Ciudad de México, 24 de octubre (SinEmbargo).– El Partido de la Revolución Democrática (PRD) no sólo es aliado de los priistas en el Pacto por México y en la Cámara de Diputados con la Reforma Hacendaria, sino que en las comunidades afectadas por los huracanes “Manuel” e “Ingrid” en la Montaña de Guerrero: obstruyen juntos el acceso de los damnificados a las despensas y apoyos que la población de todo el país les envía.
Así lo denunció ayer el Consejo de Comunidades Damnificadas de la Montaña de Guerrero, que reúne a más de 100 poblaciones afectadas por las inundaciones y deslaves en una conferencia de prensa en el Distrito Federal.
Unas 40 personas representantes de la población, que se quedaron sin vivienda, caminos, cosechas, tierras y animales, denunciaron la indiferencia de los tres órdenes de gobierno y señalaron con nombre y apellido a los políticos y funcionarios públicos que se aprovechan de la desgracia.
La mayoría de ellos perredistas, dijeron, venden, confiscan, reparten a sus conocidos las despensas y amenazan de muerte a la población si se queja.
En el municipio de Acatepec, el Presidente Municipal, Juan Paulino Neri, del PRD y el ex Alcalde y ex diputado local Raymundo Gutiérrez García, también perredista, decomisaron dos mil despensas en un auditorio durante tres semanas, hasta que los damnificados cansados de esperar y con hambre sacaron el alimento a la fuerza.
En ese mismo poblado los perredistas y los priistas se unieron para amenazar a pobladores de muerte, dijeron.
El Director de Tránsito, Rafael Fortunacio, del PRD, la regidora priista Anastasia Rodríguez, la mecanógrafa del pueblo, Aida Matus y el Oficial de Registro Civil, Agripino Baigón, mantienen la advertencia a los habitantes de que si hablan, los asesinan.
“Nos tienen amenazados, dicen que nos van a matar si hablamos. Por lo tanto, hacemos responsables a estos funcionarios de cualquier cosa que nos pase”, dijo Mauro Bruno García, damnificado de Acatepec.
Mayrán Yolotl Benjamín Galeana, del municipio de Malinaltepec, denunció que a esa comunidad llegaron 13 mil láminas para las viviendas afectadas por las tormentas y que no fueron entregadas.
El material fue trasladado a una bodega y decomisado por el perredista Humberto Arnoldo Santana, indicó el habitante de la Montaña de Guerrero.
En el municipio de Metlatonoc, el Presidente Municipal, Neptalí Viterbo Hernández Aguilar, del PRD, retuvo los víveres y despensas para venderlas en un tianguis y utilizarlas para su beneficio, dijo Eric Ortiz, uno de los damnificados de esa población.
“He visto toda la vida llegar las despensas y cómo las usan para ellos. El auditorio está lleno de despensas y maíz, el DIF Municipal, la Presidencia Municipal y hasta la casa del Presidente están llenas de alimento”, dijo.
El afectado por los desastres naturales que azotaron al país el mes pasado denunció que el perredista y Subsecretario de Asuntos Indígenas del Estado de Guerrero, Felipe Ortiz Montealegre, acudió a su poblado y solicitó a la población copias de credenciales de elector y actas de nacimiento como condición para otorgarles una despensa: ayuda que no llegó.
“Le decimos a Peña Nieto [Presidente Enrique Peña Nieto] que la ayuda que nos mande, la envié al pueblo, no a las autoridades, porque no llega”, dijo.
DUERMEN EN LODO Y NO TIENEN ALIMENTOS
Obdulia Herrera Gálvez, originaria del municipio de Metlatonoc, una mujer indígena, menuda, rompió en llanto cuando tomó el micrófono para hablar sobre la situación de los damnificados en la Montaña de Guerrero.
Primero habló en su lengua y después se propuso dar el mensaje en español.
“Llovió cuatro días el mes de septiembre y hubo desgracias. Murió nuestra familia. Perdimos casas, cultivo de café, de milpa, todo se acabó, ya no hay nada. Necesitamos ayuda. En algunas partes quedó poco, pero en otras perdimos todo; pedimos que nos apoyen, que nos echen la mano, estamos pidiendo que nos abran caminos, que nos apoyen con vivienda, hace falta doctor, nadie nos atendió. Los presidentes municipales no van a las comunidades porque se ensucian, porque estamos atrapados en el cerro que se nos va a caer encima y no tenemos a dónde ir”, dijo.
Hermenegildo Morán Millán, de Malinaltepec, dijo que las viviendas quedaron destruidas y hoy mujeres, niños y ancianos duermen en el lodo, sin que ninguna autoridad se presente a entregar apoyo.
“Duermen en el lodo y ya hay brote de epidemia, no tenemos médicos, queremos doctor, que nos surtan de maíz, frijol, arroz, aceite, medicamentos. Las comunidades tienen interrumpidos los servicios de agua y electricidad”, dijo.
Los damnificados dijeron que las pérdidas ascienden a 100 mil toneladas de café de exportación, que no se recuperarán.
Los terrenos para siembra quedaron devastados, la cosecha de maíz, el alimento principal de esas comunidades, se perdió. Más de 50 pueblos fueron desplazados por el desastre natural.
En total murieron 130 personas y quedaron varias viudas sin el sostén de la familia en algunas comunidades.
Mauro Bruno García, del municipio de Acatepec, llamó a las autoridades a informar sobre la magnitud de la devastación de los pueblos de la Montaña e hizo un llamado al Presidente Enrique Peña Nieto a visitar las comunidades de Guerrero.
“¿Por qué las comunidades de la Montaña no tenemos acceso a los apoyos, por qué a nosotros como indígenas siempre nos discriminan? No tenemos eco, tenemos hambre y queremos decirle a Peña Nieto que vaya municipio por municipio para que constate si hay daño o no”, dijo.
Bruno García prosiguió: “Nosotros estamos aquí en el Distrito Federal para que nos escuchen. Salimos de nuestra cabecera e hicimos siete horas para llegar a la capital, empujando en el lodo y no vamos a parar”.
Una comisión de damnificados entregó ayer una serie de peticiones en la Secretaría de Gobernación. Los habitantes de la Montaña de Guerrero dijeron que si para el viernes no se atienden sus peticiones, trasladarán a la Ciudad de México a cientos de personas desplazadas.
“Si hoy no tenemos eco, porque no tenemos mucho tiempo, vamos a regresar con una multitud de damnificados, a ver cómo le hacemos para sacarlos porque estamos marginados y en extrema pobreza, pero vamos a venir”, dijo Bruno García.