El EZLN, por medio de un comunicado, refirió que la guerra mediática del gobierno en contra del movimiento de la CNTE no ha logrado menoscabar el esfuerzo ni ha causado opiniones contrarias al magisterio por parte de la población chiapaneca. Asimismo, en el documento acusan a medios de comunicación y a funcionarios que participan de estas campañas de desprestigio, un intento “terrorista” para imponer la Reforma Educativa.
Ciudad de México, 18 de junio (SinEmbargo).- El Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) asegura que, al menos en Chiapas, la percepción ciudadana en torno a las movilizaciones por parte de los maestros disidentes del “magisterio rebelde” ha ido cambiando de manera positiva, circunstancia por la que el Gobierno federal está perdiendo la guerra mediática en contra del movimiento docente.
“No sabemos si en el resto del país, pero al menos en Chiapas, los de arriba están perdiendo la guerra mediática”, refiere el EZLN en su “Apunte sobre la guerra contra el magisterio en resistencia”.
La organización de carácter político libertaria explica en el documento que comunidades enteras en el medio rural y urbano de la entidad apoyan al magisterio, y no por una ideología ciega, sino más bien porque el movimiento magisterial se ha convertido en un común denominador de protesta entre la gente, que si quizá se da por un sentimiento de solidaridad, ciertamente se da como parte de un sentimiento colectivo de urgencia ante la tragedia que siempre amenaza con avecinarse.
“Hemos visto a familias enteras, en el medio rural y el urbano, apoyar al magisterio. Y no nos referimos a apoyos del tipo ‘este puño sí se ve’, ‘el pueblo unido, jamás será vencido’, y las consignas que, a pesar de las distancias en calendarios y geografías, siguen siendo las mismas, porque abajo sigue siendo de elemental principio la solidaridad. Si en movilizaciones anteriores del magisterio rebelde, la ‘ciudadanía’ (ese término que oculta la desigualdad) se mostraba hastiada y molesta, ahora las cosas han cambiado”, se lee en el comunicado público.
Del mismo modo, el EZLN detalla el grado de participación de las familias que socorren y apoyan a los maestros para que realicen sus viajes y marchas, pues según su testimonio, afirma que “se angustian cuando [los docentes] son agredidos, les ofrecen alimentos, bebidas y refugio”.
Todo esto a pesar de la descomunal campaña mediática por parte del gobierno en contra del magisterio, que además de atacar a los profesores disidentes y demás partidarios de su movimiento, tilda a sus simpatizantes, a esas familias, de ser una suerte de acarreados:
“Son familias que, según la taxonomía de la izquierda electoral, estarían ‘embrutecidas’ por la televisión, ‘son come tortas’, ‘están alienadas’, ‘son acarreadas’, ‘no tienen conciencia’”, ahonda al respecto el escrito.
¿Pero por qué apoya la gente al magisterio? ¿Por qué muestran empatía con ellos?
De acuerdo con el EZLN, porque “el movimiento de resistencia contra la reforma educativa se ha convertido en un espejo para cada vez más gente-gente (es decir, no la de organizaciones sociales y políticas, sino gente común). Como si se hubiera despertado un sentimiento colectivo de urgencia ante la tragedia que viene. Como si cada golpe de tolete, cada bomba de gas, cada bala de goma, cada orden de aprehensión, fueran consignas elocuentes: ‘hoy la ataco a ella, a él; mañana iré por ti’. Tal vez por eso, detrás de cada maestro hay familias enteras que simpatizan con su causa y con su lucha”.
Como sea, el movimiento “que ha sido ferozmente atacado por todos los frentes” sigue creciendo y continúa siendo apoyado por la gente, recalca el grupo armado.
Asimismo, el otrora grupo guerrillero aprovecha para atacar a los medios de comunicación que forman parte de la guerra mediática en contra del movimiento disidente del magisterio, específicamente mencionando al diario chiapaneco Cuarto Poder, al que tilda de ser “un medio nostálgico por la época de fincas y señores de horca y cuchillo”. Esto luego de que el medio local denunciara como “falsa la fiesta popular que, el pasado 9 de junio y en las calles de Tuxtla Gutiérrez, capital del suroriental estado mexicano de Chiapas, se celebró en apoyo al magisterio en resistencia”.
En ese sentido, el EZLN expresa que la guerra mediática ha resultado ser un tiro por la culata, puesto que su “éxito” contra la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) más bien “da cuenta una pancarta que rezaba ‘Gracias maestro, por enseñarme a luchar’. Otra más señalaba: ‘No soy maestro, pero soy chiapaneco y estoy contra la Reforma Educativa’”.
Y las críticas no cesan ahí, ya que inclusive en el documento se hace referencia al actual Gobernador de la entidad, Manuel Velasco Coello, del que mencionan que “si al güero Velasco lo ponen a gobernar en el desierto, en unos meses escaseaba la arena”.
Al respecto del Secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño Mayer, los zapatistas profieren que “a más de 3 años de que se promulgara la presunta ‘Reforma Educativa’, el señor Nuño todavía no puede presentar algún argumento educativo, así sea mínimo, a favor de su ‘programa de ajuste de personal’. Sus argumentos han sido, hasta ahora, los mismos de cualquier capataz de la época porfirista: gritos histéricos, golpes, amenazas, despidos, encarcelamientos. Los mismos que emplearía cualquier triste y gris aspirante a policía posmoderno”.
Entonces cuestionan que, después de todo lo que ha hecho el gobierno para desprestigiar al movimiento, ¿qué sigue?, ¿que los desaparezcan o los asesinen?, ¿o será que acaso la Reforma Educativa “nacerá sobre la sangre y cadáveres de maestras y maestros”?
Con tales preguntas los zapatistas ofrecen una crítica y una denuncia a Nuño pues mencionan que “la toma de rehenes (que eso y no otra cosa es la detención de miembros de la dirección de la CNTE), en cualquier terrorismo (el del Estado y el de sus espejos fundamentalistas) es un recurso para forzar un diálogo y una negociación. No sabemos si allá arriba se han dado cuenta o no, pero resulta que la otra parte (el magisterio) es quien busca el diálogo y la negociación. ¿O la Secretaría de Educación Pública (SEP) ya se afilió a ISIS y toma rehenes sólo para sembrar el terror?”
Al final del documento, el EZLN concluye que “nosotras, nosotros, zapatistas, no sabemos mucho de medios de comunicación, pero en nuestra humilde opinión, es mal negocio poner, al frente de la campaña mediática de una privatización descarada, a un capataz triste y gris que quiere ser policía”.
Los miembros del EZLN se levantaron en armas el 1 de enero de 1994 en distintas municipalidades de Chiapas, para protestar contra la pobreza de las comunidades indígenas y las políticas económicas del entonces Presidente, Carlos Salinas de Gortari.
En la actualidad, el EZLN es una organización sólo de carácter político, luego de que en 2005 anunció que dejaría a un lado cualquier acción con armas.