México, 31 Ene. (Notimex).- La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) precisó que continuará la política de ajustes graduales en los precios de los combustibles, pero aún no define si el desliz se aplicará este fin de semana o el siguiente.
El titular de la Unidad de Planeación Económica de la Hacienda Pública de la dependencia, Ernesto Revilla, informó a Notimex que la dependencia federal aún no define si el próximo desliz en el precio de los combustibles será el primero o segundo sábado de cada mes.
"No hay ningún cambio en la política de precios, pero todavía no hemos hecho ningún anuncio" dijo en entrevista respecto a cuándo será el día de su próxima aplicación, que sería la segunda de este año.
Al término de la presentación de los "Informes de la situación económica, las finanzas públicas y la deuda pública" al cuarto trimestre de 2012, el funcionario explicó que en cuanto la Secretaría de Hacienda defina esta fecha, la dará a conocer.
De acuerdo con información de la SHCP, al cierre de 2012, el subsidio a las gasolinas y el diesel sumó 222 mil 757.3 millones de pesos, el monto más alto desde 2008.
Durante la rueda de prensa, el funcionario consideró que si durante el año pasado no hubiera existido el desliz en el precio de las gasolinas y diesel, como una política pública, "el subsidio hubiera sido mayor".
Los deslices contribuyen no solamente a atenuar las fluctuaciones en el precio internacional de las gasolinas para los consumidores, sino para darle sostenibilidad y fortaleza a las finanzas públicas, argumentó.
Por su parte, el titular de la Unidad de Política de Ingresos, Rodrigo Barros, refirió que a lo largo del año pasado se siguió una política de "suavización" de los incrementos internacionales de los combustibles.
Esta política, expuso, busca equilibrar por un lado, suavizar los impactos que los incrementos en los precios internacionales de los combustibles tienen sobre la situación de las empresas de los hogares.
Por el otro, atenuar el efecto sobre las finanzas públicas de la diferencia entre los precios de referencia, que son los internacionales, y los precios domésticos, pensando que se pueden traducir en efectos permanentes.
Así, precisó, la política de ajustes graduales en los precios de las gasolinas y el diesel busca balancear estos dos objetivos y se fija en función de cómo evoluciona el precio internacional de referencia y la inflación doméstica.