Irán ya condenó a muerte en el pasado a supuestos espías estadounidenses e israelíes; el último de los ejecutados fue Shahram Amiri, que desertó a Estados Unidos en el apogeo de los esfuerzos de occidente para frenar el programa nuclear de Teherán.
Teherán, Irán, 4 de febrero (AP).— El Alto Tribunal de Irán ratificó la pena capital a un iraní condenado por espiar para la CIA, según un funcionario. Medios estatales reportaron que el acusado compartió supuestamente detalles del programa nuclear de la República Islámica con la agencia de espionaje de Estados Unidos.
El vocero judicial Gholamhossein Esmaili, identificó al presunto espía como Amir Rahimpour y dijo que será ejecutado pronto, pero no ofreció más detalles de las acusaciones en su contra, ni su edad ni sus antecedentes; medios estatales no dieron el nombre de su abogado de inmediato.
Sin embargo, un reporte de la agencia noticiosa estatal IRNA señaló que Rahimpour recibió dinero de la CIA a cambio de detalles sobre el programa nuclear iraní.
“Mientras estuvo en contacto con la agencia de espionaje, ganó mucho dinero como salarios al intentar entregar alguna información del programa nuclear iraní a la agencia estadounidense”, publicó IRNA. Rahimpour “había sido identificado, procesado y sentenciado a muerte y, recientemente, la Corte Suprema Nacional confirmó la sentencia y, si dios quiere, será castigado pronto”.
La CIA no respondió de inmediato a una petición de comentarios.
Otros dos supuestos espías de la CIA recibieron sendas condenas de 15 años de prisión, 10 por el delito de espionaje y cinco por actuar contra la seguridad nacional, apuntó Esmaili.
El portavoz no identificó a los detenidos, pero dijo que trabajaban en el “campo de la ayuda humanitaria”, sin dar más detalles.
Irán ya condenó a muerte en el pasado a supuestos espías estadounidenses e israelíes; el último de los ejecutados fue Shahram Amiri, que desertó a Estados Unidos en el apogeo de los esfuerzos de occidente para frenar el programa nuclear de Teherán.
Cuando regresó en 2010, fue recibido con flores por líderes del Gobierno, e incluso entró al circuito de los programas de la televisión iraní, pero entonces, desapareció misteriosamente.
Fue ahorcado en agosto de 2016, la misma semana en que Teherán ejecutó a un grupo de insurgentes y un año después de firmar un histórico acuerdo nuclear para limitar su enriquecimiento de uranio a cambio del levantamiento de las sanciones económicas.
Las tensiones entre Irán y Estados Unidos siguen elevadas desde que el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, decidió unilateralmente retirar a su país del pacto.
En enero, un dron de Washington mató al General de la Guardia Revolucionaria iraní Qassem Soleimani en Bagdad, un asesinato dirigido que llevó a Teherán a lanzar misiles balísticos contra las tropas iraquíes que albergan a soldados estadounidenses.