Ciudad de México, 25 de agosto (SinEmbargo).- “Insisto en la enfermedad de Enrique Peña Nieto para pedir su alejamiento del Gobierno”, clamó el abogado, periodista, escritor, locutor y comentarista Rafael Loret de Mola, en el marco de la conferencia de prensa destinada a presentar su reciente libro Empeñados, editado por Jus.
Se trata de un texto “escrito desde las entrañas pero no por ello es visceral, al contrario: es una crítica que utiliza la razón, la conciencia, pero ante los sucesos que se describen, el autor no puede menos que mostrar enojo y hartazgo, volviéndose así la voz de la gran mayoría de mexicanos en este momento, el tercer lustro del siglo XXI”, según explica en el prólogo Valentina Tolentino Sanjuan
El “ensayo crítico que expone a los agentes políticos que han generado la corrupción, venta y debacle de México”, constituye sin duda un material controvertido, provocador y que recorre los últimos y sonados casos de corrupción, entre ellos la Casa Blanca de La Gaviota, la vida de lujo de las hijas del Presidente, así como las matanzas de Tlatlaya, las desapariciones de los estudiantes de Ayotzinapa, hasta los recientes enfrentamientos (Tanhuato, Michoacán) del narcotráfico.
Para el intelectual, que muestra desapego ante el escaso interés que según él muestran los medios grandes ante sus libros (“Ni sueño que en esta conferencia venga Televisa, por ejemplo, a pesar de que uno de mis hijos trabaja ahí”, dijo en relación a Carlos Loret), “los caudales de dinero que manejan las grandes casas y el reducido número de familias a través de gigantescos monopolios, no serían posibles si no fuera por la ayuda de los mandatarios en turno”.
Empeñados –un juego de palabras entre el apellido del actual Presidente de México y lo comprometido que se encuentra el sistema financiero nacional, a merced de los capitales extranjeros- “también describe el empeño que muchos connacionales tienen por recuperar nuestra soberanía. La autonomía y poder de decisión arrebatados que, junto a la desaceleración económica, orillaron al actual gobierno a concretar la entreguista reforma energética, fraguada desde hace años”.
Para Loret de Mola, el actual mandatario mexicano, “es un personaje famoso a nivel mundial, mas no por sus logros, sino por su ignorancia, incapacidad y falta de voluntad para sacar avante a un país cuya complejidad geográfica y cultural parece desconocer, lo cual no puede ocultar en sus actos públicos mientras sus asesores se ven obligados desesperadamente a disminuir en parte para que aquél deje de provocar la burla de sus gobernados, mofas ilustradas que se viralizan en las redes sociales y que asimismo dan cuenta del repudio de la población hacia este gobierno”.
Estas son sus declaraciones más salientes en la citada conferencia de prensa.
ESTAMOS EMPEÑADOS
“Si los Estados Unidos tuvieran que devolver todo lo que han robado, se quedarían sólo con la Estatua de la Libertad, que es un regalo de Francia. Así nos está pasando a los mexicanos, ya no tenemos casi nada. Y en ese nada implica bienes e inmuebles. Por ejemplo, cuando se vendió Banamex, nadie se puso a pensar cuál sería el destino del patrimonio nacional que Banamex había adquirido junto con las sucursales. Ahí se nos fue gran parte del acervo cultural, que luego empezó a recuperar en parte Conaculta, pero sólo en parte”.
EMPEÑADOS ES UN GRITO
“Este libro es un grito, así lo pongo en la contraportada. Es un grito que recogí en todo el país e hice mío y que debería ser de todos los mexicanos. Es un libro para sacudir conciencias, para elevar la voz, para insistir en el hecho de que no podemos permitir que los Gobiernos autoritarios sigan desangrando esta nación. Que los asesinatos de periodistas, de líderes sociales y hasta de normalistas, sean las cuentas que hagan y pongan el sello a este Gobierno represor de Enrique Peña Nieto. Un mexiquense de origen, como lo es Arturo Montiel, y como lo es el penal de alta seguridad de Almoloya, que ha cobrado gran importancia en el mundo por su alta tecnología para construir túneles sin que nadie se dé cuenta”.
LA ENFERMEDAD DE ENRIQUE PEÑA NIETO
“En este libro no firmo el acta de defunción de Enrique Peña Nieto, pero casi. Dicen que corrió casi 8 kilómetros la semana pasada, pero nadie tiene la constancia exacta de esa carrera o si sólo fueron 50 metros para poder sacarse la fotografía y no mostrar que tuviera los calcetines al revés, sino sus marcas en las rodillas, propias de un tratamiento de quimioterapia. Claro, hay quienes destacan que no se le ha caído el pelo, pero realmente no es solamente esta reacción la única que se da en los tratamientos de quimio. Hay quienes llegan a la fase terminal con todo el pelo. Insisto en la enfermedad de Peña Nieto, para solicitar su alejamiento del Gobierno. Y esto me llevó a sumarme a la convocatoria de paro nacional para el 14 de octubre próximo, una convocatoria que ha ido ampliándose en los últimos días. No se trata de un paro, se trata de recuperar la soberanía nacional”.
EL VACÍO DE LOS MEDIOS
“Los medios de comunicación masivos se caracterizan por hacerme el vacío, algo que no interrumpe la venta de mis libros. El último medio que esperaba ver aquí es a Televisa, a pesar de que un hijo mío trabaja ahí. La realidad hay un maridaje entre los directores de los medios masivos y el poder de Gobierno en nuestro país. No me espero ninguna respuesta de los medios masivos de comunicación, no la espero y no la quiero. Tengo mis propios medios para difundir mis libros”.
LAS DIFERENCIAS CON EL ‘68
“En el ’68 no esperábamos que el ejército actuara como lo hizo en la Plaza de las tres Culturas. En el caso actual, ya sabemos cómo actúa el hombre al que le estoy pidiendo la renuncia en el libro y que es Salvador Cienfuegos, el encargado de la defensa nacional. Este hombre ha reconocido que algunos de sus elementos se excedieron y con ese reconocimiento debió haber presentado su renuncia. Y no lo hizo, protegido como está por un Presidente cobarde, por un Presidente que le teme a la historia. Reprimir más significaría que México tendría que ser declarado un Estado fallido y esto es lo que me preocupa. Todo el país está enfermo de crispación y de rencor. Los 31 estados de la República han sufrido de una y otra manera las consecuencias de un Gobierno inútil y represor. Y por eso es necesario que se vaya Peña Nieto, para frenar el rencor profundo que tiene una sociedad agraviada, para que no haya más derramamiento de sangre, porque ya no sabemos hasta dónde va a tolerar por la vía pacífica a un Gobierno que ya no tiene legitimidad”.
A continuación puedes leer el primer capítulo del libro Empeñados: