Ciudad de México, 28 de octubre (SinEmbargo).– Peritos y médicos forenses de la Procuraduría General de la República (PGR) y expertos de Argentina realizan labores de búsqueda y reconocimiento de posibles restos humanos en el tiradero municipal de Cocula, Guerrero, donde ayer fue hallada una fosa clandestina.
En tanto, las fuerzas del Estado mexicano mantienen un cerco por tierra y aire, por medio de perros y drones, alrededor del cráter de 10 metros de profundidad. Inclusive no se ha permitido el paso a medios de comunicación.
Vestidos con trajes blancos, los expertos analizan el perímetro con técnica de barrido y trazan líneas con banderas para identificar posibles indicios de restos humanos, según reporte de medios.
El lunes, el Procurador General de la República, Jesús Murillo Karam, informó la detención de otros cuatro integrantes del Cártel Guerreros Unidos. También declaró que por medio de sus declaraciones se dio con el hallazgo de cadáveres en el tiradero.
Dos de ellos, dijo, refirieron que participaron en los hechos del 26 de septiembre pasado en Iguala y recibieron “a un amplio grupo de personas”. Los otros dos, afirmó el funcionario federal, son halcones informantes de ese cártel, y sus declaraciones coinciden con los dos primeros.
Estas personas son quienes operaron la detención y desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa.
Toda la fuerza del Estado, dijo el Procurador, está trabajando para corroborar la información de los que están declarando, y se tiene desplegado un esfuerzo de coordinación permanente para localizar a los 43 normalistas, además de a los autores intelectuales del caso.
“No tengo duda que detendremos a todos los autores materiales, pero también a los intelectuales. Hoy tenemos a 56 detenidos pero, les aseguró, habrá muchos más”, afirmó Murillo Karam.
Fuerzas federales y municipales fueron desplegadas en el basurero municipal de Cocula para corroborar un el hallazgo de fosas clandestinas. Hasta el momento, autoridades reconocen la localización de una fosa de grandes dimensiones donde se localizaron huesos, pero aún no se determinan si son humanos o de animales.
Cocula se encuentra a 15 minutos de la ciudad de Iguala, donde el 26 de septiembre pasado fueron asesinados seis estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa y otros 43 fueron detenidos y presuntamente entregados a miembros del crimen organizado por policías de Iguala y de Cocula, según la información corroborada por la Procuraduría General de la República. Por estos hechos, 14 policías del municipio de Cocula ya han sido consignados.
De acuerdo con medios locales, varios helicópteros sobrevuelan el área y recorren ese territorio camionetas con efectivos de la Secretaría de Marina (Semar), de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y de la Gendarmería Nacional.