El vocero de El Vaticano, Federico Lombardi, calificó hoy como “infundados” los rumores sobre una posible renuncia del Papa Benedicto XVI, que estaría reflexionando presentar al cumplir los 85 años.
Durante una conferencia de prensa, Lombardi desmintió la información publicada este día por el periodista Antonio Soci en el diario italiano Libero, según la cual el pontífice estaría pensando en presentar su dimisión en abril del próximo año.
“Lo que sabemos todos es lo escrito por el Papa en su libro Luz del Mundo, más allá de eso yo no tengo otras informaciones”, precisó.
Lombardi se refirió al libro-entrevista publicado junto con el escritor alemán Peter Seewald en el cual dejó abierta la posibilidad a la renuncia del Papa, sobre todo en caso de una enfermedad que le impida definitivamente cumplir con su ministerio.
“La fuerza y la resistencia que ha demostrado en este viaje de por sí me parece muy elocuente de su capacidad de continuar a afrontar empeños incluso muy gravosos”, agregó en Friburgo, donde el líder católico concluyó este día una gira apostólica por tierras alemanas.
El sacerdote jesuita agregó que Joseph Ratzinger está “muy bien”, en “buenas condiciones” y “del todo normales”. “Está superando bien un itinerario tan intenso y desde el punto de vista de la salud este viaje es un verdadero éxito”, ponderó.
El tema de la renuncia de los Papas es una especie de tabú para la Iglesia católica porque la tradición establece que el puesto de sucesor de Pedro debe ocuparse por toda la vida, incluso en precarias condiciones de salud como ocurrió con Juan Pablo II.
Demandan al Papa en La Haya por encubrir curas pederastas en cuatro países
El pasado 13 de septiembre, víctimas de abusos sexuales cometidos por sacerdotes presentaron una queja oficial ante la Corte Penal Internacional (CPI) para condenar al Papa Benedicto XVI y otros líderes de la Iglesia Católica por crímenes contra la humanidad.
La denuncia fue presentada por miembros de la Red de Supervivientes de Abusos por Parte de Sacerdotes, (SNAP, por sus siglas en inglés) de Alemania, Bélgica, Holanda y Estados Unidos, así como otros líderes de organizaciones defensoras de los derechos humanos.
En la querella presentada ante la Corte Internacional de La Haya, las víctimas acusan a Benedicto XVI y los cardenales Tarcisio Bertone, secretario del Estado Vaticano, su predecesor Angelo Sodano y a William Levada, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe.
La SNAP considera que el Papa y los tres líderes católicos participaron en “el encubrimiento generalizado y sistemático de violaciones y crímenes sexuales contra niños en todo el mundo”, según un reporte de Radio Nederland.
La petición de las víctimas es que la CPI investigue al Vaticano por la impunidad que rodea los abusos sexuales de menores, cometidos a gran escala por funcionarios de la Iglesia Católica y la forma en que el Vaticano protegió a los abusadores.
Los demandantes consideran a los jerarcas del Vaticano responsables de crímenes de lesa humanidad, ante una supuesta práctica, extendida y sistemática, de ocultación y tolerancia a los abusos sexuales cometidos en el seno de la Iglesia Católica en todo el mundo.
(Con Información de Notimex y EFE)
