Ciudad de México, 1 de febrero (SinEmbargo).- Cada inicio de año uno de los mayores espectáculos deportivos en el mundo tiene lugar: el Súper Bowl. En esta ocasión los Patriotas de Nueva Inglaterra y los Halcones Marinos de Seattle se enfrentarán para tratar de quedarse con el trofeo Vince Lombardi en la edición número 49 de esta instancia final. Sin embargo, antes de que esto ocurra, ambos equipos deberán enfrentarse durante cuatro cuartos que a más de uno le parecen eternos.
No obstante, antes de adentrarse en el ritual que implica observar el desarrollo del partido final de la temporada, existe todo un trasfondo que sirve sobre todo para que hasta el más inexperto aficionado pueda entender el desarrollo del partido más grande la liga de futbol americano estadounidense.
Así, mientras que para algunos este deporte es una especie de ajedrez que involucra golpes, para otros se trata de lo más cercano que puede haber en el ramo deportivo que se compare a la estrategia militar.
Lo cierto es que el futbol americano y la milicia tienen mucho en común, pero más allá de que ambos se basen en la estrategia, la formación, también hay mucha tecnología de por medio en sus actividades. Las comparaciones son tantas que sería interminable una lista de casos en los que la tecnología militar cruza su camino con el deporte de las tacleadas. No todos estos inventos comenzaron con los militares, pero es justo decir que los militares no hubieran hecho uso de ellos, el fútbol americano no los habría puesto en uso.
Cascos
Los duros cascos de cuero usados por los jugadores durante los albores de este deporte tuvieron su origen en un lugar improbable: la Marina. En 1890, un médico le dijo el almirante Joseph M. Reeves (que asistía a la academia naval de la época) que si recibía más golpes directos en el fútbol moriría o sufriría de “locura instantánea.” Así que Reeves, quien tenía un zapatero, elaboró un casco de cuero para defenderse de algunos golpes. Si bien, los avances todavía no son grandes con los cascos, su innovación se convirtió en un paso gigante para la evolución de este deporte, publicó la revista Popular Science.
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Hombreras
Los investigadores de la compañía Dupont inventaron el Kevlar, y en los años ’70 los militares solicitaron dicha tecnología para su uso en chalecos antibalas. Ahora, años después, algunas protecciones superiores en el fútbol americano están utilizando “fibras aramídicas” similares con versiones personalizadas que ahora consiguen algunos atletas. Así mismo, incluso hay empresas de artículos deportivos que buscan sumar el Kevlar a estos aditamentos.
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Línea de down electrónica
¿Que sería de los televidentes sin la ya característica línea amarilla que sirve de referencia entre cada jugada? Stan Honey inventó esa línea que permite a los espectadores en casa saber qué tan cerca está un equipo para un primer down. En una entrevista con el diario San Francisco Chronicle, Honey explicó que esto inició a partir de un trabajo de “seguimiento y percepción remota” para los militares y en 1998, fundó su propia compañía, Sportvision, para lanzar dicha tecnología.
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GPS
Los equipos comenzaron a emplear el GPS para rastrear a los jugadores en el campo en los últimos años, dándoles a los entrenadores un seguimiento, jugada tras jugada, de datos sobre el desempeño de los atletas, con la esperanza de que puedan mejorarlo. En la NFL, los Halcones de Atlanta han equipado jugadores con tecnología similar para predecir y prevenir lesiones. Parece novedoso, pero ha pasado mucho tiempo desde que se desarrollara el primer satélite GPS de los militares en 1995.
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Drones
En años recientes, la NFL ha estado presionando a la Administración Federal de Aviación de Estados unidos (AFA, por sus siglas en inglés) para permitir el uso de aviones no tripulados –por lo general en dominio de los militares– sobre los estadios durante los partidos. Si bien se trata de una tecnología que no incide en el desarrollo del partido, su adición podría representar un nuevo rumbo para las estrategias desarrolladas por los entrenadores así como para los espectadores, quienes podrían acceder a nuevas y espectaculares tomas. La suma de los drones aún se mira con ciertas reservas, no obstante, el año pasado, un avión no tripulado voló sobre el Super Bowl XLVIII para reforzar la seguridad del evento.
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Análisis de sangre para conmociones cerebrales
Esta es una tecnología que aún no llega al emparrillado, pero con suerte su aplicación se verá pronto en lo deportivo. Los militares han desarrollado lo que, dicen, es un simple análisis de sangre para el diagnóstico de conmociones cerebrales. Dada la controversia existente sobre dicho tema, la NFL no podría estar más interesada. Sólo queda esperar a que se ponga en marcha para cuidar la salud de los deportistas.
