A pesar de que Sinaloa está entre los ocho estados del País con más número de fallecimientos relacionados con el crimen organizado, el Gobernador Mario López Valdez dijo que la situación hoy está mejor y que la prueba está en que la cifra de homicidios disminuyó en comparación con 2010, asegura el diario Noroeste.
“Si la PGR está dando cifras contrarias desmiento a la PGR porque en Sinaloa el número de muertos del 2011 comparado con el 2010, está descendiendo en un 16 por ciento. Tuvimos 2 mil 251 en el 2010 y en el 2011 tuvimos mil 907 y mil 907 es menos que 2 mil 251 aquí y en China”, dijo Mario López Valdez.
Recientemente la PGR publicó su base de datos por fallecimientos por presunta rivalidad delicuencial. En esa lista destaca Sinaloa con mil 100 homicidios de enero a septiembre de 2010.
López Valdez dijo desconocer si la disminución en los índices de muertes registradas estaban relacionadas con el crimen organizado. Lo que importa, destacó, es que el número va a la baja.
“No sé las clasificaciones que ellos le den, a mí lo que me interesa es que en Sinaloa haya menos muertos y es lo que está ocurriendo”, dijo el gobernador
En el discurso que Malova ofreció en la ceremonia del banderazo de inicio de 14 obras turísticas, “presumió” que el Estado estaba regresando a los tiempo de calma.
“Ya no es tanta preocupación como los primeros meses del año 2011”, aseguró. “Debo decirles que a nivel estatal hemos disminuido el número de muertos en un 16 por ciento, a nivel nacional ha aumentado el número de muertos en el 11 en comparación al 10, somos muy poquitos estados, creo cinco nada más, que podemos decir que andamos en una tendencia hacia la baja”.
FAMILIAS DE LOS ALTOS DE SINALOA ABANDONAN SUS HOGARES
En los últimos días los habitantes de Los Altos de Sinaloa han tenido que abandonar las comunidades, han salido con sus familias. A ellos se les encuentra en los sinuosos caminos que bajan a Sinaloa de Leyva o al valle de Guasave, dice el diario Debate.
Los hechos ocurridos en Ocuragüe también preocupan en San José de Los Hornos y otras rancherías cercanas han decidido abandonar sus hogares para salvar sus vidas.
Desde temprana hora del miércoles vecinos de las comunidades alteñas de este municipio decidieron abandonar sus hogares dejando todas sus pertenencias, para evitar que grupos delictivos los asesinen, como ocurrió con María Maximiliana Román Zayas, Sergio Camargo Leyva y del joven Servando Martínez Torres.
Los vecinos viajaban en motos y camionetas donde cargaban ropa y algunas pertenencias de valor que podían sacar de sus viviendas.
El miércoles fue espantoso”, dijo una señora que accedió a platicar con reporteros. “Estaba viendo la novela y escuché una balacera… Me quedé pensando y a esperar al día siguiente para enterarse de lo que había pasado. Aquí la noticia se desplaza por diversos medios, desde los radios que portan quienes se trasladan en cuatrimotos, hasta de manera personal.”
En el trayecto se encontró una camioneta en donde venían trabajadores de una compañía que laboran en la introducción de cables para llevar energía eléctrica.
Son varias las familias las que han dejado sus hogares en Ocuragüe o San José de Los Hornos.
Aquí los habitantes dicen que los militares poco hacen cuando se enteran de algún hecho violento, les pasó el martes de esta semana cuando se ejecutó a una persona en Ocuragüe.
“Nada hicieron”, dice uno de los vecinos entrevistados. “Lo único que hacen es llegar a las viviendas y esculcarlas por todas partes sin dejar un rincón”.
“Aquí pareciera que el gobierno lo imponen otros. En las rancherías abandonadas sólo se escuchan los ladridos de perros y se ven los puercos sueltos en los patios. O hay perros esperando que sus amos retornen. Aquí el silencio momentáneo es interrumpido por el cacarear de las gallinas o el canto de los gallos. Muchas viviendas están solas. Es el otro Sinaloa, es la realidad”, indica el diario.