Ciudad de México, 22 de noviembre (SinEmbargo).– En junio de este año, un video le dio la vuelta a México y causó indignación entre la sociedad mexicana. En la grabación, se observa a un menor indígena de Chiapas llorando y aventando los dulces que vende al suelo, mientras un hombre que porta un gafete le gritaba y lo obligaba a ello.
El caso de “Manuelito”, que vendía dulces en Villahermosa, puso en el panorama mundial el caso de miles de niños mexicanos que cada año son víctimas de algún delito.
En el marco del aniversario de la aprobación de la Convención sobre los derechos de la niñez –celebrado el pasado miércoles 20 de noviembre– organizaciones defensoras de derechos humanos se pronunciaron por la grave situación que viven los menores en México.
En conferencia de prensa, organizaciones no gubernamentales de diferentes estados expusieron la grave situación de los derechos de niñas y niños y denunciaron que a pesar de los avances en el marco legal, las garantías de los infantes son vejados de manera cotidiana y creciente.
El impacto de la violencia genera graves estragos en la niñez, siendo un sector altamente vulnerable a los abusos de poder y a la negligencia en su protección, tanto en el ámbito familiar, como en el ámbito social, expuso la Asociación para el Desarrollo Integral de Personas Violadas (ADIVAC).
La asociación estima, de acuerdo a su experiencia profesional, que en México 4 de cada 5 niñas/os sufren violencia sexual, lo cual afecta su vida y pleno desarrollo.
Por su parte la Red por los Derechos de la Infancia, REDIM, recientemente alertó sobre las ejecuciones a menores de edad: Informó que de diciembre de 2006 a octubre de 2013 han ocurrido 1,837 muertes de niñas/os por asesinatos presuntamente relacionados con la delincuencia organizada.
Aunado a eso, la cifra de niñas y niños desaparecidos en México es imprecisa, pues a la ausencia de un registro general de personas desaparecidas, se suma la invisibilidad de las niñas y niños en la problemática que estamos viviendo en el país, y por ende en la planeación de políticas para su atención.
MÉXICO EN LA OPACIDAD
Las organizaciones alertaron que durante los últimos años, México se ha enfrentado a un incremento de la violencia infantil y no hay pruebas de que esas tasas estén disminuyendo.
En México no existen cifras exactas sobre el maltrato infantil, debido a la carencia de un Sistema de Protección para niños y niñas y de un protocolo en las escuelas para detectar abusos en las familias, dijo a SinEmbargo Silvia Garza, presidenta de la organización Educadores sin Fronteras.
De acuerdo con Garza, en el país hay algunos acercamientos al problema del abuso infantil, sin embargo son esfuerzos desarticulados.
“No hay registros de los casos de maltrato en México. Hay muchas instancias que están haciendo algo pero lo hacen de forma descoordinada. Mientras no haya esta armonía, coordinación, va a ser muy difícil que podamos realmente tener una modificación de comportamientos y conductas”, dijo.
Según la Agenda Nacional de Derechos Humanos 2013 que emitió la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), el año pasado se contabilizaron 2 mil 660 quejas de abuso en contra de niños, principalmente provenientes del seno familiar.
VÍCTIMAS DE LA GUERRA CONTRA EL NARCO
De acuerdo con organizaciones de protección a la infancia, entre 30 mil y 50 mil infantes están involucrados con el crimen organizado. Los reportes agregan que los criminales involucran a los menores en 22 tipos de delitos, que van desde tráfico de droga, secuestro y trata de personas, hasta extorsiones, contrabando y piratería.
Verónica Juárez Piña, Diputada por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), consideró estos tipos de explotación como una esclavitud moderna a la que son sometidos, particularmente niños de entre 9 y 17 años.
“En la actualidad están esclavizados, son esclavos de la delincuencia organizada, a través de la vía del rapto, del engaño y la coerción, que se acompaña de violencia física y emocional, con lo cual los obligan a que participen en este tipo de actos delincuenciales”, apuntó.
La Legisladora detalló que niños desde los 9 y 10 años son involucrados en el delito de trata de personas. A los 12 años, se les utiliza para cuidar las casas de seguridad y controlar que no se escapen las víctimas de secuestros y de levantones.
A partir de los 16 años, los niños que muchas veces son raptados, sometidos física y emocionalmente y entrenados en el uso de armas son puestos a trabajar en ejercicios más violentos, como secuestros y asesinatos.
