Ciudad de México, 12 de diciembre (SinEmbargo).– El Procurador de la República, Jesús Murillo Karam, afirmó que, durante el interrogatorio con el Cártel Guerreros Unidos, uno de los normalistas declaró que durante el camino fue cuando se les informó que iban a Iguala, Guerrero, a “impedir que hubiera un evento político”, es decir, el de la esposa del ex Edil, José Luis Abarca Velázquez.
–¿Qué hacían los jóvenes de primer ingreso de la Normal de Ayotzinapa en Iguala? –le cuestionó Jorge Fernández Menéndez durante el programa “Todo Personal” en Proyecto Canal 40.
En el minuto 14, el Procurador explica que el jefe de Guerreros Unidos interrogó a los normalistas tras ser entregados por la Policía de Iguala. Uno de ellos declaró que “iban a Chilpancingo a botear para venir a una manifestación el 2 de octubre. Pero se los llevaron directo a Iguala. En el camino les dijeron que iban a impedir que hubiera un evento político”. Murillo Karam enfatizó que eso era lo único que los estudiantes sabían.
En cuanto a los contra discursos sobre la información del basurero de Cocula donde tres miembros de ese Cártel asesinaron y calcinaron a un grupo de jóvenes, Murillo Karam los rechazó.
“En la región hubo chubascos aislados. Ahí [el basurero de Cocula] no pudo haber llovido porque las huellas del incendio son evidentes. Los peritajes son evidentes. Pudo haber habido un ‘chipichipi ‘ que en lugar de apagar un incendio, lo aviva”, dijo sobre las afirmaciones de que el 26 de septiembre se registró lluvia.
Sin embargo, el 13 de noviembre, el Secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos Zepeda, aseguró que esa noche del 26, por la distancia, los militares no estuvieron en condiciones ni de escuchar los disparos ni de ver las llamas del incendio “porque era un día lluvioso”.
Sobre los cuestionamientos del nivel de calor que se necesita para que un cuerpo sea calcinado, se limitó a decir: “me dicen los peritos que una llanta se quema a mil 500 grados”.
“TENEMOS QUE RESTABLECER LAS REGLAS”
“No puedo entender un acto de estupidez entre gente tan joven de los dos lados. Algo está mal”, subrayó el Procurador cuando el periodista Jorge Fernández le pidió explicar qué pasó la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre.
La responsabilidad mayor es del gobierno, dijo, pero a final de cuentas es de todos.
“Hay un problema educativo que tiene que ver con las escuelas y el entorno familiar, con la convivencia social. Tenemos que restablecer las reglas”.
La continuación de la investigación se basará primordialmente en la captura de los autores materiales. “Todavía hay operadores directos que tenemos que detener”.