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El coronavirus pega a Italia: piden el regreso de médicos retirados y adelantar la graduación en Enfermería

02/03/2020 - 12:18 pm

La región de Lombardía ha sido el epicentro de la enfermedad en Italia, al ser el lugar donde se registró el primer caso en el norte y actual escenario de 984 de los mil 694 casos en el país. Lo más alarmante es que el 10 por ciento de los médicos y enfermeros de la región no pueden trabajar porque han dado positivo de la dolencia y están en cuarentena, declaró el director de salud pública de la zona, Giulio Gallera.

Mientras en todo el mundo se abrían nuevos frentes de batalla contra el nuevo coronavirus, pacientes recuperados salían de los hospitales y zonas de aislamiento construidos a toda velocidad en China, liberando camas en la ciudad más golpeada por la COVID-19, la enfermedad que produce el virus.

Por Nicole Winfield, Colleen Barry, Hyung Jin Kim y Kim Tong-Hyung

Milán, Italia, 2 de marzo (AP) — El surgimiento del coronavirus ha abrumado tanto al sistema de salud pública de Italia que ha obligado a las autoridades a tomar medidas extraordinarias como tratar de que médicos retirados regresen a trabajar o adelantar la fecha de graduación de estudiantes de enfermería.

La región de Lombardía ha sido el epicentro de la enfermedad en Italia, al ser el lugar donde se registró el primer caso en el norte y actual escenario de 984 de los mil 694 casos en el país. Lo más alarmante es que el 10 por ciento de los médicos y enfermeros de la región no pueden trabajar porque han dado positivo de la dolencia y están en cuarentena, declaró el director de salud pública de la zona, Giulio Gallera.

Las autoridades vaticinan que la cifra de casos seguirá aumentando por lo menos otra semana más debido a que tarda unos días para que surtan efecto las medidas de contención.

Autoridades italianas indican, que pese a la cantidad de casos de coronavirus, ya van 43 personas que se recuperan a la infección. Foto: AP

Los hospitales en Lodi y Cremona estaban tan abrumados la semana pasada que tuvieron que cerrar la sala de emergencias y obligar a los pacientes a acudir a otras instalaciones.

“Efectivamente los hospitales en Lombardía están bajo una presión que es mucho más intensa de lo que esta zona puede soportar y para la que se ha entrenado durante años”, advirtió el doctor Massimo Galli, director de enfermedades infecciosas del Hospital Sacco de Milán, al canal Sky TG24. “Esta epidemia es de una magnitud mucho mayor a la que se podría imaginar o prevenir”.

El Gobierno de Lombardía le ha pedido al Gobierno central hacer que vuelvan a trabajar doctores y enfermeros retirados. Además de ello, los estudiantes de enfermería que iban a tomar sus exámenes finales el mes entrante en lugar de ello se graduarán en los próximos días para que puedan salir a trabajar inmediatamente, indicó Gallera.

“Contrataremos a quien sea: los viejos, los jóvenes. Necesitamos personal, especialmente personal cualificado en medicina”, expresó Gallera a reporteros.

Hospitales privados en Lombardía han ofrecido espacios en sus unidades de cuidados intensivos y más de una docena de doctores privados han accedido a trabajar en el sector público a fin de aliviar la crisis, manifestó el mandatario regional Attilio Fontana. Las autoridades regionales les han pedido a los hospitales de Lombardía reducir en un 70 por ciento las cirugías electivas, a fin de poder ofrecer camas para pacientes del virus.

Subrayando la gravedad de la situación, el mismo Fontana ha estado en cuarentena por varios días debido a que uno de sus asesores dio positivo del virus. Otro representante del Gobierno regional dio positivo el lunes, por lo que todo el personal tuvo que someterse a pruebas. Fontana ha estado durmiendo en su despacho y aparece en la conferencia de prensa diaria por video.

CORONAVIRUS LLENA CADA VEZ MÁS LUGARES DE HOSPITALES EN EL MUNDO

El brote vírico en Corea del Sur siguió creciendo y millones de niños en Japón se quedaron en casa el lunes en lugar de ir a clase, mientras las autoridades de más de 60 países combatían una epidemia que ya ha llegado a Estados Unidos, donde han muerto dos personas y había indicios de un brote mayor.

Mientras en todo el mundo se abrían nuevos frentes de batalla contra el nuevo coronavirus, pacientes recuperados salían de los hospitales y zonas de aislamiento construidos a toda velocidad en China, liberando camas en la ciudad más golpeada por la COVID-19, la enfermedad que produce el virus.

China, donde comenzó la epidemia en diciembre, reportó apenas 202 nuevos casos en las 24 horas previas, con otras 42 muertes. Eso elevó el total del país a 80 mil 026 casos, con 2 mil 912 muertes registradas en total. La mayoría de los casos nuevos fueron en la ciudad de Wuhan, donde también se dio de alta a 2 mil 570 pacientes.

