Ciudad de México, 23 de agosto (SinEmbargo).– La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) inició una investigación por las presuntas violaciones a los derechos humanos de los habitantes de Cadereyta, Nuevo León, afectados por el derrame de hidrocarburo en el río San Juan, proveniente de la refinería de Petróleos Mexicanos (Pemex) en el municipio.
A través de un comunicado, la CNDH afirma que el Ombudsman, Raúl Plascencia Villanueva, ordenó el traslado de Visitadores Adjuntos a fin de recabar información y atender de inmediato las quejas de las personas afectadas. Además, señala el informe, tienen la obligación de brindar asesoría y recabar la mayor cantidad de elementos que permitan conocer los impactos generados a la población y al ambiente para promover el derecho de acceder al agua para consumo personal “en forma suficiente, salubre, aceptable y asequible”.
El pasado fin de semana, una fuga de petróleo crudo causada por una toma clandestina se registró a 15 kilómetros al sureste de la refinería de Petróleos Mexicanos (Pemex) del municipio de Caldereyta, Nuevo León, y contaminó las aguas del río San Juan.
De acuerdo con informes, y declaraciones del Alcalde de Cadereyta, Emeterio Arizpe Télles, el incidente se registró en las válvulas de la refinería de Pemex del municipio.
En el lugar trabajaron una veintena de trabajadores del sector Ductos Victoria de Pemex.
A través de un comunicado, Petróleos Mexicanos (Pemex) aseguró que técnicos especializados controlaron el derrame de hidrocarburo.
“Petróleos Mexicanos efectúa acciones de contención y limpieza del derrame suscitado el pasado 16 de agosto, provocado por una toma clandestina en el Oleoducto de Madero-Cadereyta, ubicado en las inmediaciones del poblado San Juan en este municipio” indicó la paraestatal.
Informó que fueron colocadas algunas barreras marinas de contención y cordones para evitar que el combustible se siga esparciendo y afecte el agua de la presa “El Cuchillo”.
Asimismo presentará la denuncia ante el Ministerio Público Federal.
A través de su cuenta de Twitter, la paraestatal reafirmó que se suscitó un derrame en el Oleoducto Madero-Cadereyta, el cual fue controlado ese mismo día y que continúan los trabajos de limpieza en las márgenes del río San Juan en Cadereyta.
Para el jueves 21 de agosto, se informó que se proseguía con las acciones de contención, limpieza y remediación en los márgenes del río San Juan, en Cadereyta Jiménez, Nuevo León, tras el derrame ocasionado por una toma clandestina.
“Es importante destacar que tanto el derrame, que quedó controlado el domingo, como el incendio de pastizales, ocurrieron fuera de la refinería de Cadereyta que opera con toda normalidad”, puntualizó Pemex en otro comunicado.
La dependencia dio a conocer la víspera que como medida preventiva y para el control del derrame provocado por una toma clandestina instalada en el Oleoducto Madero-Cadereyta, en las inmediaciones del poblado San Juan en este municipio, se procedió a cortar el flujo de hidrocarburo.