La banda de rock Enjambre nació en Anaheim, Estados Unidos, pero ha alcanzado públicos masivos en su país de origen. “Nuestro sueño americano fue en Ciudad de México, y las oportunidades no tienen que ver con un país, sino con el individuo; llevamos la música a donde la gente la quería y ahí fue creciendo nuestro proyecto”, narra el vocalista Humberto Navejas.
Ciudad de México, 4 de mayo (LaOpinión/SinEmbargo).- Luis Humberto Navejas, vocalista de Enjambre, no tiene muy claro cómo es que su banda, que nació en un garaje de Anaheim, encontró el éxito masivo en México, donde miles y miles de fans asisten a sus conciertos, algo que no les sucede en Estados Unidos.
“Simplemente nos empezaron a llevar a México y comenzamos a tener tanto trabajo que pensamos quedarnos por unos meses, y terminamos haciendo nuestra vida acá”, dijo Luis Humberto, quien precisamente hablaba desde allá, unos días antes de que el grupo participara en el Pa’l Norte, un festival que se realiza en Monterrey, México, cada año, y que reúne a la plana mayor del rock iberoamericano.
Pero ese es solo uno de los eventos a los que Enjambre es convocado con regularidad. Además son asiduos invitados al Festival Iberoamericano de Cultura Musical Vive Latino, donde han estado seis veces –tres han tocado en el escenario principal–, y han llenado el Auditorio Nacional y el Palacio de los Deportes, ambos lugares para conciertos masivos en la Ciudad de México.
Y aunque la trillada frase de que uno no es profeta en su tierra describe la experiencia de esta banda, Luis Humberto, cuya familia emigró al sur de California a finales de los noventa, cree que es erróneo pensar “que por decreto o por derecho te tienen que escuchar de donde eres”.
“Nuestro sueño americano fue en Ciudad de México, y las oportunidades no tienen que ver con un país, sino con el individuo; llevamos la música a donde la gente la quería y ahí fue creciendo nuestro proyecto”, dijo el vocalista, quien integra la agrupación junto con sus hermanos Rafael y Julián, además de Javier Mejía y Ángel Sánchez.
Esto sucedió hace casi una década, y a la fecha, Enjambre ya cuenta con seis discos en su repertorio; el más reciente es “Imperfecto extraño”, con el cual están de gira. En Los Angeles, Estados Unidos lo presentarán el próxima martes.
Y aunque este teatro es pequeño y la audiencia de Enjambre por estas tierras no se compara con la que tiene en México, Luis Humberto, cuya familia es originaria de Fresnillo, Zacatecas, se siente satisfecho de que con el tiempo el número de seguidores ha ido en aumento.
La culpa ha sido de la industria del disco, dice, puesto que Enjambre nació justo cuando la gente dejó de comprar álbumes físicos y comenzó a consumir música por internet y por otras vías. Sin embargo, al mismo tiempo fue benéfico para ellos porque eso obligó a los rockeros de hueso colorado a ir los conciertos para enterarse qué nuevas propuestas se estaban gestando.
“Al final, la recompensa es estar en el escenario y cantar nuestra música”, reconoció. “El resto de lo que obtengamos ya es ganancia”.
