México, 4 Sep. (Notimex).- La reforma de telecomunicaciones y radiodifusión no afecta la autonomía y actuar del Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel), el cual ahora está en un momento de acción, aseveró el comisionado Fernando Borjón Figueroa.
Ello, luego de que este miércoles con dos votos en contra y cinco en favor se decidiera no presentar la controversia constitucional en contra de la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión, vigente desde el 13 de agosto pasado, por el tema de invasión de facultades.
Entrevistado en el marco del “Foro Internacional de la Reforma de Telecomunicaciones”, organizado por Atlantic Council, el funcionario dijo que esta decisión se tomó tras analizar el documentado presentado por dos comisionadas, tanto en lo general como en ciertos temas en lo particular.
Aclaró que el documento de las comisionadas Adriana Labardini y María Elena Estavillo, fue presentado con oportunidad, con una semana de antelación, con un análisis a nivel jurídico en distintos puntos de vista y de un tema discutido por todos desde hace tiempo.
De ahí que tras estudiar el documento por parte de cada uno de los comisionados y exponiendo razones en lo particular, “primero se hizo una votación en lo general, viendo cuales eran las probabilidades de cada uno de los temas y después sobre otros dignos de análisis”.
“Estamos ahora en un terreno de pasar a la acción, necesitamos estar en decisiones, acciones, en puntos. En pasar ya este terreno de la discusión a otra parte, a la de la acción y de los resultados que vayan en beneficio del público. Podemos vivir discutiendo o podemos vivir actuando”, subrayó.
La autonomía ya está otorgada al Ifetel por la Constitución y “nuestro tema es ejercer la autonomía, actuar en esa autonomía en el marco de la Ley; la autonomía se construye con las acciones”, abundó Borjón Figueroa.
Señaló el hecho de tener una reforma constitucional que dio a este organismo un gran paso a nivel judicial y que son los juzgados especializados.
Además, estimó, una discusión a nivel controversia constitucional no es una decisión que un juez o la Suprema Corte resuelva en un mes, es una decisión que toma tiempo, más de un año, por lo que “en el inter, preferimos la parte de la acción”.