Humberto Moreira se prepara para litigar en tribunales y con fuero constitucional: el Partido Revolucionario Institucional, que dirigió desde marzo de 2011 hasta diciembre del mismo año –y del que salió en medio de escándalos de corrupción y por el endeudamiento del estado del que fue gobernador, Coahuila– pretende hacerlo Senador de la República.
Desde el Senado haría sus alegatos formales por la contratación de deuda ilegal en Coahuila y por los nuevos señalamientos que pudieran formularse a partir de su pleito con rivales políticos.
Desde que dejó la presidencia nacional del PRI, el ex dirigente contrató a un grupo de abogados que prepara desde hace semanas una estrategia de defensa legal, en caso de que avancen las denuncias que existen en la Procuraduría General de la República (PGR) sobre la deuda de Coahuila durante su gestión como gobernador, además de revisar otros temas jurídicos y defenderse ante nuevas denuncias en su contra.
Moreira, un líder populista, no camina solo, según varias fuentes. Primero, tiene el apoyo de Enrique Peña Nieto, precandidato del PRI a la presidencia de la República. Además, el PRI local ha expresado su intención “blindarlo”.
El dirigente del PRI en Coahuia, Salvador Hernández Vélez, declaró al diario El Siglo de Torreón, que su partido está dispuesto a ofrecer todo su apoyo a Humberto Moreira si decide contender por un escaño en el Senado de la República.
Aseguró que no hay una “intención formal” de Moreira Valdés de buscar una candidatura, pero dijo que esa opción no se descarta, “pues cuenta con el reconocimiento de los militantes”.
El hermano de Moreira, Rubén, es el gobernador de Coahuila y el primer priista, por lo tanto, de la entidad. La nominación es un asunto de voluntad: sólo requeriría que su lo hermano.
Con la salida de Humberto Moreira del Gobierno coahuilense para presidir al PRI nacional, Rubén Moreira, su hermano, se convirtió en el abanderado del PRI y “destrozó” a la oposición, con una victoria que acumuló más de 60% de los votos emitidos en la entidad.
“Es una cuestión que tiene que decidir Humberto, pero él ha sido fundamental en el estado. Si él toma la decisión de participar sería un gran activo del partido”, dijo Hernández Vélez al periódico El Siglo de Torreón.
LA DENUNCIA DE LOS PANISTAS
El día de ayer, diputados y senadores panistas presentaron ante la PGR una denuncia mas contra el exgobernador priísta de Coahuila, Humberto Moreira Valdés, y diversos funcionarios de su administración.
Los acusan de cometer diversos delitos para contratar deuda gubernamental por más de 37 mil millones de pesos.
El senador Guillermo Anaya, ex candidato a Gobernador del PAN en Coahuila, dijo que los delitos que presuntamente cometió Moreira son: ejercicio indebido de servidores públicos, uso indebido de atribuciones y facultades, y falsificación de documentos en general.
Añadió que Moreira ha mentido varias veces al que ignoraba el monto de la deuda y que ésta no se contrató durante su administración, para termina aceptando que supuestamente se uso para obras de infraestructura.
Pero las cosas no están tan bien para los Moreira.
Hace dos semanas que su escolta fue atacada por un comando armado en las inmediaciones del fraccionamiento en que vive en la ciudad de Saltillo. El Gobernador Rubén Moreira reconoció ayer en un noticiero radiofónico que recientemente colocaron cerca de su casa mensajes amenazantes en su contra.
Coahuila vive ese ambiente de inseguridad, que se achaca a los gobiernos de Coahuila, por un lado, aunque también a la estrategia de seguridad implementada por el presidente Felipe Calderón.
“Al admitir que ha sido blanco de amenazas, el Gobernador Rubén Moreira está reconociendo el serio problema de inseguridad que aqueja a los coahuilenses, lo cual constituye un avance porque durante el sexenio que encabezó su hermano Humberto, sistemáticamente negó que lo hubiera”, dijo Carlos Orta, dirigente estatal del PAN.
“Es bueno reconocer cuando algo está sucediendo, sobre todo cuando las cosas no andan bien, cuando se quiere extirpar un tumor canceroso, primero hay que aceptar que se tiene y no estarlo negado”, señaló el panista.
“Eso no sucedió en los últimos seis años, cuando Humberto Moreira trató de simular que no sucedía nada mientras que en Coahuila el crimen organizado permeaba en las distintas corporaciones”, dijo Orta.
Por otro lado, también es cierto que el tema Humberto Moreira ha sido politizado por el grupo más cercano del presidente Felipe Calderón. El caso más notorio es el del precandidato del PAN a la Presidencia de la República, Ernesto Cordero, quien presumió en días pasados que “tiró” a Humberto Moreira de la dirigencia nacional del PRI.
En un evento con militantes panistas del Estado de México, Cordero señaló que para que Acción Nacional salga victorioso el 1 de julio se debe enfrentar a los contendientes con argumentos, con determinación, con la verdad y no hablándoles “suavecito”.
“Así lo hicimos con Moreira, y Moreira ya no está como presidente del Partido Revolucionario Institucional, hay que pensar bien lo que pasó ahí: Humberto Moreira parecía invencible, parecía intocable, se sentían reyes y virreyes de este País.
