El serial de audios que sugiere alta corrupción en su entraña ya no parece atemorizarla y el paisaje parece bueno para iniciar una nueva vida. En el primer trimestre, OHL-México recuperó 52 por ciento de sus títulos, uno de sus mejores inicios de año en la Bolsa Mexicana de Valores. De la auditoría a sus contratos firmados con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes –un proceso anunciado desde hace un año– la Secretaría de la Función Pública no tiene aún los resultados. Los ciudadanos comunes no tienen acceso a los convenios más costosos que ha firmado, el del Viaducto Bicentenario y el de Empalme I, porque se encuentran bajo reserva. Y así, en estos momentos, su alcance de dinero público sólo con dependencias y organismos federales es de 24 mil 496 millones 543 mil 571 pesos con 16 centavos.
Por Daniela Barragán, Alejandra Padilla y Linaloe R. Flores
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Ciudad de México, 11 de mayo (SinEmbargo).– La Secretaría de la Función Pública (SFP) no tiene aún los resultados de la auditoría a los contratos que Obrascón Huarte Lain en México (OHL-México) firmó con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), y que implican 15 mil 976 millones 193 mil 016 con 99 centavos, un proceso anunciado hace un año.
Eruviel Ávila Villegas, Gobernador del Estado de México, dio a conocer antes que nadie que la filial de la española OHL sería auditada por la operación del Viaducto Bicentenario. Era 8 de mayo de 2015. Días después, el Secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, se unió a la propuesta. “Me sumo al Gobernador Eruviel Ávila de que si hay alguna duda en una concesión, o en dos o en tres, o en las que sean, se auditen, a efecto de que refleje si hubo un problema, una cuestión indebida o engaño se refleje en la auditoría”, expuso el funcionario.
Así fue que a los 10 mil millones que costó el Viaducto Bicentenario se sumaron los 15,976 millones de pesos de cuatro licitaciones de la SCT. Una es la que implica la construcción y operación de la autopista Atizapán-Atlacomulco cuyas obras no se han iniciado por retraso en el otorgamiento de los derechos de vía, otra es para la construcción del primer tramo del Tren México-Toluca en el que participa con Grupo Hermes y dos más conciernen a la construcción del Tren Eléctrico de Guadalajara.
No es lo único que tiene OHL-México.
En contrataciones a nivel federal –es decir, dependencias y organismos descentralizados- el alcance supera los 24,496 millones 543 mil 571 pesos con 16 centavos, según una investigación de la Unidad de Datos de SinEmbargo a través de mecanismos de Transparencia.
De las licitaciones que están bajo auditoría, la cartera a cargo de Ruiz Esparza sólo mencionó una en sus respuestas: la autopista Atizapán-Atlacomulco y omitió tres que reconoce la SFP para su investigación y fueron signados por la presente Administración.
Entre los organismos descentralizados, sólo la Comisión Federal de Electricidad reconoció un contrato con OHL: Empalme I (antes Guaymas II), la planta de ciclo combinado que estará en la población sonorense del mismo nombre y que usará gas natural como combustible. Por esto, OHL-México firmó por 476 millones 884 mil dólares.
Para el cálculo de la cifra, no fueron incluidos dos contratos que admitió Petróleos Mexicanos (Pemex) porque se requería un pago que superaba los 200 mil pesos para conocer su costo.
EL AÑO EN QUE TODO FLORECIÓ
Originario de Valle Santiago, Guanajuato, el ingeniero civil, José Cosme Mares Hernández dio muestras de prosperidad mientras transcurría el sexenio de Vicente Fox Quesada. Cuando se le mencionaba, se aludía a un personaje similar a quien hoy es Juan Armando Hinojosa Cantú, dueño de Grupo Higa y constructor de la “casa blanca”. Al ex Presidente, Cosme Mares lo conoció antes de que fuera Gobernador de Guanajuato. Cuando Fox preparó su campaña para la Presidencia, le ayudó a recabar fondos a veces con cantidades de más de tres ceros. Fue de los llamados “amigos de Fox”.
