La empresa de origen mexicano se encuentra actualmente en mesas de negociación con los trabajadores de una de sus cadenas en Estados Unidos. Allá, tanto la comunidad como los trabajadores han emprendido luchas legales y un boicot en el que se estima la participación de 80 mil consumidores.
Ciudad de México, 28 de noviembre (SinEmbargo).– Después de dos años de haber iniciado una lucha legal, los trabajadores de El Súper, filial estadounidense de la compañía de supermercados Chedraui, buscan unirse con sus homólogos mexicanos para hacer que la empresa comience a respetar sus derechos laborales a través de la obtención de un contrato colectivo.
En Estados Unidos, son siete las tiendas sindicalizadas de El Súper, que durante los últimos dos años han exigido a la empresa mejores condiciones laborales, que van desde la implementación del contrato colectivo, al pago hasta seis semanas de vacaciones que les fueron arrebatadas de manera arbitraria. Otra de las exigencias es que la empresa iguale los salarios que ofrece con los de otras tiendas departamentales que ofrecen los mismos servicios en las mismas zonas.
El contrato colectivo de trabajo es una modalidad que se tiene en la gran mayoría de los países occidentales; tiene por objetivo mejorar las condiciones de trabajo respecto a los mínimos que establecen las leyes laborales y es un derecho que establece la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Durante todo este tiempo, el Sindicato Internacional de Trabajadores Unidos de la Alimentación y del Comercio (UFCW por sus siglas en inglés) ha señalado las acciones a las que la empresa ha recurrido para empantanar la organización de los trabajadores, derivado de las acciones que el gobierno, por las demandas interpuestas ha emprendido en contra de El Súper. Por ejemplo, la Corte Federal ha obligado a la empresa a regresar a las mesas de negociación con los trabajadores y que recontrate a varios líderes sindicales que había despedido. También se ha evidenciado la implantación de sindicatos de mentira en las tiendas en México, lo que complica la creación de sindicatos independientes.
El Súper tiene 50 supermercados con más de 5 mil trabajadores en Estados Unidos y aunque no todas las tiendas cuentan con sindicato, los trabajadores y sus familias se han solidarizado con los que enfrentan el proceso legal a través de “El Súper boicot” al que se han sumado casi 80 mil consumidores, según las cifras de la UFCW.
La demanda que los trabajadores estadounidenses pusieron contra las tiendas de Chedraui, se hizo bajo los esquemas de acuerdos de ambos países en materia de comercio comercial, en específico del acuerdo laboral del Tratado de Libre Comercio con América del Norte (TLCAN).
En entrevista para SinEmbargo, Rigoberto Valdez, vicepresidente del UFCW, habló del nuevo alcance de la demanda, que busca incluir a los trabajadores de Chedraui en México.
“A nivel internacional, Chedraui es vista como una empresa que viola derechos laborales. Es una compañía a la que no le interesa violar la Ley […] Vamos avanzando en nuestro objetivo, que es hacer una demanda internacional. Nos estamos organizando con consumidores y ellos también nos relatan sus experiencias, en las que tienen productos caducos. Esto nos ayuda a entender cómo es que llegó esta compañía a nuestros países y la falta de respeto que tienen tanto con el trabajador como con el consumidor”, dijo Valdez.
En México tuvieron el contacto con el Frente Auténtico del Trabajo y con la Alianza Nacional de Sindicatos Independientes, en la hay grupos de Canadá, Estados Unidos y México. Esta alianza fue creada después de la puesta en marcha del TLCAN.
El 12 de noviembre pasado, la UFCW interpuso una queja en el Gobierno estadounidense para que se investiguen las violaciones a los derechos laborales tanto en Estados Unidos como en México, bajo los términos del TLCAN, al tratarse de una compañía binacional que llegó bajo esos términos a Estados Unidos.
“La queja ya se hizo en los dos países y estamos esperando una respuesta que llegue quizá en enero, de si aceptan nuestra solicitud para iniciar con la investigación. Nosotros sabemos que no es sólo en Estados Unidos, también en México viola derechos a los trabajadores”, sostuvo Rigoberto.
PROCESO DE INTERNACIONALIZACIÓN
En este sentido, Enrique Larios Díaz, presidente del Colegio de Profesores de Derecho del Trabajo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), explica que los trabajadores no tienen un contrincante sencillo, es uno muy poderoso y que, al menos en el caso de México, se debe saber que los gobernantes están coludidos con los patrones para dar ventajas a los patrones y quitarles derechos a los trabajadores, “esa es la desgracia que está aquejando al mundo laboral de esta época […] es de aplaudir que los trabajadores de Chedraui de Estados Unidos busquen a los de México; pasa que el sindicalismo tiende a internacionalizarse, porque si no lo hace se ahoga”.
La diferencia, señala el abogado, del caso estadounidense radica en que allá el enriquecimiento se hace a partir del robo del salario de los trabajadores, mientras que acá se hace con la pobreza de la población.
