvisar” sino para trabajar.
Recuperar la institucionalidad, la honradez y la transparencia del gobierno será algunas de sus máximas prioridades, sobre todo después de que el expresidente Otto Pérez Molina y su exvicepresidenta Roxana Baldetti dimitieran del cargo por ser acusados de participar en la red de corrupción aduanera conocida como “La Línea”.
“El problema con estas figuras (Pérez Molina y Baldetti) es que estaban totalmente contaminadas”, y que altas autoridades se encuentren en esa posición es “inaceptable”. subrayó.
“Que un presidente salga con la cabeza agachada y por la puerta de atrás es lamentable para cualquier país y un atentado contra la institucionalidad”, reiteró, y manifestó que su primera medida al entrar en el poder será “ordenar la casa” porque el Estado está desordenado.
