México, 4 Abr. (Notimex).- Los elementos arquitectónicos que conforman el Palacio de Minería, así como la ideología y estilos que manejó su creador Manuel Tolsá (1757-1816) fueron abordados anoche por la investigadora Elisa García Barragán, al impartir una conferencia magistral, como parte de las actividades conmemorativas del bicentenario del citado recinto.
Previo a la participación de García Barragán, el director de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), José Gonzalo Guerrero, recordó que la construcción ha sido de gran importancia a lo largo de la historia, ya que sus espacios no sólo fungieron como un lugar educativo, sino también como uno de esparcimiento.
En la Antigua Capilla del Palacio de Minería, manifestó que se trata de un edificio con mucha historia que celebra orgullosamente dos siglos de su edificación.
Luego de su breve intervención, dio por inaugurada la conmemoración de los 200 años de la construcción del edificio.
Al iniciar su participación, titulada "El Palacio de Minería, sublime creación de Manuel Tolsá", García Barragán puntualizó que más allá de una conferencia, su intención era charlar y reflexionar en torno al devenir del recinto y de su constructor, sin hacer un recuento de la historia del arte.
Dijo que la edificación es un monumento demostrativo de la ideología y el gran talento de su constructor, quien se caracterizó por su inteligencia e inquietud sobre la arquitectura; Tolsá buscó siempre nuevos senderos en esta disciplina, que conjugó con las enseñanzas recibidas en la Academia de San Fernando, de Madrid, España.
De acuerdo con la investigadora, del paso del arquitecto por la Academia de San Carlos de Valencia, España, a pesar de que él mismo declaró explícitamente que estudió ahí, no está documentado, es decir no hay nada que así lo compruebe.
Tolsá llegó a la Nueva España en 1791, luego que fue nombrado Académico Emérito en San Fernando y más adelante se le designó Académico y director de Escultura de la Academia de San Carlos en México.
La especialista explicó que bajo una ideología reformista, Tolsá buscó dejar atrás los estilos churriguerescos, aunque nunca desapareció en él tintes del estilo barroco a pesar de propagar el estilo neoclásico, adhiriendo a su diseño del Palacio de Minería elementos de éste último.
Otras de las obras reconocidas de Tolsá, mencionó García, son un busto de Hernán Cortés y su participación en la conclusión de la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México, estructura de la cual decoró las torres y el frontis con estatuas, además de diseñarle la cúpula, las balaustradas y los zócalos de los cruces del atrio.
Es también autor de la casa de los marqueses de Buenavista, hoy Museo Nacional de San Carlos, y de la escultura del rey Carlos IV de España, la cual fue bautizada por el pueblo como "El caballito", emblemática escultura que posicionó a México a la altura de ciudades Europeas.
La ornamentación neoclásica de la edificación de dos siglos, dijo, se puede observar en las Palastranas Caramel y los macetones, que hoy día siguen manifestando los ideales de la Ilustración, progreso y modernidad, que caracterizaron a Tolsá.
