Nuevo León probó con el PRI, con el PAN y fue el primer estado en apostar por un Gobernador independiente. Los resultados de sus mandatarios no han dejado satisfechos a sus ciudadanos y lo han hecho evidente en cada elección.
El pasado 1 de julio, el votante de Nuevo León hizo una elección histórica: entregó más votos al candidato de izquierda Andrés Manuel López Obrador, que a cualquier otro aspirante a la Presidencia de la República –incluido su Gobernador Jaime Rodríguez Calderón– y colocó como segunda fuerza en su Congreso a alianza encabezada por Morena-PT–PES.
Ciudad de México, 9 de julio (SinEmbargo).– Nuevo León durante décadas fue un bastión priista, dio un salto al panismo a finales de la década de los 90, regresó al partido tricolor al poder a inicios del 2000, y fue la primera entidad que entregó su gobierno a un independiente. Pero la elección pasada, le abrió la puerta a la propuesta de la izquierda: Andrés Manuel López Obrador, candidato de la coalición "Junto Haremos Historia", obtuvo 748 mil 104 votos.
Por detrás quedó el panista Ricardo Anaya, con 703 mil 866, una diferencia de 44 mil 238 votos. Y la misma entidad norteña refundió al Partido Revolucionario Institucional (PRI) y a José Antonio Meade en un cuarto lugar con 315 mil 379 votos y, dándole el tercero a su gobernador con licencia, Jaime Rodríguez Calderón “El Bronco” con 360 mil 050.
Estos resultados, de acuerdo con el colectivo #QueSirvan, es una muestra fehaciente de que Nuevo León decidió castigar al PRI de Rodrigo Medina y a "El Bronco", por los resultados de sus administraciones.
En votación de Presidente, la cantidad de votos que recibió Andrés Manuel López Obrador es un hecho histórico en Nuevo León.
“Nuevo León ha favorecido históricamente al Partido Acción Nacional o al PRI. Lo que es histórico es que Andrés Manuel y su coalición rebasó a esas dos fuerzas políticas, porque nunca había pasado anteriormente. No esperábamos estos resultados. Es un voto de castigo que trajo Morena”, comentó en entrevista con SinEmbargo, Juan Manuel Ramos, de #QueSirvan.
Los votos castigaron a los cercanos de "El Bronco", solo uno de sus cercanos ganó la Alcaldía de García, y los otros 16 aspirantes independientes, amigos y familiares del Rodríguez Calderón, no lograron alzarse con la victoria para llegar al Senado, diputaciones federales y locales, así como a otras alcaldías.
Esas son las decisiones de esa región: pasaron de un Rodrigo Medina a un candidato independiente y ahora a un gobierno que representa, de algún modo, la izquierda a nivel nacional.
“Ahora sí fueron los ciudadanos los que castigaron al PRI, los que castigaron a Rodrigo Medina. La elección de 2015 fue un voto de castigo al PRI a nivel gubernatura, pero todas las demás huestes salieron bien libradas: las diputaciones federales, locales y las alcaldías. En 2018 la gente quitó a todos los diputados federales del PRI, a los alcaldes –incluso Monterrey–, a todo lo que unía a Rodrigo Medina lo mandaron a su casa. Es la gente la que está castigando la inoperancia de Jaime Rodríguez que fue el que prometió un castigo, incluso con cárcel a Medina, pero que los casos no avanzaron. La gente dijo 'ya basta, estamos hartos'. Y castigaron con el voto”, agregó Ramos.
Los ciudadanos de Nuevo León consideran que el mayor problema que padece la entidad es la inseguridad y la delincuencia (un 79 por ciento colocó esta opción como la principal), luego está la corrupción (61.7 por ciento) y el mal desempeño del gobierno (43.3 por ciento), de acuerdo con la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental 2017, la más reciente.
Rodrigo Medina es uno de los ex gobernadores priistas que fueron señalados de corrupción y malversación de recursos.
En junio de 2016, el Gobierno de Nuevo León acusó al ex Gobernador, a nueve ex funcionarios, cinco ex servidores públicos, dos alcaldes, dos diputados federales, nueve empresarios, dos funcionarios bancarios, socios y familiares por desvíos de recursos e irregularidades por 9 millones de pesos en varias obras.
Medina fue acusado por la Subprocuraduría Anticorrupción por peculado, daños patrimoniales y ejercicio indebido de funciones por distintos apoyos a la empresa Kia Motors, pero luego un juez lo exoneró en agosto de 2016 de los delitos de peculado y daños patrimoniales.
