Junto con autoridades del Gobierno del Estado, del Comité Estatal del PRI, y representantes de la Presidencia de la República, Fernando Purón Johnston, candidato a diputado federal de la coalición ‘Todos por México" asesinado la noche del viernes, fue despedido frente a su esposa, Cinthia Villarreal; su madre, María Johnston de los Santos, y sus amigos más cercanos.
Rodrigo Fuentes, líder estatal del PRI, confirmó ayer que Purón contaba con un elemento de seguridad, aunque no se sabe por qué el elemento no se encontraba cerca la noche del asesinato.
Por Armando Ríos
Piedras Negras, Coahuila/Ciudad de México, 10 de junio (Vanguardia/SinEmbargo).- Fernando Purón se caracterizó por mantener una lucha frontal contra el crimen organizado en la región de Piedras Negras, pero habría bajado la guardia: fuentes cercanas a su equipo señalaron que como Alcalde contó con hasta 10 escoltas, que se redujeron sólo a uno como candidato a Diputado federal.
El extinto abanderado del PRI, PVEM y Nueva Alianza por el Distrito 1 –asesinado el viernes y despedido ayer por familiares, políticos y autoridades–, externó durante la campaña su oposición a "Los Zetas" y a quienes señaló como responsables de haberlos dejado entrar en la ciudad.
“A la delincuencia se le enfrenta, no se le tiene miedo, se le llama por su nombre (…) desafortunadamente no todos los gobernantes cumplen con su tarea, algunos hasta están coludidos con la delincuencia, no vayamos muy lejos, nuestros vecinos de Tamaulipas”, expuso el viernes durante un debate contra sus rivales por la curul, tras lo cual fue atacado con un arma de fuego.
Cuestionado horas después de ocurrido el atentado, sobre si la delincuencia organizada pudo estar detrás de éste, el Gobernador Miguel Riquelme manifestó que no podía descartarse.
“Fernando Purón fue un Alcalde que combatió la inseguridad (…) el crimen organizado siempre está al acecho para querer seguir trabajando y delinquiendo en Coahuila. No lo vamos a permitir, vamos a trabajar de manera coordinada con el Ejército y las Fuerzas Armadas”, dijo el mandatario.
NADIE VIO ALGO RARO
Rodrigo Fuentes, líder estatal del PRI, confirmó ayer que Purón contaba con un elemento de seguridad, aunque desconoció por qué no se encontraba cerca la noche de su asesinato.
El video de vigilancia que captó el momento del homicidio muestra al autor –un hombre con gorra y barba– acechando al menos 37 segundos al candidato del PRI, tras salir del Auditorio de la Facultad de Contaduría de la UAdeC en Piedras Negras, donde debatió con sus adversarios.
Entre las 21:56:58 y las 21:57:04 horas, el responsable pasó a cuatro o cinco metros de Purón, e incluso lo voltea a ver; luego, entre las 21:57:05 y 21:57:20 permanece vigilándolo estático a 10 metros (15 segundos).
A las 21:57:21 retoma el movimiento: busca ponerse en línea recta y sin obstáculos ante Purón (aproximadamente a ocho metros), y lo observa otros segundos; a las 21:57:29 mira algo entre sus manos, al parecer un celular, que guarda en su bolsillo izquierdo. Tras esto gira el rostro 180° y un segundo después está convencido de que es momento de atacar.
A las 21:57:32 comienza a abalanzarse hacia Purón y a la mitad del camino saca de entre el pantalón y su estómago el arma que activó contra el candidato a las 21:57:37, justo cuando estaba de espaldas posando para una selfie que tomaba una mujer.
De inmediato Purón cae al suelo y el barbado desaparece del cuadro. Nada de esto pareció sospechoso.
LO DESPIDEN SIMPATIZANTES Y AUTORIDADES
Junto con autoridades del Gobierno del Estado, del Comité Estatal del PRI, y representantes de la Presidencia de la República, Fernando Purón Johnston, candidato de ‘Todos por México" asesinado de un disparo en la cabeza durante la noche del pasado viernes, fue despedido frente a su esposa, Cinthia Villarreal, su madre, María Johnston de los Santos y sus amigos más cercanos.
Fueron por lo menos 200 simpatizantes los que se dieron cita a La Gran Plaza para despedir al ex Edil de Piedras Negras a partir de las 17:30 horas de este sábado.
Al igual que las consignas en exigencia de justicia, los aplausos y las porras que lo acompañaron hasta el último día de su campaña salieron del pecho de sus más allegadas simpatizantes, mientras el Secretario de Gobierno, José María Fraustro y el Gobernador, Miguel Ángel Riquelme rendían la primera guardia de honor.
Luego de rendir un minuto de aplausos al ex Alcalde de la ciudad fronteriza, Miguel Ángel Riquelme, empezó su discurso de despedida, recordando la biografía del mismo, y su paso en la política coahuilense.
“Su tarea la rindió con sencillez y alegría, desde los puestos más modestos, hasta los de mayor responsabilidad. Purón se inició en el servicio público como director de imagen urbana en el 2004, mientras ocurrió la inundación de Villa de Fuente”, explicó.
Recordó que dentro de su paso, el ex Edil formó parte de la Cámara de Comercio en Piedras Negras a los 25 años de edad, fue Alcalde de la misma, además de dirigir el proyecto de la Plaza de las Culturas, y formó parte de su equipo de coordinación en materia de procuración de justicia antes de ascender a la gubernatura el pasado 1 de diciembre.
“Purón participó decididamente en recobrar la paz y la tranquilidad de todos los coahuilenses, particularmente aquí en Piedras Negras”, expresó durante su discurso.
Por su parte, el Secretario del Trabajo y Previsión Social, Roberto Campa Cifrián, representante del Presidente Enrique Peña Nieto, se comprometió a que, desde el Gobierno federal, se pondrá toda la disposición para dar con los culpables del homicidio contra el ex Edil que ocurrió a las afueras de la FCA de la Universidad Autónoma de Coahuila tras la realización de un debate entre los candidatos a diputados por el distrito 01.
Ambos representantes gubernamentales pusieron un estandarte con la bandera del Estado de Coahuila, misma que lo acompañó a las afueras de la presidencia municipal de Piedras Negras durante su mandato como alcalde de la misma, y que concluyó en noviembre del 2017.
Posterior al evento, el cuerpo de Fernando Purón fue recibido por otro tumulto de al menos 300 personas a las afueras del Santuario de Guadalupe, donde sus allegados siguieron con la misa de cuerpo presente, para después trasladarlo a su sepultura, en el Panteón Santo Cristo a las afueras de Piedras Negras, Coahuila.