Quadratín denuncia este día que la Secretaría de Salud del Estado de México amenazó a María Estrada, corresponsal del medio, con llevarla “por las buenas” a la ciudad de Toluca a comparecer y desdecirse por una nota publicada el pasado 6 de junio, donde habla de las condiciones en las que opera el Hospital Tejupilco.
Ciudad de México, 6 de julio (SinEmbargo).- María Estrada, corresponsal de Quadratín en el Estado de México, recibió amenazas de parte de la Secretaría de Salud de la entidad, luego de que publicara "Desnudan corrupción e ineficiencia en Hospital de Tejupilco".
El texto, publicado el pasado 6 de junio, da cuenta de la situación que viven los pacientes atendidos en el Hospital General Miguel Hidalgo y Costilla, donde los servicios no son competentes y los mismos médicos envían a los enfermos a clínicas privadas, de las que obtienen beneficios.
Quadratín denuncia este día que la dependencia amenazó a Estrada con llevarla “por las buenas” a la ciudad de Toluca a comparecer y desdecirse de lo publicado, ante la titular del Voluntariado del Instituto de Salud del Estado de México, por presuntamente dañar la imagen del Secretario de Salud y de la dependencia, así como por poner en peligro el trabajo de muchos.
"Quadratín Estado de México reitera todo su respaldo al trabajo de la periodista María Estrada y de todos sus colaboradores, y hace votos porque cese de inmediato esta ola de hostigamiento que vulnera los Derechos Humanos de Libertad de Prensa y de Expresión, y que daña al debate público y al Estado democrático en el que México vive", escribió el medio digital.
En la nota de Estrada se explica que el Hospital de Tejupilco atiende las emergencias de todos los pobladores sureños, e inclusive del estado de Guerrero, sin embargo "los servicios con los que cuenta son incompletos para la demanda de los derechohabientes del Seguro Popular, que en muchas ocasiones no se lo hacen valer".
También indica que los médicos obligan a los familiares del paciente a realizarse diferentes estudios en clínicas particulares, de las cuales reciben una comisión por cada persona que envíen.
Con apoyo del área de Trabajo Social, los médicos pueden obligar a los pacientes a usar sus servicios particulares, menciona la nota, pues "son quienes por instrucciones del médico en turno llama a los familiares para llevar a su paciente fuera del nosocomio a realizarse los estudios correspondientes en la ambulancia -que a propósito es propiedad del gobierno del Estado de México-, servicio por el que cobran 200 pesos por el traslado local, más el costo de los estudios".
Los pacientes son tratados de forma prepotente por los médicos, denuncia el texto de Estrada, además están "siempre quejándose de las condiciones laborales sobre las que están obligados a trabajar por parte del Sector Salud" .