La seguridad de los Juegos Olímpicos de Invierno estará en mano de los famosos drones "caza drones".
Por Miguel Martínez Moral
Ciudad de México, 5 febrero (AS México/SinEmbargo).- Los drones se han apoderado de Corea del Sur, de igual forma que ha sucedido en casi todas las partes del globo. Eso es un hecho que no ha escapado a los organizadores de los Juegos Olímpicos de Invierno de Pyeongchang, que comenzarán este mismo viernes entre excepcionales medidas de seguridad.
Entre los muchos escenarios posibles que se están contemplando, se está prestando especial atención a un ataque terrorista por medio de drones, algo para que los cuerpos de seguridad del país parece estar totalmente preparados pues ya han puesto en marcha medidas para hacer frente a posibles ataques aéreos.
Durante los Juegos Olímpicos de Invierno hasta 60 mil efectivos de seguridad harán todo lo posible para garantizar la seguridad de los atletas y de los espectadores que asistan a los Juegos. Un equipo de estos efectivos estará destinado a garantizar la integridad de los mismos mediante el control de una zona de exclusión aérea que acabaría con todos los posibles ataques realizados mediante el uso de drones.
El espacio aéreo alrededor de los Juegos ha sido declarado zona de exclusión aérea para aeronaves no autorizadas, y habrá un radar especial de detección de drones desarrollado por el Instituto Avanzado de Ciencia y Tecnología de Corea. Es por ello que ya se cuentan con diferentes alternativas para acabar con estos posibles vehículos no tripulados que quieran “unirse a la fiesta”.
CÓMO ACABAR CON ATAQUES DE DRONES
Para evitar este tipo de ataques, los miembros de seguridad de Corea de Sur cuentan entre su “arsenal” con rifles de bloqueo de señal que pueden interceptar las comunicaciones entre un piloto y su dron para derribarlo en el momento. En casos extremos podría incluso utilizarse un helicóptero para acabar con el dron antes de que el mismo pueda causar cualquier tipo de daño.
Sin embargo, lo más espectacular es el dron caza drones, un vehículo multi-rotor (más potente que un dron habitual) que lleva redes que pueden utilizarse para deshabilitar un dron no tripulado. Para ello los coreanos disponen de pilotos de drones altamente capacitados para perseguir a posibles vehículos aéreos no tripulados. No es la primera vez que se usan este tipo de drones para labores de seguridad, pues ya en 2015 Japón los utilizó para un objetivo similar.
Los sistemas de seguridad de los Juegos Olímpicos de Invierno se completan con tecnologías de reconocimiento facial distribuidas por las instalaciones donde tengan lugar las distintas disciplinas olímpicas.