Ciudad de México, 25 de diciembre (SinEmbargo).-La dieta en las fiestas decembrinas y en consecuencia, de los recalentados hasta principios de enero puede tratarse de un menú que no resulte tan placentero ni saludable para todos los integrantes del hogar. Para animales de compañía como gatos y perros, algunos alimentos no son lo más recomendable para su consumo.
1. MARISCOS
Tanto para perros y gatos, los mariscos representan un alimento que puede ocasionarles malestares en caso de consumirlos. Mientras que para los humanos comer tres camarones es una porción pequeña, no lo es para los gatos, pues son alto en proteínas y en exceso puede ocasionarles indigestión.
Para los perros, aunque no tienen problemas con este alimento las cáscaras de los camarones pueden ocasionarles el mismo problema. Por otro lado, los dálmatas son los únicos que deberán evitar esta comida.
2. CHOCOLATE
Pocas sustancias son tan nocivas para la salud de estos animales si la consumen. El chocolate es tóxico para perros y gatos ya que la teobromina que contiene puede provocarles aceleración de ritmo cardíaco, diarreas y vómitos.
En casos más severos, puede provocarles la muerte a los gatos porque eliminan de manera muy lenta esta sustancia aún si es consumida en pequeña porción.
Cualquier dulce o chocolate que pueda estar al alcance de los animales de compañía deberá ser alejada porque no es nada recomendable para estos animales.
3. ALCOHOL
Cualquier cantidad de bebidas alcohólicas es nociva para la salud de los canes, no sólo no aporta nada a su alimentación sino que es tóxica. Nunca está demás alejar las botellas y las bebidas de lugares donde puedan ser consumidas por los animales.
4. SALMÓN Y QUESO
El salmón ahumado, los quesos curados, los patés pueden producir en los gatos gastroenteritis, vómitos y diarreas ya que son alimentos con altas cantidades de grasas, lo cual implica esfuerzos extras para el estómago de los animales.
Los lácteos como quesos o yogures en algunos postres también perjudican la salud de los perros, porque sus organismos no procesan la lactosa y menos en grandes cantidades. Los perros, a diferencia de los humanos, no tienen la enzima que metaboliza esta sustancia y puede provocarles vómitos, diarreas o problemas digestivos.
5. UVAS
Si en los hogares se mantiene la tradición de consumir uvas para el festejo de año nuevo, deberán ser apartadas de lugares donde las mascotas puedan comerlas, ya sea de las mesas o de donde se almacenen, así como de los restos de la basura. Las uvas son tóxicas para el perro porque influyen en el funcionamiento de sus riñones.