“La llegada del neoliberalismo, impuso también el fin de la posición bilateral entre patrón y trabajador, para que sólo predomine lo que postula el patrón. En estos momentos es lo que sucede en muchos países, se acaba la bilateralidad y el trabajador no es parte de la negociación, sino que lo quieren tratar como una mercancía o como algo que puede desecharse”, agregó el Larios Díaz.
Según lo explica Rigoberto, la mayoría de los trabajadores de El Súper son migrantes de origen mexicano que se encuentran en desventaja salarial frente a otros trabajadores de tiendas de la misma categoría. “Un cajero con un poco tiempo de experiencia, es decir, cinco años, gana casi 18 dólares la hora, mientras que un trabajador en El Súper, con la misma experiencia, las mismas habilidades y el mismo rango, gana 12 dólares. Esa diferencia es grandísima, especialmente en una ciudad tan cara como es Los Ángeles. Nosotros estamos exigiendo que en nuestro contrato, podamos alcanzar ese estándar o que por lo menos se avance”.
El contrato previo de los trabajadores se venció en 2013 y se empezó con las primeras mesas de negociaciones con los directivos. En mayo de 2014 la compañía dio la propuesta final que no cubrió ninguna de las demandas que los sindicalizados habían solicitado y se votó por una huelga, a lo que devino una campaña de desprestigio al sindicato por parte del presidente de la compañía en Estados Unidos, Carlos Smith, en la que se sonsacaba a los trabajadores para que se salieran del sindicato, a que lo destituyeran, lo que llevó el tema a tribunales federales por violación de leyes respecto a los derechos laborales.
El contrato anterior, de acuerdo con el líder sindical, ofrecía mejores condiciones para los trabajadores, pero comenzó a cambiar cuando en 2008, Chedraui compró a El Súper, cadena que estaba en bancarrota, razón por la que los trabajadores cedieron varios de sus derechos y prestaciones, ya que pensaban ayudar, de esa forma, a su empresa.
“Cuando Chedruai compró, prometieron que cuando se expandiera más en Estados Unidos y el negocio empezara a echar raíces, las cosas cambiarían y que subirían nuestros estándares de contrato a lo que es un contrato colectivo que se tienen en otras tiendas de autoservicios en California. Incluso no organizamos a otras tiendas para darles la oportunidad de que crecieran los negocios”, comentó.
La semana pasada, más de una docena de manifestantes fueron arrestados en Los Ángeles durante una protesta encabezada por la UFCW y en la que participaron líderes de la comuniad, clérigos y ciudadanos. Bloquearon el tránsito de la intersección conocida como los “Cinco Puntos”, ubicada en la avenida César E. Chávez.
La policía arribó al lugar para persuadir a los manifestantes, que se negaron a hacerlo. Entre los detenidos se encontraba Flora Castaneda, cajera de una de las tiendas minoristas y miembra del UFCW; durante el acto sostuvo: “para que haya un cambio se requiere que las personas como yo, levanten la voz. Yo no quiero ser arrestada pero si nosotros no nos levantamos por nosotros mismos, todo va a seguir igual”.
El pasado miércoles 25, trabajadores de las siete tiendas sindicalizadas de El Súper entraron en una huelga de casi 24 horas tras un nuevo revés de la empresa en la mesa de negociación. De acuerdo con Valdez, la compañía les ha negado información que por ley pueden recibir, como datos financieros de los trabajadores.
Ahora será hasta el 12 de diciembre cuando se reanuden las reuniones entre patrones y trabajadores, que tras una primera huelga, señalan que si la actitud de los empresarios continua como hasta ahora, habrá otras huelgas y habrá más protestas.
“Nosotros ya no tenemos buena fe y en realidad sabemos que ellos no quieren llegar a un acuerdo de contrato colectivo con los trabajadores, porque es ya más de un mes sin negociar y ahora llegamos a esto [a la huelga]”, agregó.
LUCHA A FAVOR DE LOS CONSUMIDORES
Dentro de la lucha de los trabajadores de la empresa Chedraui, se han incluido las quejas de los consumidores respecto a la calidad de los productos que ahí se venden. En agosto pasado, la organización civil Proyecto sobre Organización, Desarrollo, Educación e Investigación (PODER), junto con el UFCW, presentaron un estudio en el que se señaló que en México, los 19 hipermercados de la cadena, ubicados en el Distrito Federal tienen problemas de etiquetado caduco.
Por este mismo tema, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) ha multado en diferentes ocasiones a esta empresa, que ya es la que a lo largo del país, recaba el mayor número de quejas de consumidores; son más del doble de las que ha recibido Soriana y rebasa en un 25 y 50 por ciento a las de Comercial Mexicana.
Según la investigación de PODER, el 67 por ciento de las tiendas Chedraui vendían algún tipo de producto cárnico, avícola o congelado con la fecha de consumo preferente o la fecha de caducidad vencidas.
También se encontró que en el 89 por ciento de las tiendas de la empresa vendía productos rotulados como “congelados” y con fecha de caducidad de un producto congelado, pero que sólo estaba refrigerado. O en las tiendas Premium Selecto, un mismo producto puede tener la fecha de caducidad removida.