Ciudad de México, 17 de septiembre (SinEmbargo).– Desde la llegada de Luis Videgaray Caso a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), la reactivación de la economía mexicana y el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) no ha sido más que un rumor y desilusión constante.
La deficiente participación del Secretario de Hacienda en su puesto ha provocado que las estimaciones del crecimiento económico nacional no sean más que espejismos, tanto por su irrealidad como por sus constantes modificaciones, muy similar al efecto que tiene el horizonte que inalcanzable a cada paso que se da, coincidieron expertos económicos y financieros
Es por ello que estos analistas afirman que estar recortando constantemente las cifras de crecimiento económico y minimizarlas no es nada positivo para que empresarios tanto nacionales como internacionales, ya que restan el ánimo de los empresarios que puedan estar interesados en participar en el desarrollo económico de México.
21 MESES Y NADA POSITIVO
El Secretario de Hacienda y Crédito Público, Luis Videgaray Caso desde hace 21 meses sus expectativas de crecimiento económico han desilusionado dentro y fuera del país.
Dicha falta de crecimiento se ha demostrado constantemente en los periódicos recortes que se han hecho. Para 2013 se calculó un crecimiento de 2.7 del Producto Interno Bruto (PIB), tras una serie de ajustes al final se alcanzó un pobre 1.1 por ciento. Para 2014, la SHCP calculó un crecimiento de 3.9 la cual tuvo que reducir a 2.7 por ciento.
En la presentación del Paquete Económico 2015 se dieron a conocer posibles cifras del crecimiento económico del próximo año, ésta fue de 4.7 por ciento. Sin embargo, al momento de la exposición, esa cifra, sin todavía materializarse y sin estar dicho año, ya se había recortado a 3.7 por ciento.
Eduardo Ávila, subdirector de Análisis de Grupo Monex, expuso que estar recortando constantemente las cifras de crecimiento económico no es nada positivo. “Estar revisando constantemente a la baja las cifras sólo te dicen que la economía no va en el rumbo que se pensaba”, agregó.
Afirmó que esto sólo puede significar que “en el caso de México, está dando la sensación de que la reactivación que se esperaba que hubiera pues no lo hay”.
Arnoldo López Marmolejo, economista principal de BBVA Bancomer, reconoció que las reacciones que puede generar es que “los empresarios sean más cautos a la hora de tomar sus estrategias e inversión. Por parte del sector público puede llevar que las decisiones de política económica se cambien continuamente. Es importante tener el diagnóstico claro para tener una política pública determinada”.
Los riesgos que se pueden correr ante estas variaciones tan importante pueden pegar en el ánimo de las personas. Eduardo Ávila declaró que “si ven que el crecimiento no arranca obviamente puede perjudicar en cuanto a tu perspectiva sobre el futuro y si inviertes o no en tu negocio. Así que revisar constantemente a la baja pueden ser negativos en los inversionistas y empresarios”.
Eduardo González, coordinador de Estudios Económicos de Grupo Financiero Banamex, informó que bajar constantemente el crecimiento de un país “genera desánimo y puedes llevar a inversionistas a posponer sus decisiones de inversión ya sea física o de invertir en una planta o de comprar maquinaria o incluso de hacer inversiones financieras”.
Un movimiento en la expectativa y más cuando esta pueda llevar una tendencia de crecimiento baja, puede crear una realidad de pesimismo y a cambiar decisiones.
Arnoldo López Marmolejo afirmó que es importante “ser muy transparente en las razones detrás de los ajustes, tanto en el escenario en el que se dio la cifra inicial y la justificación y después establecer claramente por qué fue necesario realizar los ajustes”.
“El problema podría venir a la hora de que no haya transparencia y podría afectar un poco y generar incertidumbre y falta de conocimiento y hasta cierto punto falta de credibilidad”, agregó.
LOS FACTORES INFLUYEN
La Secretaría de Hacienda, agregó, está aprendiendo a tomar cautela respecto a sus estimaciones de crecimiento económico, y por eso bajó la estimación de 4.7 a 3.7 para el 2015
La nueva estimación, dijo, es acorde a los expresados por diversos analistas financieros y se aleja del “optimismo” gubernamental que no representaba con objetividad las acciones de la iniciativa privada, una vez aprobado el nuevo esquema legal de inversiones.
Acerca de esto Eduardo Ávila mencionó que “lo primero que se podría ver de esta revisión tan fuerte es ¿cómo es posible que en un escenario donde hay reformas la SHCP mande la señal de que 4.7 si se va a crecer 3.7?”.
Existen dos factores. Un externo que tiene que ver con Estados Unidos, país que ha tenido un proceso de ralentización y que demuestra que no está creciendo de forma dinámica.
“Buena parte de la explicación de lo que le pasa a la economía mexicana tiene que ver con ellos y le puede pegar al crecimiento de México en este año y lo que viene del próximo”, agregó el analista de Grupo Monex.
El segundo factor es que el impacto de las reformas en la economía mexicana no es de la noche a la mañana y tardarán tiempo. “En el momento en el que la Secretaría de Hacienda revisa a la baja el crecimiento se ve un tanto conservador tanto en el impacto de las reformas en el siguiente año como también por la economía norteamericana.
Los cambios en las estimaciones de las cifras de crecimiento económico pueden ser resultado de “diversos factores que han mostrado que se han mostrado más débiles de los que se pensaba”, señaló Arnaldo López.
Las condiciones cambian y dependen de múltiples factores. Para el crecimiento económico de año por ejemplo, no contábamos con que el gasto público se había desacelerado con el hecho de que habría una reforma fiscal que iba substraer más recursos del sector privado y que el público no los iba a utilizar de manera inmediata, señaló Eduardo González.
IMPORTANCIA DE LAS PROYECCIONES
A pesar de que Luis Videgaray Caso insiste en que sus cifras son meras estimaciones, pasa por alto que dichos número son de vital importancia para que el bienestar económico sea posible, ya que es la única idea de certeza que un país puede dar para que empresarios e inversionistas, tanto nacionales como internacionales, hagan sus apuestas y desarrollen sus negocios o empresa dentro del país.
En función de la variable de crecimiento económico se puede saber si “la demanda va crecer o no, la producción crecerá o no. Si habrá efectos en función del comportamiento de las actividades económicas con relación con la inflación o los tipos de cambio”, informó Eduardo González.
Los recortes y proyecciones del crecimiento se basan en una cantidad muy diversas de indicadores, y no solo en herramientas estadísticas sino de variables económicas. Sin embargo, el indicador más importante son los resultados que se van dando lo que indican qué tan favorable ha sido el previamente dado pronóstico.
Sobre este tema Eduardo Ávila reconoce que la proyecciones económicas son bastante importantes para diferentes agentes de la economía. “Para el empresario es una muy buena cifra que le permite saber a qué panorama hay de la economía, si se percibe complicada o con buen crecimiento bueno.”
En el caso del gobierno, “le sirve para poder saber hacia dónde destinar el presupuesto, sobre todo para la parte de planeación y ver qué harán en un futuro”, concluyó.