La SCT no le entregó a SinEmbargo ni referencias ni copias de dos contratos con OHL que en este momento audita la Función Pública. En cambio, le dio entera la documentación de una concesión para operar la autopista Amozoc-Perote y Libramiento de Perote por mil 31 millones 530 mil pesos, concedida en 2003 a Grupo Autopistas Nacionales S.A (GANA), cuyo representante legal era Cosme Mares, presunto prestanombres del ex Presidente Vicente Fox Quesada (2000-2006).
En 2003, la SCT –entonces a cargo de Pedro Cerisola y Weber– le otorgó a la empresa GANA de Cosme Mares, por un periodo de 30 años, la concesión para construir, operar, explotar, conservar y mantener la carretera de altas especificaciones de jurisdicción federal de 104.9 kilómetros de longitud, con origen en el entronque Orizaba y con terminación en el entronque Perote III. Pero la obra se mantuvo parada durante dos años.
GANA había hecho la construcción con recursos a cargo del Fideicomiso Fondo de Inversión en Infraestructura (Finfra), constituido por el Gobierno federal en Banobras para el financiamiento de proyectos con participación privada. El 9 de agosto de 2005, la empresa representada y dirigida por Mares, informó en un escrito a la SCT que había suscrito un contrato de crédito con Banobras, pero la institución no le otorgó los recursos comprometidos. Ello le impedía continuar con la construcción. Dijo también que había iniciado gestiones ante diversas instituciones financieras que le habían requerido nuevos accionistas a su capital social. En este punto de la historia, Cosme Mares invitó a participar a OHL Concesiones México S.A. de C.V., según consta en el documento obtenido por SinEmbargo. Y a partir de este punto de la historia, OHL-México empezó a ganar contratos. Ya nada ni nadie la pudo parar. En 2003, ganó en el Estado de México, el contrato para construir y operar el Circuito Exterior Mexiquense por 5,700 millones de pesos. Entre 2012 y 2015 ganó otros tres contratos por más de 26,000 millones de pesos, para un tramo del tren México-Toluca.
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José Andrés de Oteyza y Fernández llevaba cinco meses al frente de OHL-México (había llegado a la silla principal del consorcio en marzo de 2005, el penúltimo de Vicente Fox) cuando el consorcio se incorporó en la construcción de la carretera Perote III. Bajo las riendas del hombre que fue Secretario de Patrimonio y Fomento Industrial en el Gobierno de José López Portillo, la empresa empezó a florecer. En el Estado de México se iniciaba la Administración de Enrique Peña Nieto y allá se arrancó con carreteras que sumaron más de 200 kilómetros con concesiones de operación de hasta 30 años.
Pasaron 10 años. En mayo de 2015, la voz de De Oteyza apareció en una grabación difundida en el canal YouTube. Esa fue la primera de 11. Y desde entonces, una sombra persigue a la constructora que alguna vez sólo vio contratos y ganancias. En el primer audio puesto a la luz por manos anónimas, se escucha discutir a De Oteyza con Pablo Wallentin, uno de sus operadores. Hablan de aumentar los peajes en los 22 kilómetros del Viaducto Bicentenario, la concesión más grande que en este momento tiene el Gobierno del Estado de México con OHL. Discuten sobre millones de pesos y construcciones de ficción.
A De Oteyza se le oyó también con Gerardo Ruiz Esparza, Secretario de Comunicaciones y Transportes. El contenido de ese audio sugiere que la dependencia le brindó información sobre licitaciones de carreteras antes de publicar los concursos. El funcionario negó esta práctica.
OHL-México se hundió 22 por ciento ante los inversionistas y empezó una etapa de oscuridad y vericuetos. Pablo Wallentin fue el primero en renunciar.
En abril pasado, apenas entregó su reporte trimestral a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), la empresa llegó con una noticia boletinada: José Andrés de Oteyza dejaba la presidencia del consejo de administración por motivos personales. En el mismo comunicado, la empresa informó que Juan Luis Osuna Gómez, hasta ahora vicepresidente del Consejo de Administración de la Compañía, había sido ratificado por la Asamblea General Ordinaria de Accionistas como nuevo presidente del Consejo de Administración.
