La Asociación Española de Ayuda a Niños con enfermedades hepáticas y trasplantados hepáticos da cuenta de que este no es un caso aislado y que los donantes vivos requieren de un ley que los proteja de los despidos.
Ciudad de México 28 de marzo (SinEmbargo).- Un padre, en España, que pidió varios días libres en su trabajo para poder donar un hígado a su hija y recuperarse de la operación fue despedido, informó el sitio web español ABC.
“La vida de mi hija dependía de que yo le donará parte de mi hígado”, escribe el portal ABC, pero tras pedir varios días de baja y algunos más de vacaciones para someterse a la cirugía y posteriormente cuidar de su hija, la empresa para la que trabajaba le respondió “Así podrá usted dedicarse mejor a cuidar a su hija”.
Parece ser que esto no es un hecho aislado; “Muchas más personas de nuestra Asociación (HEPA) han vivido situaciones similares, como esta: “Para hacerme las pruebas de compatibilidad de donante para mi hijo, me desplace varios días al hospital y cuando llevé los justificantes de las pruebas a mi trabajo me indicaron que eran pruebas voluntarias y que yo no estaba enfermo y que no podían aceptar la justificación, que la solución era pedir una excedencia”, señala la Asociación Española de Ayuda a Niños con enfermedades hepáticas y trasplantados hepáticos (HEPA) en el portal Change.org.
A raíz de este tipo de situaciones la HEPA creó una petición en Change.org para que la ley impida despedir a un donante o cobrar menos por no estar protegido de una baja laboral. Hasta el momento la petición ha sido firmada por más de 250 mil personas que se muestran en contra de este tipo de injusticia ante personas
El Director de la Organización Nacional de Transplantes, Rafael Matesanz, pidió en la XIV Reunión Nacional de Coordinadores de Trasplante y Profesionales de la Comunicación, un trato similar para el donante vivo como el dado a una mujer durante y después del embarazo, en el que se evitan los despidos y se les otorga protección social y laboral.
