Toronto (Canadá), 9 sep (EFE).- El Gobierno de Canadá considera que México “no cumple” los requisitos socio-económicos para eliminar el visado a sus ciudadanos, reveló hoy el secretario del Ministro de Asuntos Exteriores, Bernard Trottier, durante un acto en Toronto.
En un debate con otros candidatos a las elecciones generales del 19 de octubre organizado por el Consejo Canadiense para las Américas (CCA), Trottier, Diputado del gobernante Partido Conservador, afirmó que bajo “el criterio objetivo de Canadá para países que no requieren visado, México no es uno de esos países en estos momentos”.
“Esperamos que lo sea en el futuro, como lo es Chile, pero no cumple esos criterios. Están basados en factores socio-económicos. Como todos saben, hay muchos problemas con la criminalidad en muchas partes de México. Y por esas razones, el visado sigue siendo requerido”, añadió el diputado conservador.
Las palabras de Trottier, que integra el Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara Baja, contradicen las declaraciones públicas realizadas por otros representantes del Gobierno del primer ministro canadiense, Stephen Harper, que en 2009 impuso de forma imprevista el visado de entrada a los ciudadanos mexicanos.
El requisito de visado, que ha reducido de forma dramática las visitas en Canadá de ciudadanos mexicanos, tanto por motivos turísticos como de negocios, ha sido un escollo diplomático entre los dos países.
Las autoridades mexicanas han intentado desde hace años convencer a Harper de la necesidad de eliminar el visado a sus ciudadanos, pero el mandatario canadiense se ha negado a hacerlo.
Cuando en 2009, el Gobierno canadiense impuso el visado, Harper justificó la medida porque en 2008 más de 9.400 mexicanos solicitaron refugio en Canadá.
Sin embargo, el Gobierno de Harper añadió que la medida era temporal y que el problema no era México, sino las “generosas” leyes de refugio en vigor en Canadá.
Desde entonces, las autoridades canadienses han cambiado las leyes de refugio y han incluido a México en la lista de “países seguros”, lo que dificulta la aceptación de solicitudes de asilo procedentes del país latinoamericano, a la vez que agiliza el proceso.
Con estos cambios, en 2013, las solicitudes de asilo se redujeron un 70 por ciento, según datos oficiales.
A pesar de ello, el Ejecutivo canadiense se ha negado a eliminar el requerimiento.
Trottier señaló que, gracias a los visados para mexicanos, el Gobierno canadiense se ha ahorrado 500 millones de dólares al año, el coste del procesamiento de las peticiones de asilo.
El diputado conservador también dijo que, aunque México no cumple los requisitos para eliminar los visados, es un país lo suficientemente seguro como para que no estén justificadas las peticiones de refugio procedentes de este país.
Aunque oficialmente la disputa no ha afectado a las relaciones diplomáticas entre los dos países, las señales del enfriamiento de entre México y Ottawa son evidentes.
Canadá canceló este año de forma inusual la celebración de la Cumbre de Norteamérica con Estados Unidos y México, llamada coloquialmente de “los tres amigos”, y la pospuso para después de las elecciones canadienses.
El antiguo ministro de Defensa de Canadá y diputado del Partido Liberal John McCallum dijo hoy, durante el debate de CCA, que la cancelación de la cumbre es una prueba de las malas relaciones de Harper con los presidentes de México, Enrique Peña Nieto, y de Estados Unidos, Barack Obama.
McCallum añadió que, si el Partido Liberal gana las elecciones generales del 19 de octubre, eliminará rápidamente los requisitos de visado para México.
En términos similares se expresó la representante del socialdemócrata Nuevo Partido Democrático (NPD), Tanya DeMello, al que la mayoría de las encuestas sitúan en primer lugar en preferencia de voto, por delante de liberales y conservadores.
DeMello señaló que un Gobierno del NPD eliminaría el visado y repararía las relaciones con el continente americano, que, en su opinión, se han dañado durante los pasados nueve años de Gobierno conservador. EFE