Por Gayatri Parameswaran
Ciudad de México, 26 de octubre (SinEmbargo/Radio Nederland).– ¿Te preguntas como puedes darle placer con la mano? ¿Violenta o suavemente?, ¿Rápida o lentamente? ¿En qué otras cosas deberías pensar además de su pene? Te presentamos algunos consejos a continuación.
Debes…
1. Tomártelo con calma
Tómate el tiempo necesario para crear el ambiente adecuado. Evita ir inmediatamente al miembro. Más bien al contrario, empieza besando a tu pareja, masajeándole y tocándole mientras está vestido. Una vez que hay un ambiente sensual y apasionado, bájale el cierre y préstale atención a todo lo que encuentres ahí.
2. Agarrarle adecuadamente
Agárrale el pene con la mano sin mucha suavidad, pero tampoco demasiado fuerte. Comienza a deslizar tu mano de arriba abajo en un movimiento rítmico. Ten en cuenta que la cabeza del pene puede ser muy sensible al tacto, especialmente al principio. Si está circuncidado seguramente tendrá menos sensibilidad.
3. Hazlo en al ritmo adecuado
Préstale atención a la velocidad con que deslizas la mano. Puedes empezar despacio e ir más deprisa a medida que él se acerca al clímax. Por otro lado, si él está muy excitado, puedes hacer más lento el movimiento antes de que alcance el orgasmo y jugar a mantener la tensión mientras lo conduces hacia el momento cumbre.
Ello depende del momento y de la persona. Si está teniendo problemas para llegar al orgasmo (por ejemplo porque ya han disfrutado de sexo apasionado) le resultará muy frustrante que lo manejes con suavidad y lentitud. Pero si está listo para el orgasmo, el que vayas muy rápido le hará sentir que te estás precipitando y echando a perder el momento. Observa a tu pareja atentamente, sigue sus reacciones o simplemente pregúntale.
Una vez que empiece a eyacular, mantén el ritmo o redúcelo. La cabeza del pene es extremadamente sensible una vez alcanzado el orgasmo y el que haya demasiada actividad en ese momento puede ser doloroso para él. Ah, y por cierto, no te olvides del contacto visual.
4. Hazlo húmedo
Siempre es mejor cuanto más húmedo, por lo que tal vez quieras usar un lubricante. Puedes aplicar un poco en el miembro antes de empezar. También puedes poner un poco de saliva (ya que es un lubricante natural) en tus manos antes de empezar a acariciarle.
A medida que él se excite comenzará a salir del pene un poco de pre eyaculación. Ello hará que la cabeza del pene esté húmeda y deslizante.
No debes…
1. Tener miedo de explorar
Tu pareja disfrutará mucho si tomas la iniciativa de explorar su cuerpo. No te dejes dominar por la timidez a la hora de hacer algo que crees que no le gustará. Sigue adelante y experimenta.
Préstale atención a su lenguaje corporal para comprobar si realmente le gusta o no. Si gime de placer, sabrás que ha funcionado. Y si sientes inseguridad puedes preguntarle directamente qué le gustaría que le hicieras.
2. Ignorar el resto de sus accesorios
Ten en cuenta que los hombres también pueden excitarse cuando tocas sus testículos de manera sensual. Mientras sujetas el pene con una mano, prueba a sostenerle los testículos con la otra o a acariciárselos suavemente con los dedos. También puedes utilizar la lengua para estimular sus testículos.
El perineo, un tejido que conecta los testículos con el ano, es también una zona erógena. Puedes presionarlo con suavidad mientras le masturbas, especialmente en los momentos previos a la eyaculación.
Si a tu pareja le gusta, puedes agarrarle las nalgas y acariciarle el ano o incluso deslizarle un dedo dentro. Utiliza un poco de saliva o lubricante para humedecerte los dedos y hazlo con suavidad.
3. Hacer solo una cosa
La masturbación no tiene por qué ser un movimiento monótono y aburrido. Puedes usar varias técnicas para hacer que sea más excitante y placentera para él. Además de agarrarle el pene por completo con las manos, hay otros tipos de agarre que puedes probar. Forma un círculo con los dedos pulgar e índice y deslízalo desde la base a la cabeza del pene. También puedes usar ambas manos a la vez y moverlas en la misma dirección o en direcciones opuestas.
El consejo más importante es que te diviertas cuando masturbes a tu pareja. Si ve que estás disfrutando tanto como él, seguro que disfrutará aún más.
4. Aparentar aburrimiento
Si das la impresión de que estás sacudiendo un bote de catsup y que piensas en qué va a haber de cena, acabarás desmotivándole. El que la mayoría de los chicos pueda llegar al orgasmo mucho más fácilmente que las chicas no significa que sean máquinas de eyacular. Muéstrale que a ti también te gusta y multiplicarás su placer por dos.