El 26 de enero de 2017, Rodrigo Medina fue internado en el penal de Topo Chico para enfrentar acusaciones por peculado y delitos contra el patrimonio estatal de hasta 3 mil 128 millones de pesos. El ex Gobernador sólo pasó 19 horas internado y luego fue liberado.
En 2009, Medina de la Cruz recibió una deuda del también priista José Natividad González Parás de 27 mil 70 millones. A su salida en 2015 dejó un endeudamiento por 62 mil 946.8 millones de pesos de acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda. Medina de la Cruz incrementó más del doble la deuda de Nuevo León con 35 mil 878.8 millones de pesos.
HAY TRABAJO QUE HACER
Luego de las pasadas elecciones, el Congreso local quedó con 14 Distritos para el Partido Acción Nacional (PAN), 1 para el Partido Revolucionario Institucional (PRI), 1 para Movimiento Ciudadano (MC) y 10 para Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Partido del Trabajo (PT) y Encuentro Social.
La cámara actual, de acuerdo con una investigación de #QueSirvan, no transparentó el destino de 151 millones de pesos que se les fueron entregados entre 2015 y 2018 por concepto de “función legislativa”.
De ahí, 18 legisladores buscaron reelegirse sin pedir licencia, pues ellos mismos aprobaron una legislación que no les obligaba a hacerlo.
“Por ello, al no poder constatar peso recibido contra peso gastado, no se puede descartar la posibilidad de que el dinero público que se le asigna a las bancadas para función legislativa esté siendo utilizado actualmente con fines electorales”, alertó el colectivo, que constató que del 1 de enero al 31 de abril de 2018, los grupos legislativos de ese congreso local recibieron 20 millones 967 mil 102 pesos para función legislativa.
Esto significó, en plena campaña electoral, un incremento en este rubro del 14 por ciento con respecto al mismo periodo de 2017, y de 38 por ciento con respecto a 2016.
“El Congreso fue muy generoso con Jaime Rodríguez y le aprobó todo: un procurador muy cuestionado, creación burocrática, la licencia con 41 votos de 42. No fue un contrapeso, sino que en las decisiones que les convenían como gobierno las hicieron”, señaló Ramos.
Con esta nueva composición, agregó, se espera que se genere un contrapeso en las facultades de cada uno, no que se bloquee o que se hagan cosas de más, sino que se tengan claras las facultades que tiene el Legislativo y el Ejecutivo y que finalmente traiga un beneficio a los ciudadanos.
De entre las tareas urgentes que se deben atender están en primer lugar la corrupción, en general, y la inseguridad, tras el aumento en los delitos del fuero común, casa habitación y robos.
Luego está el de una infraestructura descuidada en los municipios, lo que también podría explicar los votos en contra del PRI.
“En Monterrey y en Guadalupe, municipios con alta densidad poblacional, hay un evidente descuido de la infraestructura de la ciudad, de las calles y demás. Eso lo observa la gente y lo padece todos los días”, sostuvo Ramos.
También mencionó el factor del medio ambiente, porque alrededor la zona metropolitana de Monterrey se tiene uno de los índices más altos de contaminación.
Y finalmente, la transparencia y la rendición de cuentas. “Tenemos una demanda muy alta en todos los niveles de gobierno […] La transparencia y la rendición de cuentas ha sido discursiva en todos los poderes y en todos los partidos; Morena no ha gobernado aquí entonces no sabemos cómo actuaría en el gobierno, pero es algo que debe estar en el top ten de las cosas que tienen que atender”, mencionó.
Finalmente, los resultados envían un mensaje a los partidos políticos de que Nuevo León no está casado con ningún partido ni tampoco con los independientes y por el contrario, es una región que castiga y vota en consecuencia.
“La gente le está diciendo a estos servidores públicos que si no se portan bien, que si no cumplen, los van a quitar. Sea quien sea: sea del PAN de 30 años, del PRI de toda la vida, seas el alcalde de la capital, seas del partido que seas. Vamos a estar muy vigilantes y como se dice, el pueblo pone y el pueblo quita […] Todo el estado le dijo adiós a los corruptos, a los priistas que no quieren saber más de ellos, de casas blancas, de estafas maestras, de Rodrigos Medinas, de abusos de Kia. El mensaje fue fuerte y contundente: estamos hartos de todos y vamos a recomponer esto porque no nos están funcionando”, concluyó Ramos.