Merkel defiende su liderazgo en un baño de masas en el congreso CDU

04/12/2012 - 8:40 am

Hannover (Alemania), 4 dic (dpa) – La canciller alemana, Angela Merkel, defendió hoy su liderazgo en el congreso federal de su Unión Cristianodemócrata (CDU), segura de haber hecho los deberes y de contar con el apoyo de los suyos, sin nadie que le haga sombra.

En un discurso plagado de elogios a la política de su partido y a su gobierno, “el más exitoso desde 1990”, Merkel dejó claro que había que celebrar el balance del gobierno de la CDU “sin ningún tipo de duda”.

“El buen desarrollo del país no ha caído del cielo. Proviene del trabajo y podemos estar orgullosos”, afirmó la presidenta del partido desde hace doce años ante el congreso en Hannover, norte de Alemania. Se da por hecho que por la tarde será reelegida por séptima vez consecutiva como líder de la CDU.

Ataviada con un sobrio e inusual traje de chaqueta negro, Merkel recordó sin embargo la difícil situación que atraviesa Europa y auguró tiempos revueltos los próximos años en Alemania.

“Son tiempos turbulentos. Y a veces nos encontramos en un mar tormentoso y complejo”, dijo ante los mil delegados del partido. En esa situación de crisis, la CDU puede dirigir el país “sin duda con una brújula segura”.

Bajo el lema “Alemania fuerte, oportunidades para todos”, Merkel insistió en que su gobierno sacó a Alemania fortalecida de la crisis, pero admitió que “aún queda mucho por hacer” y advirtió que “nadie puede decir cuándo acabará la crisis de deuda de la zona euro”.

A pesar de los numerosos aplausos que cosechó a lo largo de su discurso de una hora de duración, Merkel quiso señalar que no se habían reunido sólo para darse “palmaditas en la espalda”.

“Sabemos que el desarrollo económico el año que viene no será mejor que éste y eso se puede aplicar a los demás países. Alemania no está por encima del resto de países”, afirmó.

Merkel quiso señalar que Europa se encuentra en un momento decisivo. “El más importante desde la creación de la Unión Europea (UE)”, dijo.

“Los instrumentos que necesitamos ya están sobre la mesa: pacto fiscal, unión bancaria, Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) para ayudar a los países en crisis y el programa de compra de bonos del Banco Central Europeo (BCE) con condiciones precisas”, enumeró la lider cristianodemócrata.

No obstante, hizo un llamamiento a permanecer “prudentes” e indicó que la actual crisis no puede resolverse “de un golpe” y tampoco con mecanismos como los eurobonos.

“La crisis no se resolverá de la noche a la mañana, porque no se originó tampoco de repente”, declaró para señalar a continuación que quiere un euro fuerte.

“No quiero solo salvar el euro. Quiero que el euro salga más fuerte de la crisis de lo que entró en ella”, resaltó, y apeló a la necesidad de Alemania de contar con una divisa fuerte.

Merkel aseguró que todas sus decisiones se centran en este objetivo, incluida la reciente votación en el Bundestag (Cámara Baja) a favor de conceder un nuevo tramo de ayuda a Grecia.

“Siempre tengo en cuenta la zona euro, porque cada decisión que se tome en ella tiene un efecto en Alemania”, indicó, y volvió a insistir, como lleva haciendo en sus últimas comparecencias públicas, que a “Alemania sólo le irá bien si le va bien a Europa”.

“Si queremos jugar un papel importante en el mundo, eso sólo es posible dentro de la UE”, agregó. En este punto, la canciller volvió a solicitar la necesidad de implantar cuanto antes la tasa a las transacciones financieras, “aunque sólo se implante en diez países de la UE”, y apeló a la necesidad de regular el mercado financiero.

Además de la crisis, la canciller apuntó como otros retos de los próximos años el conflicto en Cercano Oriente, el cambio energético en Alemania o los desafíos que plantea Internet, “bendición y maldición a la vez”.

La canciller alemana estableció como piedras angulares de su política el trabajo y la educación. “Trabajamos por un país donde la gente tenga nuevas oportunidades y donde el mayor tesoro son nuestros niños, a los que hay que darles la mejor educación”.

En este punto, aprovechó para recordar la importancia de la familia y de las mujeres. “Son ellas las que asumen la responsabilidad al final”, señaló, y por ello defendió el objetivo de mejorar las pensiones de las mujeres que hayan tenido hijos antes de 1992. Según la ley actual eso sólo se aplica a las que fueron madres a partir de ese año.

De cara a las elecciones generales de septiembre de 2013, en las que parte como favorita en las encuestas, Merkel apostó por reeditar su actual coalición de gobierno con los liberales del FDP pese a la crisis que atraviesa el partido y su imparable caída en los sondeos.

Su discurso concluyó con un aplauso de al menos siete minutos de duración, durante el que Merkel, como si de una super estrella se tratara, tuvo que salir hasta en tres ocasiones al escenario para agradecer la ovación.

La duración de los aplausos es un símbolo del apoyo con que cuenta el presidente de la CDU. En la última ocasión Merkel recibió una ovación de seis minutos de duración y por eso se esperaba que al menos se igualara el nivel del año pasado en el congreso federal de Leipzig, aunque la propia Merkel le quiso quitar importancia el día antes señalando que el aplauso no es lo importante, sino el discurso.

en Sinembargo al Aire

Opinión

Opinión en video

más leídas

más leídas