Brasilia, 18 oct (EFE).- La Presidenta brasileña y candidata a la reelección, Dilma Rousseff, admitió hoy que hubo desvío ilegal de recursos en la petrolera estatal Petrobras, denunciada por supuestamente beneficiar algunos partidos políticos de la base aliada, y se comprometió a buscar un resarcimiento de ese dinero.
“Si hubo desvío, lo queremos (el dinero) de vuelta. Si hubo, no. Hubo”, se retractó Rousseff en una rueda de prensa concedida en el residencial Palacio da Alvorada, en la capital Brasilia y donde la mandataria descansó hoy después de cancelar compromisos políticos de campaña.
La mandataria, que disputará el próximo 26 de octubre la segunda vuelta electoral ante el candidato opositor Aécio Neves, afirmó que tomará “todas las medidas para resarcir todo”, aunque alertó que sin un fallo de la Justicia “nadie sabe hoy lo que debe ser resarcido”.
Un escándalo de corruptelas en Petrobras salpicó la campaña electoral en Brasil y ha sido uno de los puntos más abordados en los debates.
Según las investigaciones, un 3 % del presupuesto de los contratos de Petrobras se desviaba para financiar las campañas electorales de formaciones políticas de la base aliada al Gobierno, entre las que figuraba el Partido de los Trabajadores (PT) de Rousseff.
Los delatores, que están confesando a la Justicia a cambio de una reducción de condena, son el exdirector de Abastecimiento de Petrobras Paulo Roberto Costa y el empresario Alberto Youssef, propietario de una casa de cambio que supuestamente gestionaba los fondos.
Rousseff señaló que “la llamada ‘delación premiada’, en la que están los datos más importantes no fue entregada a nosotros. Yo la pedí al Ministerio Público y al Supremo (Tribunal Federal), pero ambos dicen que todo corre bajo secreto”.
A pesar de la oposición valerse del escándalo para atacar en la campaña política a Rousseff, uno de los recientes relatos a la Justicia del exdirector Costa, filtrado a la prensa, apuntó a que el fallecido senador Sergio Guerra, que era presidente del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), de Neves, recibió coimas.
La Jefa de Estado llevó el asunto al debate del último jueves en el canal de televisión SBT, ante lo cual Neves respondió que sin entrar a juzgar a su correligionario, era la primera vez que Rousseff admitía que las denuncias de Costa eran verdaderas.
Según el relato del exdirector, Guerra recibió dinero para que la oposición desistiera de la creación de una Comisión Parlamentaria de Investigación (CPI) para analizar en el Congreso las denuncias de Petrobras.
“Eso no es bueno. No voy a celebrar nada. El palo que golpea a Paco también golpea a Francisco”, comentó Rousseff al ser indagada sobre el hecho que el escándalo, que inicialmente afectaba al PT, ahora también implica a la oposición.
El viernes, Petrobras comunicó que creaba comisiones internas para “averiguar indicios o hechos contra la empresa” relacionados al proceso de este escándalo y al igual que Rousseff señaló que “busca” medidas para resarcir los daños.
Después de que Neves anunció hoy que denunciará a la campaña de Rousseff por acusarlo de tener una posición “antifeminista”, la mandataria señaló que era ella o la excandidata Luciana Genro las que deberían llevarlo a la Justicia por él, en los debates televisivos, llamarlas de “insensatas”.
“Él quiere ir a la Justicia, pero las que lo deberíamos denunciar somos nosotros, que nos llamó de insensatas. Una cosa que no se hace. No es algo correcto contra las mujeres”, indicó Rousseff.
La gobernante minimizó las decisiones de la Justicia Electoral de retirar algunas propagandas de su campaña por “ataques personales” contra Neves, al que aprovechó para cuestionarlo por su propuesta de reducir el contenido nacional en algunos ítems de la industria, como la naval, a pesar de reconocer que “a veces” ellos salen más caros.
La jefa de Estado no tiene compromisos de campaña para antes del penúltimo debate televiso, que se realizará este domingo en los estudios del canal Record de Sao Paulo, mientras que Neves, quien estuvo hoy en un mitin Porto Alegre, programó una caminata matutina en Río de Janeiro.
En las elecciones del 5 de octubre, Rousseff terminó primera con el 41.5 por ciento de los votos, seguida por Neves, quien consiguió el 33.5 por ciento.
Para la segunda vuelta, Rousseff y Neves están empatados técnicamente en las encuestas de intención de voto, con una ligera ventaja de 51 por ciento sobre el 49 por ciento del Senador. EFE