El modus operandi comienza desde que se inscriben en una app para conocer personas. Las y/o los criminales hacen contacto con las víctimas, se quedan de ver en un lugar externo -hasta el momento han sido restaurantes de la Miguel Hidalgo-, de ahí se trasladan a los domicilios.
“Las personas que son víctimas refieren que después de convivir 20 o 30 minutos, pierden el conocimiento, y cuando se despiertan hay algunas cosas de sus pertenencias que ya no las encuentran”, explicó el Subprocurador.
Ciudad de México, 14 de noviembre (SinEmbargo).- La Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México investiga una nueva forma de cometer robos en la Ciudad de México desde agosto pasado, en donde criminales, al parecer mujeres principalmente, abordan a las víctimas a través de Tinder, y cuando logran ir a sus domicilios, los drogan, y les roban sus pertenencias.
El modus operandi comienza desde que se inscriben en una app para conocer personas. Las y/o los criminales hacen contacto con las víctimas, se quedan de ver en un lugar externo, -hasta el momento han sido restaurantes de la Miguel Hidalgo-, de ahí se trasladan a los domicilios.
“Las personas que son víctimas refieren que después de convivir 20 o 30 minutos, pierden el conocimiento, y cuando se despiertan hay algunas cosas de sus pertenencias que ya no las encuentran y es como han denunciado los robos”, explicó el Subprocurador de Averiguaciones Previas Desconcentradas, Guillermo Terán Pulido al informar sobre los casos, durante una rueda de prensa hoy por la mañana. Hasta el momento cuentan con cuatro casos presentados.
Actualmente la PGJ-CdMX cuenta con cuatro casos bajo este modo de operar, realizados principalmente en la delegación Miguel Hidalgo.
“La primera (carpeta de investigación) empezó en agosto y las tres ultimas son de octubre” detalló el Subprocurador.
A su vez, indicó que hasta el momento, no se tiene ninguna personas que haya sido privada de la vida por estos hechos, o personas con daños a la salud por la sustancia que les dan para dejarlos dormidos.
“Todo ha quedado solo en bienes, no ha trascendido”, dijo el funcionario.
Finalmente indicó que actualmente están en proceso los exámenes para determinar cuál es la sustancia que usan esos criminales y que provoca somnolencia a las víctimas.