Ciudad de México, 16 feb (dpa) – La cumbre de mandatarios de América del Norte que se realizará el miércoles en la ciudad mexicana de Toluca se centrará en competitividad, fronteras, seguridad, innovación y cooperación educativa, informó hoy el gobierno mexicano.
El lema del encuentro, al que asistirán los presidentes de Estados Unidos, Barack Obama, de México, Enrique Peña Nieto, y el primer ministro de Canadá, Stephen Harper, será “América del Norte del siglo XXI: Construyendo la región más competitiva y dinámica del mundo”.
“Hoy la agenda regional es amplia y equilibrada”, dijo el subsecretario mexicano de Relaciones Exteriores para América del Norte, Sergio Alcocer, en un encuentro con la prensa, acompañado por los embajadores de México en Estados Unidos, Eduardo Medina Mora, y en Canadá, Francisco Suárez Dávila.
“La cumbre permite a los gobiernos identificar prioridades comunes, acordar objetivos y definir líneas de acción específicas”, señaló.
Los tres países, que desde hace 20 años están unidos por el Tratado de Libre Comercio para América del Norte (TLCAN), se reunirán en Toluca en su séptima cumbre desde 2005 y la primera en la que participa Peña Nieto.
Se trata del encuentro de más alto nivel entre los líderes de América del Norte.
Entre los temas figuran la modernización de las fronteras para impulsar la competitividad y el Tratado de Asociación Transpacífica (TPP), en el que participan 12 países, entre ellos Estados Unidos, México y Canadá, y con el que se pretende indirectamente actualizar también el TLCAN.
“No es el interés de ninguno de los tres países el reabrir el Tratado de Libre Comercio, sino el de aprovechar las negociaciones que se están teniendo vía TPP para cubrir aquellos aspectos que hace 20 años no se incluyeron en el tratado, muchos de los cuales todavía no existían”, explicó Alcocer, en referencia a temas como el comercio electrónico.
La cuestión de la seguridad y los grupos del crimen organizado también estará presente en la cumbre, si bien el gobierno de Peña Nieto, desde su llegada al poder hace poco más de un año, ha buscado que las preocupaciones de seguridad no monopolicen la agenda.
“Ocupará un lugar tan importante como los otros”, dijo Alcocer. “Contando con la seguridad en el hemisferio podemos aspirar a que sea más competitiva y dinámica la región”, señaló.
Súarez Dávila indicó que un asunto prioritario que buscan los países de América del Norte es simplificar el movimiento de bienes y personas a través de las fronteras, que se convirtieron en fortalezas luego de los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos.
“Después de los sucesos del 9/11 se convirtieron en muros orientados a la seguridad”, dijo. “Ahora se está trabajando para que las fronteras más bien ya no sean muros, sino mecanismos para facilitar el movimiento de bienes y el movimiento de personas”.
La cumbre de Toluca, unos 70 kilómetros al oeste de Ciudad de México, servirá también para encuentros bilaterales de los mandatarios entre sí.
América del Norte es una región de unos 470 millones de habitantes, que genera un producto interior bruto (PIB) combinado de 20 billones de dólares, un 28 por ciento del PIB mundial.
Desde la entrada en vigor del TLCAN en 1994, el comercio trilateral aumentó un 265 por ciento.