Ciudad de México, 30 de agosto (SinEmbargo).– Uno de los grupos racistas más antiguos y radicales en Estados Unidos: el Ku Klux Klan (KKK), que ha llamado a disparar contra los menores migrantes y exhibir sus cadáveres en la frontera, así como a realizar protestas en contra de los indocumentados, ha extendido su campaña con propaganda racista y de reclutamiento hasta Hampton Bays, una comunidad en Nueva York en donde el 30 por ciento de las personas son de origen hispano.
The New York Times da cuenta del hallazgo de panfletos metidos en bolsas de plástico para sándwiches, junto con algunos caramelos Jolly Rancher, los cuales son arrojados a las calles en medio de la noche. “No hay nada sofisticado acerca del continuo impulso del Ku Klux Klan para reclutar nuevos miembros”, dice el reportaje publicado por el diario.
“Ellos no tenían la suficiente planeación para pensar en dónde debían poner [los folletos], o dónde no”, dijo al Times Karen Fritsch, de 56 años, cuyo marido descubrió un paquete de esta propaganda el mismo día que sus vecinos, inmigrantes colombianos, encontraron uno.
Fernando Álvarez, migrante latino, dijo a la cadena CBS de Nueva York sentirse sorprendido por que exista un “grupo de odio” en esa localidad. Agregó estar preocupado por ser blanco de algún ataque del KKK.
Otros habitantes de la Columbine Avenue también descubrieron los volantes metidos en sus buzones.
“Es ofensivo”, dijo un hombre a CBS. “No hay duda de ello”, agregó.
“Estoy triste”, declaró una vecina.
De acuerdo con el medio, el volanteo ha tenido lugar desde finales de julio a la fecha; se ha limitado a dos o tres calles y aunque varios vecinos encontraron panfletos, sólo cuatro se quejaron ante las autoridades.
La propaganda de reclutamiento del KKK consta de una imagen con tres migrantes impresa en papel roído y con la leyenda: “Nosotros queremos sus trabajos, Nosotros queremos sus casas, Nosotros queremos su país”.
También tiene “una introducción a la plataforma y principios” del grupo. Además pide el apoyo para “una ley nacional contra la práctica de la homosexualidad” para enviar tropas de Estados Unidos en “nuestra frontera para DETENER el flujo de inmigrantes ilegales”, y promover “nuestra cultura única europea (blanco)”.
“Desde que esto es considerado constitucionalmente protegido por la libertad de expresión, la policía de Southampton Town dice que no hay delincuencia”, publica The New York Times.
En el reportaje da cuenta de como “el gran número de inmigrantes de México y Centroamérica, que llega a ese estado deseoso de cubrir puestos de trabajo de baja categoría en industrias agrícolas o de servicios de la región […] ha causado episodios feos”.
Menciona dos ataques por motivos raciales ocurridos en 2000 y 2008. En el primero relata el asesinato de dos jornaleros mexicanos que fueron apuñalados y golpeados con herramientas dentro de un edificio abandonado. En el segundo, menciona el caso de un adolescente blanco que fue declarado culpable de matar a un inmigrante hispano en una estación de tren que se convirtió en un emblema de crímenes similares contra los migrantes recién llegados.
En entrevista con el medio neoyorquino, Robert J. Jones, que se hace llamar el gran dragón de los leales caballeros blancos, dijo que su organización está detrás de la campaña de Hampton Bays y que fue motivada por la oleada de inmigrantes que entran a EU.
“Muchos estadounidenses están hartos de la inmigración en este momento […] los inmigrantes vienen a América [Estados Unidos], están destruyendo este lugar.”
Jones dijo que esfuerzos similares están en marcha en todo el país. Comentó que en Hampton Bays el trabajo es realizado por un hombre de 32 años de edad que no quiso identificar, pero que, según él, vive en la ciudad, donde dirige un “Klavern” o clan local, que es uno de tres en el estado de Nueva York.
El miembro del grupo racista radical dijo que varias personas han enviado solicitudes a una dirección que aparece en los folletos o han llamado al número telefónico. “Nunca he visto el Klan en expansión como es ahora”, dijo.
Sin embargo, publica de The New York Times, “a pesar de cualquier éxito que el Sr. Jones pudiera presumir, el Ku Klux Klan hoy es un grupo débil, de acuerdo con los que el seguimiento de los grupos de odio”.
En contraparte, la hermana Mary Beth Moore, quien dirige el Centro Corazón de María, un grupo de defensa sin fines de lucro con sede en Hampton Bays, calificó la propaganda como “una cosa repugnante” y “preocupante”, y otro problema más que deben enfrentan los inmigrantes locales.
Dijo que muchos latinos viven en la pobreza, dentro de “casas más modestas” y sumado a eso, sus hijos tienen dificultades para hablar o leer Inglés.
“Ellos no son aceptados”, agregó la hermana Moore. “Hay una tensión, sobre todo en Hampton Bays, porque es de los condados más pobres, y la gente aquí tiene una vida modesta. Ellos se sienten acorralados, porque nosotros tenemos la mayor población de latinos “.
En tanto, Anna Trono-Holst, el supervisor de la ciudad de Southampton, dijo que el volanteo no era “del todo un reflejo de la comunidad en que vivimos”. Pero no puede restarse importancia, agregó; tambié dijo que es ofensivo que líderes de la ciudad realicen un mitin al respecto.
A principios de agosto, el periodista Robert Ray de Al-Jazeera Latina se reunió con dos miembros del Klan en Pelham, Carolina del Norte, quienes le dijeron que los migrantes “están violando la ley cuando vienen aquí”.
“Si no podemos regresarlos, podríamos hacer estallar un par de ellos y dejar los cadáveres en la frontera, y quizás entonces nos crean que estamos serios en detener la inmigración”, agregó. “Si no, van a continuar viniendo y viniendo y quebrantando la ley”.
Por su parte, Fox News dice que el Ku Klux Klan no está simplemente dedicado a los niños migrantes: han comenzado a utilizar la crisis de la inmigración como medio de reclutamiento de nuevos miembros.
Fox News Latino dijo que los grupos en Carolina del Sur han estado utilizando un lema para atraer a nuevos miembros: “Salvemos nuestra tierra, únete al Klan”.
La televisora dice que los miembros del Klan distribuyen una bolsa con un número de teléfono, un Hotline Klan que conduce a otro mensaje que dice: “Sé un hombre, únete al Klan. La inmigración ilegal está destruyendo América [Estados Unidos]”.
