Se desvanecen las esperanzas de que las dos primeras economías mundiales, China y Estados Unidos, alcancen una acuerdo esta semana antes de que Washington empiece a cobrar aranceles sobre importaciones chinas por valor de 34 mil millones de dólares.
Este martes, Rusia se sumó otros cinco países y la Unión Europea para tomar medidas a través de la Organización Mundial de Comercio en contra de Estados Unidos por los aranceles al aluminio y acero impuestos por el gobierno del Presidente Donald Trump.
BEIJING, 2 de julio (AP). — China dice estar “totalmente preparada” para una guerra comercial con Estados Unidos si ésta comienza el viernes.
Se desvanecen las esperanzas de que las dos primeras economías mundiales alcancen una acuerdo esta semana antes de que Washington empiece a cobrar aranceles sobre importaciones chinas por valor de 34 mil millones de dólares. Beijing ha prometido tomar represalias por el mismo monto.
La cancillería dijo el martes que China estará “plenamente preparada para tomar un paquete de medidas necesarias” en defensa de sus intereses nacionales.
En Estados Unidos, una gama de empresas desde destilerías de whiskey hasta fábricas de automotores podrían verse afectadas por las represalias chinas.
El Presidente Donald Trump acusa a China de adquirir tecnología estadounidense de manera indebida y limitar el acceso de las firmas tecnológicas y financieras a su mercado, denuncias rechazadas por Beijing.
RUSIA INICIA CONTROVERSIA
Rusia se sumó otros cinco países y la Unión Europea para tomar medidas a través de la Organización Mundial de Comercio en contra de Estados Unidos por los aranceles al aluminio y acero impuestos por el gobierno del Presidente Donald Trump.
Un funcionario de comercio dijo que Moscú ha dado inicio a un proceso de disputa en contra de Estados Unidos por los aranceles de 25 por ciento al acero y 10 por ciento al aluminio, al hacer circular el pedido el lunes entre países miembros de la OMC en Ginebra.
Así, Rusia se suma a China, la India, la UE, Canadá, México y Noruega en iniciar uno de estos procesos de disputa.
La medida da inicio a un período de consultas entre las partes involucradas para discutir el asunto, y si no se logra un acuerdo después de 60 días, Rusia puede pedir a un panel de la OMC que intervenga.