Cada año además se identifica esa enfermedad en un promedio de 20 mil 444 pacientes de todas las edades, de las cuales mueren cinco mil 680 sobre todo en los estados del norte del país y en Jalisco, dijo una especialista del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP).
México, 29 Nov (Notimex).- Cada día ocho mujeres menores de 40 años son diagnosticadas con cáncer de mama, un padecimiento que, como en otros países en vías de desarrollo, amplía su presencia entre las más jóvenes, señaló la especialista Lizbeth López Carrillo.
Cada año además se identifica esa enfermedad en un promedio de 20 mil 444 pacientes de todas las edades, de las cuales mueren cinco mil 680 sobre todo en los estados del norte del país y en Jalisco, añadió la profesora-investigadora del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP).
De esa cifra “ 90 por ciento de los casos se conocen por autodetección, mientras que se cuenta con una cobertura diagnóstica por mamografía de un poco más de 20 por ciento”, puntualizó durante el Primer Seminario sobre Cáncer de Mama.
Al respecto el profesor Malaquías López Cervantes de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México, que organizó el acto, comentó que las mujeres con que realizan el tamizaje (evaluación de una enfermedad específica en personas asintomáticas) reducen en 20 por ciento las posibilidades de morir por este mal.
El también jefe del Departamento de Salud Pública de esa casa de estudios recomendó, en un comunicado, hacer una reflexión profunda sobre los métodos, pues por cada caso que se previene hay tres sobrediagnosticados.
El propósito del tamizaje es adelantar el pronóstico para mejorarlo mediante la intervención oportuna, sostuvo.
A nivel mundial hay un debate sobre la periodicidad con la que las mujeres deben hacerse la mamografía, pues algunas organizaciones la recomiendan de forma anual y otras bianual, en tanto que se ha flexibilizado la edad a la que deben hacerse ese estudio pero siempre se coincide en que de los 35 a los 55 años es el grupo de mayor vigilancia.
En México ese proceso aún es tardío, pues de los casos nuevos, 90 por ciento son detectados por la propia mujer en etapas de diseminación y sólo dos por ciento se identifican en etapas in situ o en el estadio uno.
Respecto a los métodos, en el país se utilizan básicamente tres: el autoexamen de seno, el examen clínico y la mamografía, que es una exploración de imagen por rayos X de la glándula mamaria con la cual se detectan protuberancias, tumores y calcificaciones en las estructuras fibroepiteliales internas.
Al hablar de los avances del tratamiento, el jefe del Departamento de Tumores Mamarios del Instituto Nacional de Cancerología (INCan), Juan Enrique Bergalló Rocha, indicó que en 1950 el promedio de sobrevida en mujeres con tumores mamarios era de 40 por ciento, actualmente sobreviven 80 por ciento.
Entre los factores de riesgo los expertos enlistaron los reproductivos y hormonales, la susceptibilidad genética, los contaminantes ambientales, el estilo de vida y los hábitos dietéticos.
El consumo de anticonceptivos orales durante 10 años incrementa 14 por ciento el riesgo, por lo que recomendaron una vigilancia constante, especialmente a las pacientes en edad reproductiva.
La lactancia disminuye el riesgo de adquirir este tipo de cáncer, pero aumenta tras la menopausia y con la obesidad.
“Hemos avanzado en la detección temprana, pero en muchos países el diagnóstico aún es tardío y la célula del cáncer tiene muchos mecanismos para desarrollarse. Aunque hay una relación entre el tamaño del tumor y el avance de la enfermedad, a veces causan la muerte los de un centímetro”, resaltó.
En respuesta a la ampliación de este padecimiento en mujeres jóvenes y en edad reproductiva, el INCan cuenta con un programa especial para ese grupo, en el que se considera la cirugía conservadora y estética para preservar la mama en el mejor estado posible, así como la radioterapia.