El aumento del lunes fue el más bajo en China desde el 21 de enero. China seguía teniendo unas tres cuartas partes de los casi 89 mil casos en todo el mundo, aunque los focos en países como Corea del Sur, Italia e Irán experimentaban bruscos aumentos.

Para el domingo, Estados Unidos contabilizó 80 casos y dos muertes, ambos hombres con problemas previos de salud que fueron hospitalizados en el estado de Washington. El total estadounidense incluía a los evacuados de Wuhan y de un crucero afectado por el virus. Sin embargo, las nuevas infecciones en Nueva York, Rhode Island, el estado de Washington y entre personal médico en California aumentaron la preocupación en ambas costas del país.

El segundo fallecido en Estados Unidos era un septuagenario que vivía en una residencia cerca de Seattle, donde se hicieron pruebas a docenas de personas enfermas para determinar si sufrían el virus, según autoridades sanitarias del estado. El virus podría llevar semanas circulando por el estado de Washington sin ser detectado, según dijeron antes investigadores.

Soldados del ejército surcoreano, portando trajes protectores, rocían desinfectante para prevenir el contagio con el nuevo coronavirus en la estación de trenes de Dongdaegu en Daegu, Corea del Sur, el sábado 29 de febrero de 2020. Foto: Kim Hyun-tai/Yonhap vía AP
Soldados del ejército surcoreano, portando trajes protectores, rocían desinfectante para prevenir el contagio con el nuevo coronavirus en la estación de trenes de Dongdaegu en Daegu, Corea del Sur, el sábado 29 de febrero de 2020. Foto: Kim Hyun-tai/Yonhap vía AP

Indonesia confirmó sus primeros casos el lunes, dos personas contagiadas por un viajero extranjero.

En Corea del Sur, el líder de 88 años de la Iglesia de Shincheonji, una comunidad que concentra el mayor foco de infecciones del país, se inclinó dos veces en el suelo y se disculpó en una improvisada conferencia de prensa por propagar la enfermedad de forma “inintencionada”.

“No sé qué palabras de disculpa debería ofrecer (...) También lo hicimos lo mejor que pudimos, pero no pudimos contenerlo por completo”, dijo Lee, que llevaba una mascarilla blanca. “Cooperamos de inmediato (con los esfuerzos de cuarentena), pero en realidad no hay nada que pueda decir”.

Las instituciones cristianas tradicionales consideran a la Iglesia de Lee como una secta. Durante su intervención el lunes, algunas personas exclamaron “Secta” y “Desmantelad la Iglesia de Shincheonji”.

Corea del Sur informó el lunes de 599 casos nuevos hasta un total de 4 mil 335, la mayoría en la ciudad suroriental de Daegú y sus alrededores. Un total de 26 personas han muerto. Más de la mitad de los casos tienen lazos con la rama local de la Iglesia de Shincheonji. La primera paciente conocida en la ciudad fue una feligresa que asistió a varios servicios religiosos antes de que se le diagnosticara la enfermedad el 18 de febrero. Hasta la confirmación de su caso, Corea del Sur había reportado sólo 30 casos.

El brote ha sobrepasado el sistema sanitario surcoreano. Al menos cuatro ancianos que esperaban a ser hospitalizados.

En adelante, las plazas de hospital se reservarán a pacientes graves o con problemas médicos previos y los pacientes con síntomas más leves serán aislados en instalaciones designadas fuera de los hospitales, indicó el Viceministro surcoreano de Salud, Kim Jang-lip.

Un trabajador sanitario con ropa de protección camina entre ambulancias para trasladar a pacientes en Daegu, Corea del Sur, el domingo 1 de marzo de 2020. Foto: Ryu Young-seok/Yonhap vía AP
Un trabajador sanitario con ropa de protección camina entre ambulancias para trasladar a pacientes en Daegu, Corea del Sur, el domingo 1 de marzo de 2020. Foto: Ryu Young-seok/Yonhap vía AP

Corea del Sur informó de 476 casos nuevos, sumando un total de 4 mil 212. Veintidós personas han muerto.

La sensación de crisis en aumento golpeó los mercados financieros, vació las calles principales y atracciones turísticas y obligó a millones de personas a cambiar su rutina.

En Japón, muchas escuelas empezaron a seguir el plan del Primer Ministro, Shinzo Abe, de cerrar durante más de un mes al final del curso académico japonés.

Si bien el virus ha causado problemas graves especialmente entre ancianos y personas con problemas de salud previos, la mayoría de los pacientes han tenido síntomas leves y algunos infectados parecen no mostrar síntomas en absoluto.
Pero los esfuerzos por contener el virus son amplios.

El Museo del Louvre cerró después de que Francia limitara las grandes aglomeraciones, y Estados Unidos desaconsejó viajar a la región del norte de Italia donde se concentra el foco local de infecciones. Los brotes y los crecientes reparos a viajar podrían asestar un duro golpe a los sectores turísticos de esos países. La primavera y especialmente la Semana Santa o Pascua, es una época muy popular de viajes con niños a Francia e Italia.

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