Acusados por buscar ayuda por su cuenta para el adolescente herido y amenazados por enviados de Seguridad Pública, la familia de César Eduardo no baja la guardia: exigen justicia.
Por Myrna Gómez
León, Gto., 4 de agosto (SinEmbargo/ZonaFranca).- Con amenazas y sin apoyo, viven su duelo los familiares de César Eduardo, joven que murió por una bala presuntamente disparada por un agente de la Policía Municipal.
Desde el viernes por la tarde, la Secretaría de Seguridad Pública negó que haya sido uno de sus elementos quien disparó contra el joven de apenas 17 años, e informó que las armas que portaban los policías en ese momento, fueron entregadas a la Procuraduría General de Justicia del Estado para que se investigue.
En una reunión que tuvieron los padres del menor con Héctor López Santillana, alcalde de la ciudad, y Jorge Guillén, director operativo de la Policía municipal, los primeros aseguraron que se les negó el apoyo para encontrar al culpable del asesinato.
“[El comandante] Guillén frente al presidente municipal nos dijo así descaradamente que le hiciéramos como podamos, que ellos tienen muchos licenciados y están muy amparados, que nos arregláramos como podamos, que no íbamos a lograr absolutamente nada”, dijo María del Carmen, madre del menor asesinado.
Luis Enrique Ramírez Saldaña, Secretario de Seguridad Pública en días pasados confirmó que el elemento que presuntamente disparó en contra del joven había faltado al trabajo. Pero al ser cuestionado si descartaba que éste se haya fugado, respondió que cuenta con un defensor y precisó que se está cubriendo todo el proceso legal.
“Nosotros ya no sabemos qué hacer, nos dijeron que le hiciéramos como quisiéramos y que no íbamos a lograr nada”, comentó Julio César Ojeda, padre de la víctima.
ELLOS NO SABEN NADA
Personal de Recursos Humanos de la Policía Municipal visitó a la familia, pero fue en vano el acercamiento, ya que niegan tener contacto alguno con el que habría matado al joven César Eduardo.
“Simplemente dicen que no saben nada del agente, que ellos no tienen sus datos, ni saben quién fue”, denunció María del Carmen.
La Procuraduría de Justicia informó que ningún elemento ha sido detenido ni puesto a disposición debido a que la investigación se encuentra en curso. Varios medios indicaron que Arturo Gutiérrez Silva, uno de los agentes que atendió el reporte durante la madrugada del viernes, dejó de presentarse a trabajar a la corporación.
“Ellos se están lavando las manos, no quieren dar la cara, simplemente ocultan la información y no aceptan la culpa, además de que nos acusan a nosotros de haberlo movido para que recibiera atención médica”, mencionó la mamá de César Eduardo.
DERECHOS HUMANOS SIGUE INVESTIGANDO
Por su parte, la Procuraduría de los Derechos Humanos del Estado de Guanajuato (PDHEG) ha iniciado una investigación, de manera oficial, por el presunto homicidio del joven César Eduardo a manos de un policía municipal de León; en tanto, la Procuraduría de Justicia del Estado se ha mantenido hermética a dar información sobre el avance de la averiguación.
De manera oficiosa, la carpeta de investigación número 204/16-A ya solicitó al Secretario de Seguridad Pública de León, Luis Enrique Ramírez Saldaña, un reporte detallado de lo ocurrido la madrugada del viernes y el parte informativo que entregaron los policías presentes durante el hecho.
La familia de César Eduardo niegan tener el apoyo para esclarecer este asunto, no saben qué medida tomar para que se haga justicia, no quieren que esto quede impune.
“Sabemos que ya no me van a regresar a mi niño, pero no quiero que la persona que me lo mató vaya por la vida así como si nada pasara, él debe pagar por lo que hizo, porque es un asesino que hasta se ha de estar burlando de nosotros por no poder hacer nada, da coraje e impotencia que lo estén encubriendo”, recalcó María del Carmen, madre de la víctima.
LO ACUSAN POR MOVERLO DEL LUGAR
En varias pláticas que los padres han tenido tanto con el alcalde Héctor López Santillana, Jorge Guillén Romo, personal de Policía Municipal, y otros más, todos los han acusado que fue culpa de los familiares que el chico falleciera, por no esperar a que llegara la ambulancia al lugar, y que lo hallan movido en un coche particular.
“¿Qué querían que hiciéramos? Esperamos más de una hora a que llegara la ambulancia, hicimos varias llamadas y no atendieron nuestro reporte. Yo ya lo sentía frío, él ya había muerto, pero quisimos aferrarnos a que él seguía con nosotros”, reprocha la mamá.
Además de que los interceptó una patrulla con elementos de policía municipal, los cuales tomaron el pulso al joven, no dijeron nada y los dejaron continuar su camino, cosa que indignó a los familiares.
“¿Qué les costaba decirnos la verdad? Ellos ya sabían las cosas, están comunicados por el radio, simplemente dejaron que siguiéramos nuestro camino para después venirnos con esas cosas de que fue nuestra culpa que se muriera, mientras que uno de ellos fue el que disparó”, declaró la madre de César Eduardo.