La tormenta tropical “Franklin”, que se espera se convierta en huracán, se dirige rumbo a los estados del centro del país y ocasionará fuertes lluvias, de acuerdo con el último reporte de la Comisión Nacional del Agua.
La capital del país no está preparada para afrontar precipitaciones como las de los últimos días debido a la urbanización desordenada. Apenas en junio, las “lluvias atípicas”, como las llamó el Gobierno capitalino, provocaron inundaciones en varias colonias y el transporte público colapsó.
Al problema de la infraestructura en la Ciudad de México se le suma otro: la basura. Arrojar los desechos sobre la vía pública representa que en épocas de lluvias más de 3 mil 400 toneladas de basura se acumulen en barrancas, presas, coladeras y drenaje, ya que llegan a ocasionar hasta el 50 por ciento de las inundaciones en la capital del país.
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Ciudad de México, 9 de agosto (SinEmbargo).– La tormenta tropical “Franklin” se dirigía a la costa central del Golfo de México tras un paso relativamente benévolo por la península de Yucatán. Los pronósticos apuntan a que podría ganar fuerza y convertirse en huracán antes de regresar a tierras mexicanas a última hora del miércoles o el jueves.
Según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, “Franklin” comenzó a ganar fuerza tras regresar a aguas abiertas, y sus vientos máximos sostenidos alcanzaron los 70 kilómetros por hora el miércoles por la mañana. Se espera que el meteoro siga cobrando fuerza durante su avance por los tramos más bajos del Golfo de México y podría convertirse en huracán el miércoles por la tarde, agregó.
El centro de la tormenta se situaba a 315 kilómetros al este-noreste de Veracruz y se movía en dirección oeste-noroeste a 20 kilómetros por hora.
Las autoridades emitieron una alerta por huracán en la costa mexicana, desde Veracruz a Tuxpan, y se activó un aviso por tormenta tropical desde Veracruz hacia el sur a Ciudad de Carmen, Campeche.
El director general de Protección Civil, Ricardo de la Cruz, dijo el martes que el impacto inicial en la costa del Caribe no fue tan potente como se temía y sólo hubo que lamentar algunos árboles caídos y cortes de electricidad en algunas zonas.
“El segundo impacto puede ser incluso más fuerte que el primero”, agregó.
Las lluvias de “Franklin” podrían provocar inundaciones repentinas y deslaves en las montañas del centro de México, según los meteorólogos. En las zonas por donde pasará la tormenta se esperan entre 10 y 20 centímetros de agua, hasta 38 cm en algunas áreas.
Los desprendimientos nubosos de “Franklin” favorecerán cielo nublado y tormentas fuertes en el Valle de México.
En un comunicado, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) informó que se prevé cielo medio nublado a nublado con potencial de tormentas puntuales fuertes con descargas eléctricas en Puebla, Tlaxcala y Estado de México; así como lluvias en el Estado de México, Tlaxcala, Morelos e Hidalgo.
En lo que respecta a la Ciudad de México, se pronostica cielo nublado con lluvia dispersa sobre la mayor parte de la Ciudad de México y municipios conurbados.
La capital del país no está preparada para afrontar precipitaciones como las de los últimos días debido a la urbanización desordenada. De acuerdo con la Conagua, los escurrimientos pluviales ya no se infiltran, solo escurren por el asfalto y el concreto, saturando el sistema de alcantarillado que no tiene la capacidad de desalojar tanto el agua de lluvia, como las aguas negras de la ciudad.
Apenas en junio, las “lluvias atípicas”, como las llamó el Gobierno capitalino, en la Ciudad de México provocaron inundaciones en varias colonias y el transporte público colapsó.
Las personas tuvieron que ser rescatadas con lanchas. Mientras que en el Metro los usuarios fueron desalojados.
Al problema de la infraestructura en la Ciudad de México se le suma otro: la basura.
Arrojar basura a la vía pública representa que en épocas de lluvias más de 3 mil 400 toneladas de basura se acumulen en barrancas, presas, coladeras y drenaje, ya que llegan a ocasionar hasta el 50 por ciento de las inundaciones en la capital del país.
En la zona de Ermita Zaragoza en la delegación Iztapalapa, cada vez que sucede una lluvia mayor a los 30milímetros por metro cuadrado, el drenaje colapsa y las inundaciones a las viviendas es inevitable con la consabida perdida de bienes materiales, lo mismo sucede en la colonia Vicente Guerrero.
El funcionamiento por más de 50 años del actual drenaje en la Ciudad ya es obsoleto y provoca que se inunden muchas zonas de la Ciudad de México.
-Con información de AP
