Dos rojas, 12 amarillas y tres goles; Pumas se impone a las Águilas en semifinal polémica

03/12/2015 - 9:10 pm

El encuentro entre América y Pumas es un encuentro que cualquier aficionado no puede dejar pasar. El hecho de que ahora se presente en Liguilla lo hace más emocionante y el juego de ida celebrado en el estadio Azteca fue la muestra.

La afición universitaria se retiró triunfante del Azteca. Foto.: Cuartoscuro
La afición universitaria se retiró triunfante del Azteca. Foto.: Cuartoscuro

Ciudad de México, 3 de noviembre (SinEmbargo).- Las horas previas a esta tarde estuvieron especialmente llenas de especulaciones en la capital de México. Con un futbol que constantemente oscila entre lo insólito y lo mediocre, las semifinales del torneo de Apertura 2015 parecían premiar al fin a los aficionados al futbol en México.

Águilas y Pumas se vieron las caras en el Coloso de Santa Úrsula como parte del juego de ida de las semifinales de la Liga Mx. el escenario resultaba inmejorable.

De esta manera, el inicio fue lo que se esperaba de un partido de este calibre: vertiginoso, de ida y vuelta; los pumas sacaban provecho de la velocidad de sus delanteros y mientras que los americanistas contestaban con contragolpes y disparos de media distancia.

Al minuto 6 un disparo de Arroyo dio el primer aviso, luego de ser desviado y pasar peligrosamente cerca del marco de Alejandro Palacios. Un minuto después fue Osvaldo Martínez que deja a la afición amoricanista con el grito de gol ahogado luego de que hiciera un disparo aso que pasó a centímetros del poste izquierdo del “Pikolín”.

Al 16’ los Pumas tendrían su primera clara. sin embargo, el árbitro anula la jugada. Matías Britos había rematado sólo en el centro del área de Moises Muñoz y puso el balón al fondo de la red. No obstante, el delantero se encontraba adelantado al momento de rematar, de acuerdo con el árbitro.

Para el 33’ pumas ya tenía tres jugadores amonestados: Samudio, Cabrera y Alcoba. La situación no era la más conveniente para los auriazules, sobre todo tomando en cuenta el ritmo del partido. Sin embargo, apenas era el comienzo del festival de tarjetas que estaba por venir.

La presión azulcrema se incrementó conforme se acercaba el final de la primera mitad. No obstante, la intensidad al momento de disputar el balón seguía en la misma tónica que al inicio. Entonces, el América también añadió un amonestado a la lista que ya empezaba a crecer: Pablo Aguilar.

Los Pumas, sin mucha idea al frente se dedicaron a resistir los embates de los de Coapa quienes tuvieron otras dos oportunidades de anotar. Finalmente, Fernando Guerrero no cedió minutos extras y pitó justo al 45’ para enviar a ambos equipos a los vestuarios.

El inicio fue reñido, pero al final el América perdió la cabeza. Foto: Cuartoscuro
El inicio fue reñido, pero al final el América perdió la cabeza. Foto: Cuartoscuro

Para el inicio del segundo tiempo el vértigo del América se mantenía. Al minuto 47 Oribe cruzó el balón agónicamente de lado a lado del área chica de Palacios ante el susto de la defensa universitaria, que sólo miró como la pelota abandonaba del campo.

Al 51′ Aguilar se llevó la segunda amarilla luego de cometerle falta a Sosa, quien ya armaba un contragolpe peligroso. En cuestión de minutos el americanista estuvo a punto de convertirse en héroe y de pronto dejó en desventaja a su equipo.

Estaba claro que el árbitro Fernando Guerrero no tenía otra manera de contener la intensidad de América y Pumas que no fuera mediante tarjetas. Al 55’ siguió con su marcha implacable, sumando a Britos a su lista negra. Momentos después, al 59, Paul Aguilar aumentaría la cuenta.

Finalmente, Ismael Sosa decidió poner un alto al protagonismo arbitral ante la displicencia de la defensa del Ámerica que no logró rechazar el balón de su área. El gol calló a la parcialidad local en la tribuna, mientras que la afición visitante celebró el tanto que por fin había llegado.

Sin embargo el festejo se opacó apenas instantes después. Un conato de bronca a mitad del campo estuvo a punto de convertirse en batalla campal que dejó pintados de amarillo a Eduardo Herrera y a Osvaldo Martínez. Entre el mar de empujones Samudio se llevó su segundo cartón preventivo y también fue echado. El América, que en gran parte del juego mostró más claridad al ataque se quedaba en franca desventaja faltando menos de media hora para el final del encuentro.

A partir de este momento el juego se volvió más un asunto de garra y, pese a la diferencia de jugadores entre ambas escuadras, la superioridad numérica no se reflejaba en el marcador de manera contundente. Fernando Guerrero seguía en lo suyo y al minuto 71 amonestó a Sambueza.

Por fin, al 73’ Gerardo Alcoba aprovechó la situación privilegiada y remató solo, luego de que el balón pasara entre las piernas de delanteros y defensas que se apostaban en el área de “Moi” Muñoz. Pero no era todo, al 78’ Eduardo Herrera colocó una pesada lápida en la espalda de los de Coapa con un magnífico cabezazo que ponía las cosas en el Azteca 0-3.

La desilusión se hizo presente entre los aficionados americanistas que poco a poco comenzaron a abandonar el estadio incluso antes de que se terminara el juego. Un partido que de inicio prometía para los locales y después se convirtió en una pesadilla. Por otra parte, la abrumadora presencia del árbitro central, también se convirtió en una presencia aplastante: 12 tarjetas amarillas y 2 tarjetas rojas en total.

Mientras tanto, los universitarios parecen haberle puesto fin a la maldición del superlíder… Por ahora. El marcador, por otro lado, incluso tratándose del juego de ida, ya da la impresión de ser imposible de remontar para el América.

Alineaciones

América: Muñoz, Aguilar, Goltz, Aguilar, Samudio, Guerrero, Martínez, Sambueza, Arroyo, Quintero y Peralta.

Pumas: Palacios, Alatorre, Alcoba, Verón, Fuentes, Cabrera, Cortés, Martínez, Herrera, Sosa y Britos.

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