Ciudad de México, 31 de diciembre (SinEmbargo).– Durante los próximos 12 meses, el Presidente de México, Enrique Peña Nieto, enfrentará un clima de insatisfacción por la falta de liderazgo y la turbulencia económica, advirtió el semanario inglés The Economist en su publicación especial “El mundo en 2015”, en la que hace previsiones sobre cómo enfrentarán los distintos países el año que está por iniciar.
La publicación, que durante los últimos meses ha sido crítica con la administración del primer Presidente priista desde el año 2000, consideró que en el país existe indignación, ya que la gestión de Peña Nieto se vio opacada esta año por el caso de los 43 estudiantes desaparecidos de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, Guerrero, hace tres meses “y probablemente masacrados por narcotraficantes en septiembre pasado, en Iguala, Guerrero. Tal fue el impacto que la agencia calificadora Standard & Poor’s sostuvo hace poco que la violencia y el narcotráfico constituyen en 2015 un desafío para el liderazgo de Peña Nieto y, por consiguiente, para su capacidad para implementar su agenda económica”.
En el año que está por comenzar, planteó el pronóstico, habrá una mayor presión social para que el Presidente tome acciones en contra de la delincuencia organizada, lo cual se puede anticipar luego de las “masivas manifestaciones” en todo el país.
“Habrá quejas en contra de la democracia. Insatisfacción por la falta de liderazgo. Turbulencia económica global”, anticipó.
Consideró que para México, el 2014 fue un año de claroscuros, pues a pesar de que con reformas cruciales como la energética, que abre el sector a la inversión privada, la de telecomunicaciones y la de salud, el Jefe del Ejecutivo federal buscó mostrar al mundo “un México nuevo, pero los viejos vicios pudieron más”.
En el ámbito económico también previó un panorama sombrío, debido a la caída en el precio del barril de la mezcla mexicana de exportación que de registrar en junio un precio de superior a los 102 dólares ayer cerró en 46.27 dólares, lo que ya ha provocado una baja de 3.5 por ciento en los ingresos públicos por la venta del hidrocarburo.
The Economist publicó en sus previsiones un amplio comentario sobre la Reforma Energética, que en 2015 será la prueba de fuego para Petróleos Mexicanos (Pemex), ya que por primera vez tendrá que competir en su territorio con otras empresas internacionales.
Para Pemex, el año será difícil, argumentó la publicación, ya que durante décadas se caracterizó por sus prácticas poco eficientes, prebendas al sindicato y la nula promoción de la competencia, lo que llevó a la ahora Empresa Productiva del Estado a una caída constante en la producción. En 2004, México era el quinto país con mayores reservas probadas del hidrocarburo, ahora se encuentra en el lugar 18.
A pesar de los reclamos hacia el Presidente y la volatilidad financiera, la prestigiada revista inglesa previó que el año entrante será en el que México alcance la meta de crecer 4 por ciento.
Considero que un factor que podría jugar a favor y en contra de México, es la recuperación económica de Estados Unidos que tendrá gasolina barata, mayor consumo e inversión empresarial pujante.
La mala noticia es que el petróleo barato podría llevar a algunos productores de gas shale a la bancarrota en 2015, en tanto que un dólar más fuerte golpeará a la economía mexicana, ya que gran parte de sus importaciones –sobre todo del sector alimentos– provienen de este país.
VA A SER PEOR: CIUDADANOS
Como parte de su presentación del número especial, la publicación incluyo testimonios de ciudadanos quienes dan su punto de vista sobre el México que esperan en 2015.
La mayoría de los entrevistados expresó su desesperanza ante la falta de empleo, seguridad social, violencia, carencias y la deficiente educación. También expusieron su decepción ante la sospecha de que continúe el aumento de impuestos, tal y como se registró este año con la Reforma Fiscal.
“El próximo año va a ser peor, cada año va a ser peor”, aseguró uno de los entrevistados.
“Yo creo que las reformas, mientras no se combata la impunidad y no haya Estado de Derecho, van a salir para beneficiar a cierto tipo de gente”, dijo otro de los encuestados.
LA INCONFORMIDAD GLOBAL
Daniel Franklin, editor del número especial, resumió que durante gran parte de 2015 las divisiones del mundo atraerán la mayor atención. Mientras que algunas economías están avanzando, otros están en peligro de volver a caer en recesión, advirtió.
Destacó el caso de Argentina, donde en el último año de su gobierno la Presidenta Cristina Kirchner enfrentará “el riesgo de una inflación desenfrenada, revueltas populares y una crisis de pagos”.
A grandes rasgos, predijo que 2015 será un año en el que los ciudadanos del mundo expresaran sus quejas contra los sistemas vigentes, ya que se sienten insatisfechos y desilusionados con sus líderes, quienes han resultado ser poco hábiles para resolver sus exigencias.
El año que comienza en una horas también estará caracterizado por desacuerdos y la falta de soluciones a problemas sociales cotidianos como el desempleo y la falta de crecimiento en Europa y en la India, o la baja productividad y la inseguridad en gran parte de Latinoamérica.
Además habrá mayores protestas contra regímenes como el chino, que no han logrado evolucionar hacia un sistema democrático.
Estados Unidos, auguró, continuará con su turbulencia política de cara a las elecciones presidenciales del 2016, lo que complicará aún más la relación entre el Presidente demócrata Barack Obama y el Congreso, el cual, a partir de enero, estará liderado por una mayoría republicana tanto en el Senado como en la Cámara de Representantes.
Por su parte, Rusia tendrá que encontrar la salida a la devaluación de su moneda pues, de no hacerlo en el corto plazo, la imagen del mandatario, Vladimir Putin, podría sufrir un grave deterioro.