Por su parte, la Diputada Lucía Pérez Camarena, de Acción Nacional (PAN) informó que la captura de menores de edad por delitos contra la delincuencia organizada creció 100 por ciento, para quedar en 806 a mil 604 en todo el país.
“Los niños son integrados a la operatividad criminal porque no son los primeros sospechosos para la policía, no son punibles cuando tienen menos de 12 años y para los adolescentes las sanciones son considerablemente menores”, detalló la Legisladora por Jalisco.
MALTRATO INFANTIL
“Todos tenemos la responsabilidad de ‘hacer visible lo invisible’, desde los gobiernos que promulgan y hacen cumplir las leyes que prohíben la violencia contra lo niños, hasta los ciudadanos particulares que se niegan a permanecer en silencio cuando son testigos del abuso o sospechan que existe”, comentó en un comunicado el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
La organización internacional estima que en México, el 62 por ciento de los niños y niñas han sufrido maltrato en algún momento de su vida, 10.1 por ciento de los estudiantes han padecido algún tipo de agresión física en la escuela, 5.5 por ciento ha sido víctima de violencia de sexual y un 16.6 por ciento de violencia emocional.
México ocupa el primer lugar en abuso y maltrato infantil entre las naciones integrantes de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), según el informe “Violencia infantil”, elaborado por el organismo.
El estudio destaca que más de 700 niños son asesinados en México cada año, lo que implica dos homicidios diarios. En los menores de cuatro años, la muerte se presenta principalmente por asfixia y entre los 5 a 14 años por golpe contuso, acuchillamiento o disparo de arma de fuego.
La Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Familias en México (ENDIFAM) realizada en 2005 reportó que en 13 millones de familias los niños crecen en un entorno de violencia y gritos por parte de sus padres.
Datos a nivel nacional del DIF del año 2008 revelaron que se recibieron 59,240 denuncias de maltrato infantil, atendiendo un total de 68,417 menores. Las denuncias en las que se comprobó el maltrato ascendieron a 34,023, sin embargo solamente se presentaron 4,656 ante Ministerio Público.
De todo el país, Coahuila registró el mayor número de denuncias con 8,964 seguido de Nayarit con 7,276 y el Estado de México con 5,378. Por entidad, Baja California encabeza la lista de menores maltratados atendidos con 9,132, Chiapas 7,636 y Coahuila, 6,893.1.
EXPLOTACIÓN SEXUAL
De acuerdo con el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), “no existen cifras sobre cuántos niños y niñas son víctimas de explotación sexual dentro de las fronteras mexicanas”.
Según diversos reportes de prensa de 2010, para ese entonces existían en nuestro país aproximadamente 16 mil casos de explotación sexual comercial infantil, pero la cifra podría ser mucho mayor al tener en cuenta que la mayoría de estos casos no son denunciados.
También ese año, René Jiménez Ornelas, coordinador de la Unidad de Análisis sobre Violencia Social del IIS de la UNAM, estimó que en el país entre 20 mil y 25 mil niños y adolescentes eran víctimas de explotación sexual.
“Las niñas y adolescentes indígenas sufren violencia dentro y fuera de sus comunidades, son las más vulnerables a ser explotadas laboral y sexualmente. También enfrentan la violencia de género en sus relaciones sociales, de familia y de pareja, la cual está relacionada principalmente con agresiones sexuales, emocionales o físicas”, comentó Isabel Crowley, Representante de UNICEF en México.
Otro factor de exclusión que afecta particularmente a las niñas y adolescentes indígenas es la falta de inclusión educativa pues 52.5 por ciento de las niñas entre 12 y 14 años que viven en zonas rurales en México no asisten a la escuela según el Censo 2010. En el caso de los hogares más pobres y con condición de habla indígena, 51 por ciento del total que no asisten a la escuela son mujeres.
El 27 de marzo de 2012 Cecilia Landerreche, entonces presidenta del DIF, reveló que en 256 ciudades se tienen registros de explotación sexual infantil y trata de personas, siendo las zonas fronterizas y los puertos donde hay más incidencia de estos delitos.
En cuanto a las cifras, la ex funcionaria destacó que los menores no son cifras, pero indicó que tan sólo en 2011 se atendieron 324 niñas y 322 niños de explotación sexual en todo el sistema DIF. Además de 12 mil 452 niñas y 13 mil 653 niños, en riesgo de explotación.