Ebrard, que se encuentra en la capital estadounidense desde el pasado sábado para tratar de frenar la imposición de los aranceles a todas las importaciones mexicanas, anunció desde la semana pasada que este miércoles se reuniría con Pompeo, pero la implicación de Pence muestra la relevancia que han cobrado las negociaciones.
Ciudad de México, 5 de junio (SinEmbargo).– Marcelo Ebrard Casaubón, titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), informó desde Washington que la delegación mexicana no alcanzó un acuerdo con sus pares de Estados Unidos sobre los temas de aranceles y migración, aunque mañana habrá una nueva reunión.
La amenaza del Presidente Donald Trump de imponer aranceles de 5 por ciento a todas las exportaciones mexicanas sigue en pie y aplicará, si no sucede otra cosa, a partir del próximo lunes.
“Es lo normal […]. Lo importante es que hay entendimiento”, dijo Ebrard. Estaba sonriente, de buen humor, aunque las noticias no son las mejores.
De hecho, no es un buen día para México. Hoy, además, la agencia Moody’s bajó la perspectiva de la calificación de la deuda soberana de México de “estable” a “negativa”, pero dejó la calificación en “A3”. En tanto, Fitch Ratings también revisó a la baja la calificación crediticia de México a “BBB” desde “BBB+” y revisó su perspectiva de “negativa” a “estable”.
Trump anunció el jueves pasado por sorpresa su decisión de aplicar aranceles a las importaciones mexicanas del 5 por ciento -y aumentar los gravámenes gradualmente hasta el 25 por ciento- si México no frena la creciente migración hacia su vecino del norte. Dio hasta el 10 de junio para negociar la entrada en vigor de los primeros aranceles que afectarían a la totalidad de las importaciones procedentes de México.
Trump tuiteó poco antes de la conferencia de prensa de Ebrard: “Las conversaciones con México se reanudarán mañana con el entendimiento de que, si no se llega a un acuerdo, los aranceles en el nivel 5A comenzarán el lunes, con aumentos mensuales según la programación. ¡Cuanto más altas sean las tarifas, mayor será el número de empresas que se trasladarán de vuelta a los Estados Unidos!”.
El mandatario también criticó la negativa del Congreso de Estados Unidos para ceder en la Reforma Migratoria. “Los arrestos fronterizos de mayo son de 133 dólares a causa de México y los demócratas en el Congreso negándose a ceder en la reforma migratoria”, indicó.
Ebrard Casaubón confirmó desde la Embajada de México en Washington, DC, que se tuvo una reunión “cordial”, cada quien defendió sus puntos con firmeza y al final “quedamos que mañana seguirán las conversaciones, porque se plantearon varios puntos que se tienen que cuidar con detalle”.
“En resumen, tuvimos una reunión cordial. Cada quien defendió con argumento y firmeza sus puntos de vista”, dijo el Canciller mexicano. “Al final, ¿en qué quedamos? No era de esperarse que en una reunión de dos horas te pongas de acuerdo en algo. Quedamos que el día de mañana vamos a seguir conversaciones porque se plantearon asuntos que deben ser tratados a detalle”, detalló.
“El día de mañana vamos a tener otras reuniones con ese objetivo, con el objetivo de acercar opiniones”, indicó. Dijo que ambas partes comentaron que la situación actual migratoria no se puede mantener como está. “Entramos en un proceso de negociación y vamos a procurar mañana acercar las posiciones”.
El Canciller planteó que quiere agotar la ronda de esta semana procurando que no haya efectos económicos la próxima semana, tal y como amenazó el Presidente Donald Trump, pensando en el daño que se causaría a la gente tanto en Estados Unidos como en México.
El Vicepresidente Mike Pompeo publicó junto a un tuit un enlace a las últimas cifras sobre detenciones de inmigrantes indocumentados en la frontera entre EE.UU. y México, publicadas hoy por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP). Ese dato se disparó hasta 132 mil 887 en mayo pasado, frente a las 99 mil 304 de abril, lo que continúa una tendencia al alza en las detenciones que ha rozado récords y que las autoridades estadounidenses califican de crisis.
Ebrard, que se encuentra en la capital estadounidense desde el pasado sábado para tratar de frenar la imposición de los aranceles a todas las importaciones mexicanas, ya anunció la semana pasada que este miércoles se reuniría con Pompeo, pero la implicación de Pence muestra la relevancia que han cobrado las negociaciones.
El vicepresidente ha asumido un papel de liderazgo en los esfuerzos de la Casa Blanca para que el Congreso ratifique el tratado comercial T-MEC con México y Canadá, cuyo destino peligra a raíz de la amenaza de Trump de gravar todas las importaciones mexicanas, algo que ha sido criticado también por los republicanos.
Trump anunció la semana pasada que el próximo lunes 10 de junio impondrá aranceles, que empezarán en el 5 por ciento y ascenderán cada mes hasta llegar al 25 % en octubre, a todos los productos procedentes de México, a no ser que el país vecino logre contener el flujo migratorio a través de la frontera común.
El canciller mexicano calculó este martes que hay un 80 por ciento de posibilidades que haya “un entendimiento” con Estados Unidos para solucionar “el incremento importante en el flujo migratorio” y así evitar que se cumpla la amenaza de Trump de imponer los aranceles.
Aunque fuentes de la Casa Blanca aseguraron a la cadena CNN que no se esperaba un acuerdo en la reunión de hoy entre Pence y Ebrard, hay una creciente presión contra el plan de Trump por parte de varios senadores republicanos, que temen el efecto que tendrá en la economía estadounidense.