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Por lo menos 18,591 millones 350 mil 554 pesos con 17 centavos, provenientes de dos contratos de OHL con el Gobierno federal, se encuentran bajo los candados de la reserva. Uno, el del Viaducto Bicentenario por 10,071 millones de pesos, que se encuentra bajo la auditoría de la SFP. El otro es el del Proyecto 296 CC Empalme I, otorgado por la Dirección de Proyecto de Inversión Financiada de la CFE, por 476 millones 844 mil 369 dólares, unos 8,520 millones 350 mil 554 pesos con 17 centavos.
El argumento del resguardo del Viaducto Bicentenario consta en la Fracción XVI del Índice de Información Reservada del Infoem (el sistema de acceso a la información del Gobierno del Estado de México). Fue el Gobierno de Eruviel Ávila el que puso en 2013 bajo llave esta información. Su razón jurídica la basó en el artículo 20 de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública del Estado de México y Municipios. La revelación de esos datos durante el periodo de la concesión, según la normativa “puede dañar la conducción de acuerdos interinstitucionales incluida aquella información que otros estados u organismos institucionales entreguen con carácter de confidencial al Estado de México”.
De OHL, el Gobierno de Eruviel Ávila también tiene bajo reserva hasta 2024 los datos relacionados con el Sistema Independiente de Verificación de Aforos (SIVA), la concesión que originó el escándalo de corrupción de la filial en México de OHL México.
Aunque desde 2013, el conductor que transita cada día por el Circuito Exterior Mexiquense ha pagado 50 centavos para ser monitoreado con ese sistema, si pregunta por el destino de sus pagos, no obtendrá ninguna respuesta.
El Gobierno del Estado de México argumenta que la concesión del Circuito está inmersa en un proceso judicial. En mayo de 2015, el Gobierno canceló el contrato por considerar que la empresa encargada, Infraiber, cobraría un monto excesivo por el servicio, de 50 centavos. Luego, el mismo Gobierno mexiquense acordó con OHL México continuar con ese mismo cobro. La decisión de la remoción del contrato habría sido una orden del propio Presidente Enrique Peña Nieto, según uno de los audios colgados en el canal Youtube.
En cuanto a la información del Proyecto 296 CC Empalme I, la CFE se sustentó en la Ley de Obras Públicas y la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental para poner bajo candado información del contrato. El organismo recurrió al derecho de los particulares; es decir, las mismas empresas del consorcio, a reservar la información que pudiera ser útil para un competidor.
Así, no es posible conocer las especificaciones del proyecto y sus normas, la interconexión de la central con el Sistema Eléctrico Nacional en los términos de las bases de la licitación, el manual del sistema de gestión ambiental, el manual de la gestión de la calidad.
Y si OHL-México incurre en una anomalía en este proyecto, tampoco podrá saberse. De acuerdo con la cláusula 30.2 del contrato, el procedimiento de peritaje será administrado conforme a las reglas de Determinación Experta (Expert Determination) de la Corte Internacional de Arbitraje de Londres (London Court of International Arbitration) y ese reglamento también quedó reservado.
Ahora, en cuanto a dinero, no puede conocerse mucho. La documentación para financiamiento que recibió 296 CC Empalme I también está bajo la cerradura de la clasificación.
296 CC Empalme I fue adjudicado el 27 de febrero de 2015. Participaron, entre otros, Abner Energía, Iberdrola Energía y Construcción México, y Mitsubishi Corporation.
UN NUEVO INICIO
Bajo auditoría, con una serie de audios que narran alta corrupción en sus esferas y cuyo final no parece haber llegado, sin De Oteyza en su presidencia, OHL-México ha iniciado una nueva etapa. Pese a todos los pesares, sus contratos multimillonarios están vigentes.
La multa por 73 millones de pesos por parte de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) por reportar ingresos esperados (es decir, tenía la expectativa; pero aún no los ha recibido) no la debilitó ni en imagen ni en expansión. OHL México se presentó de pie y fuerte en el primer reporte trimestral ante los inversionistas. Sin modificar un ápice su formato de informe, expuso un aumento de 15.3 por ciento de su flujo operativo por cuota.
La difusión de las grabaciones hizo que sus acciones se desplomaran más de 15 por ciento a un precio de 23 pesos, el menor desde diciembre de 2012. Pero el castigo parece haber quedado atrás. En el primer trimestre, según su reporte, los títulos se incrementaron en 52 por ciento, el mejor inicio de año desde 2010.