En Madrid, España se celebra del 3 al 8 de abril el Primer Festival de Cine Hecho por Mujeres, ahí la cineasta chilena Marcela Said resaltó la importancia de hacer y mostrar cine hecho por mujeres.
España, 4 de abril (EFE).- La cineasta chilena Marcela Said tiene muy claro que estamos en un “proceso irreversible” para lograr la verdadera igualdad de mujeres y hombres y por eso considera imprescindible que realizadoras como ella muestren su apoyo al cine hecho por mujeres.
“Hemos sido cómplices, sin saberlo, del machismo”, afirma. Y ser conscientes de ello ha sido el punto de partida del cambio de la situación en el cine y en cualquier otra área, resalta Said en una entrevista con Efe en Madrid, España, donde hoy participa en el Primer Festival de Cine Hecho por Mujeres.
Lo hace con una conferencia titulada “Abordar el proceso creativo desde lo íntimo y transformarlo en una obra de interés público, más universal”, que dará en la sede de Casa América y en la que también abordará el papel de la mujer en el cine. El de realizadoras como ella y de personajes como la Mariana de su película Los perros, con la que logró el premio a mejor película iberoamericana en el último Festival de Cine de San Sebastián.
Su película se desarrolla en el contexto político de Chile, donde conviven víctimas de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-2000) con responsables de los crímenes cometidos durante ese periodo que no han sido juzgados ni condenados.
Pero es en realidad la historia de una mujer “que trata de liberarse del yugo machista, que empieza a tomar conciencia del sometimiento y trata de salir de ahí poco a poco”, resalta Said.
Antonia Zegers interpreta a Mariana, la protagonista de una película que empezó centrada en la complicidad civil durante la dictadura de Pinochet para irse transformando en el proceso de escritura del guion en el retrato de esa mujer que se da cuenta de que “el mundo entero es patriarcal”.
Algo que en la realidad está ocurriendo gracias al movimiento feminista que se ha generalizado en todo el mundo y en el que cada persona puede participar desde su área de influencia, resalta Said, para quien en ese contexto es importante su participación en el festival de cine hecho por mujeres.
E insiste especialmente en la necesidad de “visibilizar el problema del feminicidio” y en tipificar legalmente como tal un delito que se repite en México, Argentina, Chile o España.
Said recuerda con dolor el caso de Ana Orantes, una mujer española que fue asesinada por su marido en 1997 pocos días después de haberse atrevido a denunciar en televisión los maltratos sufridos durante 40 años.
Fue un punto de inflexión, recuerda la cineasta, que reitera que el hombre debe abandonar la violencia y la mujer debe perder el miedo a denunciar.
“Somos dueñas de nuestro cuerpo y no pertenecemos a nadie”, dice Said, que considera que hasta que todas las mujeres no interioricen ese principio básico, no se acabará con el problema.
Es necesaria, agrega, “la solidaridad de mujeres con mujeres” y mejorar la educación de los hijos, sobre todo de los chicos. “Es nuestra responsabilidad”, agrega convencida.
