El especialista señala que si tiene alergia o intolerancia alimentaria, si el problema por ejemplo son las proteínas de leche de vaca, esto se puede solucionar si la madre se quita la leche de la dieta en el caso de la leche materna, o si es con biberón cambiándose a leches hidrolizadas, que generan menos gases, por ejemplo.
MADRID, 01 de mayo (EuropaPress).- Uno de los problemas más temidos por los padres novatos son los cólicos del lactante. Probablemente nunca antes has oído hablar de ello hasta que te ha tocado, pero cuando te toca, lo hace en serio y te informas hasta donde puedes para solucionarlo cuanto antes. El llanto de un bebé con cólicos, desconsolado y durante horas, así lo requiere.
Incluso en la actualidad son muchos los pediatras que alegan que se desconoce la causa del cólico del lactante, no hay tratamiento para ello, y además creen que estos desaparecen solos con el tiempo. Les restan importancia, “ya pasará”, pero según asegura este experto en una entrevista con EuropaPress: “Tienen solución”.
Así, y según afirma, los cólicos del lactante no necesitan resolverse con medicación, salvo casos muy puntuales (1 de cada 7 según precisa con probióticos o antiácidos para el reflujo ácido), y la mayor parte de ellos desaparecen cambiando ciertas pautas en la forma de atender al bebé.
Con ello, y para identificar que un bebé presenta estos temidos cólicos debe cumplir la conocida como “regla de los 3 treses”: “Llora entre tres semanas y tres meses de edad, llora más de tres horas al día, y más de tres días por semana”, aunque en algunos casos reconoce que pueden durar algo más de esos tres meses.
Igualmente, Garrido señala que si tiene alergia o intolerancia alimentaria, si el problema por ejemplo son las proteínas de leche de vaca, esto se puede solucionar si la madre se quita la leche de la dieta en el caso de la leche materna, o si es con biberón cambiándose a leches hidrolizadas, que generan menos gases, por ejemplo.
Además, resalta que para aliviar los cólicos en general, y los gases en particular, una de las herramientas más útiles es el porteo.
“Si estamos ante una pauta de alimentación incorrecta o deficitaria, le doy alimentos cuando ya llora, con el porteo en cuanto ves que está inquieto se le da el pecho, se le da de comer antes; además con el porteo el niño recibe los estímulos que necesita para su desarrollo, recibe el movimiento, el contacto, el olor o el calor, que hacen que esas necesidades estén bien cubiertas y su nivel de estrés sea menor, lo que también hace que tengan menos ácido en el estómago”, agrega.
Igualmente, menciona que otra de las soluciones a los cólicos reside en el colecho, ya que esta práctica puede ayudar a cubrir necesidades durante la noche, especialmente en los niños de alta demanda. Finalmente, apunta a la fisioterapia, como otra herramienta útil en los casos de cólicos del lactante, ya que hay varias técnicas que pueden servir, como por ejemplo la manipulación vertebral suave, o el masaje infantil, aparte de que puede contribuir a una recuperación más rápida y a aliviar los síntomas.